Aníbal Garzón

El mayor atentado terrorista que ha sufrido la ciudad de Barcelona en el siglo XXI ha tenido sus escalofriantes consecuencias negativas que son reiteradas en los medios de comunicación. 15 muertos de diversas nacionalidades, algunos tristemente menores de edad, y decenas de heridos ha producido un sentimiento de escalofrío y dolor apabullante. Posiblemente un dolor que viven diariamente otros pueblos lejanos.

En la política internacional predominaba el debate sobre cuál sería el futuro del líder iraquí Sadam Hussein. Antes, con el atentado del 11 de septiembre de 2001, el líder republicano y presidente de EE.UU., George Bush hijo, inició su apuesta por el unilateralismo en el escenario internacional.