Trabajadores y trabajadoras de Niñez y Adolescencia del Centro de Atención Transitoria 2 presentaron denuncias de violencia laboral.
Por Vivian Palmbaum Foto Revista Mensaje
El jueves 12 de septiembre, las y los trabajadores del Centro de Atención Transitoria (CAT) 2 que depende del Consejo de Niñas, Niños y Adolescentes del Gobierno de la Ciudad, presentaron denuncias de Violencia Laboral contra una de las coordinaciones. Detrás de las denuncias parece esconderse también un entramado de violencia y abusos contra niñas, niños y adolescentes que debieran estar protegidos. Desde Marcha conversamos con uno de los trabajadores que viven estas situaciones cotidianas de maltrato y violencia laboral.
El Centro de Atención Transitoria depende del Consejo de Niñez y Adolescencia del gobierno de la Ciudad, es un dispositivo transitorio, un hogar, el primer lugar al que llegan las y los niños y adolescentes cuando sus derechos han sido gravemente vulnerados, tal como se afirma en el comunicado de las y los trabajadores agremiados en el sindicato de Asociación de Trabajadores del Estado (ATE).
Graves situaciones de agresión, violencia física o sexual, abuso familiar y muchas derivadas de realidades límites a las que se ven enfrentadas las familias y en general mujeres a cargo de sus hijos e hijas, que necesitan trabajar muchas horas fuera de sus casas para asegurarse un sostén mínimo, o que están en situación de calle, entre tantas otras situaciones de la pobreza y la marginación. Es desde donde provienen las niñas y niños que llegan a estos Centros de Atención para ser resguardados. Allí se atienden pibes y pibas de diferentes edades, incluso desde que son recién nacidos y hasta adolescentes de 18 años.
El dispositivo está orientado a la restitución de derechos, a la educación, alimentación, vinculación familiar. Así es que se les lleva a la escuela para que no interrumpan su educación. Se busca la revinculación familiar, si hay algún adulto, adulta referenta que les pueda contener y que no tengan que irse a otro dispositivo, relata el trabajador del CAT.
“Según la definición de la pobreza que se adopte (monetaria o por privaciones en el ejercicio de derechos) se estima que entre un 47% y 60% de la infancia entre 0 y 17 años es pobre en el país. A partir de las estimaciones de la Encuesta de la Deuda Social Argentina (EDSA) se establece que casi la mitad de la infancia pertenece a hogares que no logran reunir los ingresos necesarios para adquirir una canasta básica de bienes y servicios. Sin dudas, es un dato relevante y que evidencia la crisis socioeconómica por la que se atraviesa”. Pobreza, derechos e infancias en la Argentina (2010-2018)
El Consejo de Niños, Niñas y Adolescentes está a dirigido por Karina Legizamón y quien está a cargo del CAT 2 es Patricia Dodera, quien no tiene formación en la temática y mucho menos con un enfoque en derechos, tal como lo relatan. Parece no ser casual el lugar que ocupa, ya que tiene estrechos lazos con Horacio Rodriguez Larreta. Es la esposa de Nestor Abbas, conocido por haber acompañado a Rodriguez Larreta en el PAMI, uno de sus asesores en el barrio de Lugano y legislador Pro.
Consejo de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes: Es el organismo especializado en infancia que tiene como finalidad promover, proteger y garantizar los derechos de todas/os las/os niñas, niños y adolescentes. Fuente: Gobierno de la Ciudad.
En el comunicado expresan que “desde hace meses, lxs trabajadores vienen cuestionando las prácticas que se llevan a cabo desde la coordinación, que son autoritarias, de engaño, y revictimizadoras”. Entre algunos de los ejemplos se citan: “encerrar a niñxs bajo llave a modo de castigo o amenazarles con suspender vinculaciones con sus familias por cuestiones de conducta. También suceden prácticas contrarias a la ley y negligentes como llevarse a las y los niños a su casa”.
Tal como relatan las y los trabajadores del CAT 2, a partir de una supuesta denuncia de abuso sucedida entre menores del dispositivo han justificado los traslados arbitrarios que recaen justamente sobre quienes se oponen a las políticas de disciplinamiento que ejercen en la institución, que parecen prolongar en el tiempo un sistema de abuso sobre niñas, niños y adolescentes a los que se debiera resguardar.
Las y los trabajadores sufren situaciones de maltrato laboral al ser amenazados con perder el trabajo, puestos en listas negras y estar sometidos a cambios de horarios. En el dispositivo trabajan cuarenta operadores sociales, profesionales, administrativos y choferes que son contratados a través de la modalidad de monotributo, por lo que no cuentan con estabilidad laboral, obra social, ART, aguinaldo, paritarias, carrera, vacaciones, u otras licencias pagas. Una situación laboral precaria que facilita todo tipo de arbitrariedades y abusos porque las y los trabajadores no tienen los derechos que debieran asistirles. “Entre operadores y operadoras hemos venido haciendo señalamiento de situación de revictimización de las pibes y pibas” y expresan que “lejos de promover y defender los derechos de las y los niños, reproduce un paradigma que atenta contra ellos”.
“Todos estos aprietes y hostigamientos son la parte más oscura de la precarización y la inestabilidad intrínseca a los contratos de locación de servicio”, denuncian sus trabajadores en el comunicado. “Vale aclarar que en el mes de marzo había sido removida una coordinación por diferencias técnicas, pese al rechazo de gran parte de los trabajadores y trabajadoras”. Estas prácticas se recrudecieron después de este cambio.
Sin embargo, a pesar del riesgo de perder su fuente laboral se oponen a ser cómplices y deciden cuestionar dichas prácticas. “Paradójicamente en el CAT 2 se atropellan los derechos tanto de los niños y niñas, como de las y los trabajadores”.
El comunicado finaliza expresando que “estamos convencidxs que estas actitudes persecutorias son una clara medida de disciplinamiento por parte de la gestión a lxs trabajadorxs que cuestionan estos abordajes de intervención y es parte de una lógica institucional que deja expuestos a lxs laburantxs frente a la falta de recursos y políticas públicas”.
Lee más: Comunicado Trabajadorxs CDNNYA Junta Interna