Una encuesta indica que la mayoría de los israelíes no apoyarían un ataque solitario de su país a Irán, sin embargo, con aval de los EEUU, respaldarían una ofensiva contra el país persa. Líderes de los dos países aliados se encontrarán el 5 de marzo.
Según una encuesta realizada por la Universidad de Maryland y el instituto israelí Dahaf, un 34% de los ciudadanos de Israel opina que su país no debe atacar a Irán solo, contra un 19% que creen que se debe atacar a Irán de cualquier manera, aun sin respaldo de los Estados Unidos. Un 42% avalaría una intervención militar si el país norteamericano les diera apoyo.
La encuesta fue divulgada poco antes del encuentro del presidente estadounidense Barack Obama y el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, que ocurrirá el lunes 5 de marzo. El tema “Irán” seguramente será uno de los más importantes de la reunión.
El diario israelí Haaretz informó el miércoles 29 de febrero, que Netanyahu se pondrá más ríspido y pedirá a su tradicional aliado que haga una amenaza pública a Irán, en caso de que este no acepte frenar su programa nuclear. Una fuente del gobierno no identificada por el diario afirmó que Netanyahu quiere garantizar que los EEUU declaren que están preparados para atacar militarmente a Irán si este cruza determinadas “líneas rojas”.
El ministro de Defensa israelí, Ehud Barak ya está en los EEUU para una semana de reuniones con representantes del gobierno estadounidense, incluyendo al vicepresidente, Joe Biden, y al secretario de Defensa, Leon Panetta.
Según Haaretz, no hay acuerdo respecto de un ataque militar a Irán, no solo entre Israel y EEUU, sino también dentro de cada administración. Sin embargo, especialistas opinan que es improbable que el gobierno de Barack Obama, faltando menos de 10 meses para las elecciones presidenciales, entre en un conflicto militar con Irán.
Inspecciones
EEUU e Israel acusan a Irán de poseer un programa nuclear para fines no pacíficos, lo que e el gobierno de Teherán niega. El miércoles 29 de febrero, la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), vinculada a las Naciones Unidas, anunció públicamente los resultados de las inspecciones realizadas en Irán.
El informe acusa a Irán de haber triplicado su producción de uranio enriquecido al 20% desde noviembre del año pasado. Según especialistas, para producir una bomba, el uranio debe ser enriquecido en 90%. La AIEA, sin embargo, no presentó ninguna información conclusiva, y acusó al gobierno iraní de falta de cooperación ya que nos les habría permitido acceder a los lugares exigidos.
El martes 28 de febrero, el ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Ali Akbar Salehi, reiteró que el programa nuclear del país persa es pacífico y que esperan poder avanzar en las negociaciones con la ONU.
“Me gustaría enfatizar nuevamente que no vemos ninguna gloria, orgullo ni fuerza en las armas nucleares, todo lo contrario; con base en el decreto emitido por nuestro líder supremo de que la producción, la pose, el uso o la amenaza de uso de armas nucleares son ilegítimos, fútiles, peligroso, prejudiciales y prohibidos, como un gran pecado”, afirmó Salehi en un discurso en la Conferencia sobre el Desarmamiento, en Ginebra.