Por Rodrigo Martínez. Este jueves se estrenó Gravedad, la última película del mexicano Alfonso Cuarón. George Clooney y Sandra Bullock, perdidos en el espacio, protagonizan uno de los más disfrutables films de ciencia ficción de los últimos años.
Un pensamiento frecuente, especialmente durante la infancia, es: ¿Qué pasaría al quedarse flotando en el espacio? ¿Existe alguna posibilidad de salvarse? Gravedad, el último film del mexicano Alfonso Cuarón, también se lo pregunta.
La película tardó aproximadamente tres años en rodarse y muchas estrellas se postularon para ocupar los dos únicos protagónicos que tiene el film, hasta que finalmente Sandra Bullock y George Clooney fueron los elegidos. Desde un principio Gravedad generó muchas expectativas, tanto por su trama ambiciosa y compleja como por las dificultades de sostener la dinámica con sólo dos personajes. Pero el desafiante director mexicano Alfonso Cuarón, quien ya había sorprendido con el drama Y tu mamá también (2001) y emocionado hasta poner la piel de gallina con Los niños del hombre (2006), sale más que airoso de la prueba.
Por el lado del reparto, encontramos a dos actores bien hollywodenses. Sandra Bullock, habitualmente catalogada como una buena actriz que hizo muchas comedias para un domingo sin futbol, tales como Miss Simpatía o Amor a segunda vista, junto con dramas tan políticamente correctos como Crash, Un sueño posible o Tan fuerte, tan cerca. Pero, para no menospreciar su trayectoria, también hay que recordar su papel de Lelina en El Demoledor (con Sylvester Stallone). En cambio, George Clooney es una “cara bonita” que demostró tener talento no sólo para actuar en buenas películas sino también para dirigirlas (Confesiones de una mente peligrosa y Secretos de Estado, entre otras). En fin, Gravedad , que comenzó a rodarse el 3 de mayo de 2011, contó con un presupuesto aproximado de 80 millones de dólares para un proyecto con dos actores y algunas voces en off.
La película trata sobre dos astronautas que deben reparar el mal funcionamiento de un satélite. ¿Cuál es el problema? Una lluvia de chatarra se acerca a ellos a gran velocidad proveniente de un satélite ruso cercano para convertir a la misión en una terrible pesadilla en la que la doctora Stone (Sandra Bullock) se desprende de la nave y queda girando sobre sí misma, sin control, en el espacio exterior. La única forma de salvarse y regresar a la Tierra será llegar como se pueda a una estación rusa, para luego alcanzar otra estación china.
Fueron muchas las películas que tuvieron una temática espacial que merecen un buen reconocimiento (sin contar a la incomparable 2001, de Kubrik), desde Moon (de Duncan Jones, con Sam Rockwell) hasta la divertida Jinetes del espacio (de y con Clint Eastwood), pero Gravedad es una de las mejores en su género (para no decir la mejor). El film de Cuarón, aparte de ser un thriller de ciencia-ficción que atrapa y desespera, cuenta con un entorno fílmico alucinante que nos sumerge íntegramente en la inmensidad del espacio. Para ponerle una frutilla al postre, Sandra Bullock exprime su desempeño actoral para lograr la mejor interpretación en toda su carrera. Así que si existe alguien que la sigue cuestionando, que vea Gravedad y luego corra a pedirle perdón.
Como balance general, Gravedad demuestra que una trama con dos personajes puede entretenerte y a la vez ser ambiciosa en todos los sentidos que un espectador pueda encontrar.