Por Mario Hernández. El reciente anuncio de Cristina eximiendo de pagar ganancias sobre el medio aguinaldo de diciembre tuvo un efecto paralizante. Cómo pasar el fin de año tras la notificación presidencial y evaluar las paritarias 2015.
Ante la perspectiva de una nueva huelga nacional, el Gobierno nacional terminó cediendo que no se aplique el impuesto al salario sobre el aguinaldo. En varias provincias los gobernadores -para evitar paros y movilizaciones- ya habían otorgado bonos de fin de año. También está claro que el gobierno echó lastre con el medio aguinaldo para salvar la vida de ese impuesto confiscatorio al trabajo que se lleva hasta dos salarios anuales.
Esto le permitió a la burocracia sindical dejar de lado la reivindicación de un aumento de salarios y jubilaciones que compense la inflación. Los poderosos gremios del transporte que el miércoles previo al anuncio presidencial habían lanzado la convocatoria a la huelga, que luego ratificó Hugo Moyano y su CGT, lideraron la presión por levantar la medida.
Los sindicatos oficialistas, por otro lado, han hecho lo mismo con el reclamo de un bono que se dirime en cada empresa. En diversos lugares, las empresas ya se habían hecho cargo del monto del impuesto sobre el aguinaldo. Está claro que la burocracia de diversos colores rechazó el planteo de reabrir las paritarias.
Solo la CTA volverá a la calle el 18 de diciembre para reclamar un aumento de emergencia para los jubilados y un bono de cuatro mil pesos para los trabajadores y trabajadoras de todo el país y para los integrantes de las cooperativas y planes sociales.
Gremio por gremio
En materia de bonos, los Capitanes de Pesca de Jorge Frías y los metalúrgicos de Caló siguen peleándola con sus empleadores. Según trascendió, la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) arreglaría un bono de 3 mil pesos para los trabajadores de las grandes plantas metalúrgicas y de 2 mil para aquéllos que trabajan en las pymes del sector. Se concretó otra reunión entre el gremio con las cámaras de la actividad metalúrgica y siderúrgica. Las empresas mantuvieron una posición de firme negativa al reclamo del bono de $ 3.000 elevado por el sindicato. El gremio replanteó su pedido al pago de mil pesos por mes durante el trimestre enero-marzo. Volverán a reunirse el miércoles que viene.
Habrá que seguir con especial atención lo que ocurra con la anticipada paritaria docente. El jueves próximo habrá una reunión clave en el Ministerio de Economía bonaerense, que fuera de lo que se arregle para 2015, estaría propiciando un incremento del 7 al 12 por ciento para los meses de enero y febrero.
Además de salarios, los docentes reclaman por el estado de quebranto de su obra social (IOMA) y por la reposición de los comedores escolares en su totalidad. El pasado martes 9, y a pocas horas de realizarse la reunión paritaria convocada por el Gobernador Daniel Scioli y funcionarios de la cartera de educación, docentes de las seccionales opositoras del SUTEBA -La Plata, Ensenada, La Matanza, Tigre, Escobar, Quilmes y Berazategui- se movilizaron a la Dirección General de Escuelas y luego a la Secretaría de Recursos Humanos. Allí exigieron un bono de emergencia de fin de año de dos mil pesos por cargo, la devolución de salarios adeudados y de los descuentos por paro.
El conflicto docente incluye además la lucha contra la burobracia sindical. En medio de la convocatoria del Gobierno, se denunció que Baradel (SUTEBA) y Petroccini (FEB) y las direcciones del Frente gremial (FGDB) y se preparan para comenzar una negociación a espaldas de la base docente, ya que no han convocado ninguna asamblea para discutir.
A la paritaria fueron citados los cinco sindicatos del FGDB, que integran SUTEBA, FEB, UDA, los técnicos de AMET, los privados de Sadop, UDOCBA y UPCN. Y como era de esperar, el gobierno hizo una propuesta irrisoria e inaceptable. Propuso un primer tramo de aumento del 7% para cobrar a partir de enero y a cuenta de futuras negociaciones. Se pautó una nueva reunión para el próximo jueves 18.
Los sindicatos petroleros de todo el país cerraron un anticipo de su paritaria, que incluirá un bono de fin de año y tres cuotas de al menos $ 6.000 mensuales no remunerativos de enero a marzo, con la novedad de que todos los pagos quedarán exceptuados del pago de Ganancias por una resolución especial del Ministerio de Trabajo. El pacto sellado ante funcionarios por los gremios y las empresas petroleras fijará, además, un nuevo piso de aumento salarial del 13% para la negociación de 2015.
