{/source}” alt=”La Pampa: cuando la justicia es cómplice” />
Por Dagna Faidutti. El asesino de Cristian Azcona recibió penas mínimas, por considerar el homicidio -sin evidencia alguna que lo sustente- como defensa legítima de la propiedad privada. Qué pasa cuando “para el pobre no hay justicia” y quienes deberían investigar miran para otro lado.