Pablo Nolasco Flores

A pesar que la precarización y agresión contra las y los jubilados ha sido una marca del ajuste del actual gobierno, la aparición de hinchas de distintos clubes en solidaridad puso de nuevo en agenda el tema. A esta acción, le siguió una cruel represión por parte del gobierno con Patricia Bullrich como cabeza. Una jornada que marca con claridad los dos lados de la mecha.

El 2024 cierra y el ajuste fue y sigue siendo una realidad y un consenso entre distintos sectores. En un escenario donde se aceptó (o se resignó) el ajuste, ¿cuál son los límites de ese consenso? ¿Cómo construir una alternativa que ponga en cuestionamiento que este es el camino?

l ajuste sigue castigando a la clase trabajadora y en especial a lxs jubiladxs que cargan sobre sus hombros el brutal recorte. Las últimas jornadas además fueron de represión frente al veto del aumento de un gobierno que solo ve números donde hay gente.