Corrían los años 80. Una época de hegemonía del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), liderado por Felipe González, que pese a seguir teniendo mayoría absoluta en el Parlamento iniciaba su caída paulatina con el respiro temporal de 2004 a 2011. Felipe González, que cada día hacía más visible su derechización hasta ser actualmente teórico derechista del pacto nacional entre PSOE y PP, socios de las “puertas giratorias”, firmó esa misma fecha la aprobación de la Ley 18/19871 para establecer como Día Nacional de España el 12 de Octubre.