Trabajadores desocupados de Gral. Pico, La Pampa, mantienen desde la madrugada del miércoles una ocupación de la sede del gobierno del municipio en reclamo por ayuda económica.
El dia de ayer a las 6 de la mañana, los alrededores de la municipalidad pampeana de General Pico amanecieron con un escenario poco frecuente para los habitantes de esa localidad. Es que las esquinas aledañas al edificio estaban cubiertas por carpas, fuegos donde se calentaban pavas y matecocidos, y niños amanecidos que, junto a sus padres, habían llegado para hacer visible un reclamo que lleva casi tres semanas sin respuesta de las autoridades: pasar unas fiestas dignas.
El reclamo de los trabajadores desocupados consiste, entre otros puntos, en pedir una suma de 2500 pesos por única vez para acceder a la canasta navideña y de Fin de Año. Este subsidio alcanzaría a 137 personas. A diferencia de los 41.500 trabajadores en relación de dependencia que recibirán el subsidio de 1200 pesos por parte de las mismas autoridades municipales, los sectores más postergados no ven en el horizonte la misma suerte para ellos.
Al respecto, Ricardo De Udaeta del MTD le explicaba a Marcha vía telefónica lo siguiente: “Hace 20 días institucionalizamos el reclamo acercándole al municipio varios puntos que creemos necesarios para poder pasar un Fin de Año digno. Tener algo para comer, algo para brindar, algo para nuestros hijos, porque los pobres también tenemos derecho a festejar. Al no haber respuesta se comenzó con un plan de lucha el día lunes. Luego de pasar varias noches acá, y ante la desidia de los representantes del municipio, decidimos permanecer dentro del edificio de la municipalidad hasta que algún funcionario nos dé una respuesta concreta”.
Luego de 20 días de un diálogo infructuoso, el Secretario de Desarrollo Social de General Pico, Daniel López, decidió dar por terminada la negociación que llevaba adelante con movimientos de desocupados y de autoconvocados. De esta forma deja sin respuesta un reclamo de varias semanas.
Cerca de 90 militantes del MTD, entre los que se encuentran autoconvocados, permanecen en las instalaciones, el rumor que recorría los pasillos y las calles de la ciudad como un fantasma era que el grupo GEOF de la policía iba a entrar por la noche a desalojar el edificio. Con esta preocupación De Udaeta le explicaba a Marcha: “En La Pampa es muy difícil conseguir abogados que representen a movimientos sociales. Necesitamos la solidaridad de todos porque este es un reclamo justo y en General Pico se está empezando a visibilizar algo que nunca se quiso ver, nuestra situación”.
Integrantes de movimientos de desocupados y de autoconvocados quedaron excluidos del bono de 1200 pesos que recibieron los sindicatos de “La Intersindical”, cifra arreglada entre el municipio y esta última coordinadora de trabajadores asalariados con motivo de paliar la falta del dinero necesario para cubrir una canasta básica de Navidad y Año Nuevo. Si los trabajadores en relación de dependencia, a través de sus representantes gremiales, manifiestan su imposibilidad de cubrir los gastos que generan estas fechas festivas, los desocupados y marginados socialmente, ¿qué tienen para decir?
“Si los compañeros que tienen trabajo, y perciben un sueldo todos los meses, le han dicho al intendente que no pueden cubrir los gastos de las fiestas, imaginemos que sucede con nosotros, que no tenemos trabajo y en varios casos, ni siquiera casa. Por eso, si el municipio puede destinar casi 50 millones de pesos a La Intersindical, bien puede destinar este subsidio a los compañeros que presentamos en la lista”, de esta forma, De Udaeta le pone palabras sencillas a un problema que el municipio quiere presentar como más complejo de lo que es.
En los últimos años, producto del hartazgo, los movimientos de desocupados vienen teniendo una curva ascendente de organización en General Pico. Una muestra de ello es la asamblea de más de 150 personas, en su mayoría mujeres, en donde se tomó la decisión de avanzar con medidas de fuerza que generen una reacción en los funcionarios municipales. Pero el movimiento pareciera venir por otro lado, y no por el esperado.
“El escenario que quiere preparar el municipio, para apelar incluso a una represión, es algo que nos tiene muy preocupados. Nosotros militamos para que nuestros compañeros puedan llevar algo de comer a su casa en Navidad”, continúa De Udaeta, y agrega: “Lo más lamentable es que los medios nos sacan en tapa en esta provincia solo cuando hay conflicto, jamás somos tapa o noticia por nuestros emprendimientos. Tenemos varios proyectos de trabajo autogestionado en funcionamiento. Sin ir más lejos, una hectárea donde trabajamos una huerta y cría de pollos con una proyección de producción que llegaría a los 1000 pollos, una textilera, y estamos trabajando en formación y planificación. De eso nunca hablan acá cuando se refieren a nosotros, nuestro medio de comunicación es la calle y así lo estamos manifestando”.
Mientras Udaeta conversaba con Marcha, recibió la notificación de que les iniciaron 6 causas penales a los ocupantes. El mensajero de estas acusaciones fue el Comisario Caimari de la Unidad Regional número 2 de La Pampa. Al cierre de esta nota, la policía se encontraba dentro del edificio custodiando a los trabajadores desocupados y las autoridades de la municipalidad no habían demostrado interés en retomar el diálogo.