El acuerdo implicó un compromiso de paz social hasta abril, cuando las partes volverán a discutir los salarios en el sector. Firmaron los sindicatos patagónicos que habían iniciado la discusión, y se les sumaron los del resto de las provincias y la Federación Argentina Sindical de Petróleo, Gas y Biocombustibles. También participaron los de jerárquicos. Se calcula que el convenio alcanza a unos 80.000 trabajadores.
Gremios y empresas productoras de hidrocarburos pactaron en los siguientes términos: el pago de un monto no remunerativo total de $ 24.000 en cuatro etapas, con una primera cuota en diciembre de $ 6.000 -considerada como una compensación por Ganancias-, y otras tres mensuales, de igual valor, entre enero y marzo.
Los camioneros de Hugo Moyano comenzaron la semana pasada con paros de actividad parciales, en demanda del pago de un bono salarial de fin de año. Las medidas fueron adoptadas bajo la modalidad de asambleas de tres horas por turno. El sindicato, de esa manera, metió más presión a las cámaras empresarias de la actividad sin generar una huelga declarada.
La semana pasada hubo una contraoferta cercana a $ 2.500 que fue rechazada por la organización sindical.
La Asociación Bancaria acató el viernes la conciliación obligatoria dictada por el Ministerio de Trabajo y levantó el paro de 48 horas en reclamo de un bono de fin de año de 7.500 pesos, que iba a afectar a algunas entidades públicas que aún no aceptaron el pago del plus salarial.
La medida de fuerza había sido ratificada, pero sólo iba a regir para el Banco Nación, Central y Caja Popular de Tucumán ya que el resto de las entidades públicas del país había aceptado pagar el plus pretendido por los trabajadores.
La semana pasada el gremio consiguió un acuerdo con ADEBA (bancos privados locales), ABA (extranjeros) y ABE (banca especializada) para el pago de una compensación salarial de 7.500 pesos, a abonarse el 5 de enero, por única vez.
Los trabajadores de la Línea 60 desarrollaron el pasado 11 de diciembre una manifestación frente al Ministerio de Trabajo que reunió a más de 400 trabajadores, luego de un paro total. Reclaman el cese de las suspensiones persecutorias y arbitrarias, la reincorporación de los despedidos y el aumento de la frecuencia. Denuncian que la empresa DOTA desvía los subsidios millonarios que le otorga el gobierno de Cristina y Randazzo, con el aval del propio Estado que no ha dado ninguna respuesta a través del Ministerio de Trabajo.
La directiva de la UTA a cargo de Roberto Fernández debía reunirse con representantes de Dota y el Ministerio, pero la burocracia que dirige el gremio no se presentó. Por ese motivo los trabajadores hicieron una asamblea sobre la Av. Callao (CABA), en la que decidieron el no cobro de boleto desde el día lunes 15 por tiempo indeterminado hasta que no se den respuestas a sus reclamos.
¿Dime con quién andas?
El gobierno porteño se encuentra en estos días negociando un aumento de salario a los trabajadores del Subte para evitar un proceso de paros escalonados, y ha otorgado un plus salarial para los trabajadores municipales de dos mil pesos.
Mientras, Ezequiel Sabor, subsecretario de Trabajo del gobierno de la Ciudad, se anima a ponderar que ninguno de los candidatos presidenciales en danza se ha reforzado tanto en materia sindical como Mauricio Macri, quien la semana pasada e puso un broche a esa tarea de reclutamiento apareciéndose a los postres de una comida con unos 70 gremios que lo acompañarían en su aventura electoral por la conquista de la Casa Rosada.
Algunos datos para tener en cuenta
La tasa de empleo “en negro” se ubicó en 33,6 por ciento en el tercer trimestre del año, un punto menos respecto al resultado del mismo período del año pasado, según informó el Indec. De esta forma, de acuerdo con los datos oficiales 4.100.000 empleados no están registrados, sobre un total de asalariados en torno a los 12.344.000. Mientras, la tasa de desempleo subió de 6,8 a 7,5 por ciento.
De acuerdo a los datos de la consultora Tendencias Económicas, en los primeros once meses del año se registró un importante incremento de la conflictividad social. Mientras los paros y despidos se duplicaron en comparación con el mismo período del 2013, las suspensiones aumentaron ocho veces en el mismo lapso, localizadas en las ramas de electrónicos, calzado, metalúrgicas, fundición, automotriz, textiles y neumáticos. Sólo en el mes de noviembre la conflictividad sindical medida en cortes de vías públicas arrojó más de 300 piquetes. Los trabajadores estatales encabezan la lista, según la Consultora Diagnóstico Político.