El pasado viernes 3 de agosto por la noche Mario, hermano de Luciano Arruga (desaparecido el 31 de enero de 2009 por la policía) fue interceptado por un auto sin patente y cacheado por un policía sin identificación. Los familiares, junto a la APDH de La Matanza, denunciaron el hecho.
Luciano Arruga tenía 16 años cuando desapareció por negarse a robar para la policía de Lomas del Mirador. Desde entonces su familiar, junto a diversas organizaciones políticas y de derechos humanos viene exigiendo justicia pero Luciano sigue sin aparecer. Si se ha conseguido que el destacamento de la policía bonaerense donde desaparecieron a Luciano sea trasladado y en su lugar funcione un Espacio para la Memoria.
Mario tiene 16 años y el viernes pasado fue interceptado por la policía cuando volvía de trabajar. Un auto sin patente le dio la orden de alto y dos hombres (uno de civil y otro vestido de policía) se bajaron del mismo, lo pusieron contra la pared y lo cachearon. “La situación en los barrios de Lomas del Mirador es bastante complicada con la policía. Hace un tiempo que están muy violentos” comentó Vanesa Orieta, hermana de Luciano y Mario, en diálogo con Marcha. Además agregó que ni bien supieron del hecho “lo denunciamos inmediatamente porque la policía hace un tiempo que viene amenazando a los pibes con armarles causas. Evidentemente lo que les molesta es la organización del barrio por el caso de Luciano y para meter miedo lo que hacen es eso: amedrentarlos, llevarlos detenidos por averiguación de antecedentes”.
Por su parte, Pablo Pimentel, titular de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) de La Matanza comentó en diálogo con radio Fribuay FM 90.7 que el policía que intercepto a Mario “tenía la chapa pero no tenía el nombre donde cada miembro de la policía debe tenerlo obligatoriamente. Actuaron totalmente al margen de la ley”. Respecto al procedimiento legal informó que ni bien la familia de Mario se comunicó con ellos procedieron a hacer la denuncia en la fiscalía. “Lo que hicimos fue el sábado a la mañana ubicar al fiscal de turno y a las tres de la tarde estábamos haciendo la denuncia junto con Mónica, la mamá, porque él [Mario] es menor. La denuncia se hizo ante el doctor Quiroga” de la fiscalía número nueve de La Matanza, “quién estaba de turno y es el responsable ahora de investigar qué es lo que ha pasado” completó Pimentel.
Hablando sobre la situación de su hermano, Vanesa sostuvo que “actuó bien. Primero lo que hizo fue detenerse a pesar de que le dio mucha desconfianza el auto y las personas que estaban en él. Pero como vio una persona uniformada, para no darle justificación a que lo siguieran o lo trataran de mala forma se detuvo y les dijo que no sabía nada”. Pero aclaró que esta situación se da con Mario porque “está contenido” por su familia que a su vez “está apoyada por muchas organizaciones, por organismos de derechos humanos, por individuos comunes y corrientes que están ahí con nosotros en una actitud solidaria”. Pero la situación para el resto de los jóvenes de Lomas del Mirador es otra. “Hay otros pibes del barrio que no tienen ese acompañamiento” afirma Vanesa. “Tratamos de darles las herramientas a los jóvenes para que se defiendan pero lamentablemente cuando ellos están en la calle están solos y la policía es muy violenta”.
Finalmente, Pimentel planteó algo a tener en cuenta a la hora de analizar el caso: “esto que vivió Mario fue lo que vivió Luciano en los meses previos a su desaparición cuando la policía del destacamento de Lomas del Mirador lo detenía, lo paraba, lo interrogaba o le hacía propuestas como robar para ellos”. Y con mucha crudeza concluyó que “negarse a esto fue lo que entendemos lo condenó a Luciano cuando lo detienen, lo torturan y lo matan. Esto es lo grave que le dijimos al fiscal. Que podría haber sido un interrogatorio nomás, pero no lo es y no fue hecho a cualquiera”.
En un comunicado conjunto de los familiares de Luciano Arruga y la APDH de La Matanza sostuvieron que “esto le suceda al hermano de Luciano Arruga, habla de la impunidad deliberada de una asociación mafiosa que alcanza a la institución policial, con el aval necesario de la política y de la justicia”. Además recordaron un hecho que pasó inadvertido para muchos y fue el ataque a la sede de APDH-La Matanza hace algunas semanas “dejando un claro mensaje, ‘no hablen, no miren”.
Este sábado, desde las 13 horas familiares y amigos de Luciano Arruga, junto con organismos de derechos humanos estarán realizando en el Espacio para la Memoria que es el ex destacamento de Lomas del Mirador, una radio abierta. Tal como explicó Vanesa la radio “se llama Zona Libre. Es una radio que nace denunciando la forma burocrática con que quiere manejar el municipio de La Matanza el Espacio para la Memoria”. En el acto se recordará a Luciano y se volverá a denunciar el amedrentamiento constante que vienen sufriendo los jóvenes del barrio y las distintas personas y organizaciones que acompañan el pedido de justicia.