Por Miriam Moreyra. Segunda parte de la entrevista a Marcelo Saín que lamenta que el proyecto inicial de Policía Municipal haya terminado en un aparato continuador de la bonaerense, y reprocha al “progresismo” el escaso análisis sobre las problemáticas de seguridad.
-¿Qué ganan y qué pierden los intendentes con esta fuerza?
-Y en cuanto subscriban esto van a ser responsables, junto con el ministro de seguridad de todo lo que pase ahí abajo, peor no van a tener ningún manejo de la policía, así de simple. Comprar un problema y no tienen los recursos para poder tener insidencia sobre el sistema policial. Convengamos, un ministro de seguridad o la conducción política de la policía conduce una policía si maneja: el sistema operacional que es la producción de inteligencia, las intervencines operativas y la logística; si puede calificar al personal atando esa calificación a los ascensos o a las designaciones en los cargos de los policías; si maneja el presupuesto de la policía y si la puede controlar, por supuesto externamente. Sin esas cuatro prerrogativas nadie conduce una policía. Que vos digas, ‘mire Sr. Intendente, vamos a firmar un convenio, usted dígame qué tiene que hacer la policía y nosotros vemos si lo cumplimos o no’; peor no tenés facultad directa de calificación del personal en su desempeño, no tenés facultades de control externo, de presupuestación y manejo de la ejecución presupuestaria de una policía, no conducís la policía, sin eso no hay conducción policial. Sin eso cualquier modalidad de supuesta conducción es una ficción, y eso es lo que va a pasar en la provincia de Buenos Aires. Entonces los intendentes que suscriban esto van a tener que terminar pactando con la policía. Se va a reproducir el estilo clásico de pacto entre intendentes y policías. Porque desde ese punto de vista cuando a mi no me guste un comisario… nosotros gobernamos Morón y cuando no nos guste el comisario de la 6°, que es un comisario que regula el narcotráfico en el Barrio Gardel con algunos sectores que viven dentro del barrio, no voy a tener facultades para desplazar a ese comisario porque el ministro quizá lo protege. Entonces no tenemos ninguna facultad más que protestar y decir, miren yo quiero que desplacen al comisario de la 6° de Palomar, pero no me dan bolilla.
-¿Qué podría pasar en municipios como Merlo o Malvinas Argentinas en que los intendentes Raúl Othacehé y Jesús Cariglino son personajes denunciados por practicas mafiosas y por violaciones de los derechos humanos?
-Esas personas denunciadas ganan elecciones. Y no se nos ocurriría a nosotros que no haya una urna para elegir a los gobernantes de esos lugares, así que desde ese punto de vista, si el código penal o el sistema penal no los saca esposados estamos con un problema institucional serio. El resto es parte del juego democrático, no siempre ganan los que a mi me gustan. La democracia es así. Lo que sí te puedo asegurar es que hoy ganaron ellos. Ellos no quería la policía municipal. Cariglino aunque diga que sí, no. Porque ellos ganan en el pacto espurio de trastienda con la policía, que es lo que vienen haciendo historicamente. El modelo, el pacto con la policía del lugar, la protección vía llamada al ministro o al gobernador para cuidar de algunos intendentes… y vos me preguntarás ¿tienen poder para poner y sacar a un comisario?… y son los tipos que manejan 300 mil votos para gobernador o para un presidente o presidenta. Si no hablan con vos hablan con el presidente o la presidenta, porque tres distritos de esos es el equivalente a los votos de cuatro provincias… tienen un poder, un remanente enorme… Entonces evidentemente, para mí, la cosa continúa, sigue la bonaerense al frente de la seguridad pública, así que no va a cambiar nada. Que vos al auto colorado lo pintes de azul, pero sigue siendo el mismo auto, lo único que hiciste fue cambiarle el color, y eso es lo que va a pasar acá, no se crea un sistema nuevo como el que estábamos pregeniando, con pibes y pibas nuevas que se iban a seleccionar, que se iban a formar nuevos, con un régimen profesional nuevo, un sistema de control distinto al de la policía bonaerense, y absolutamente autónomo de la policía… eso es lo que estaba en la ley … pero hoy se va a hacer todo dentro de la bonaerense…
-El proyecto contemplaba el control ciudadano… ¿pensás que el decreto puede tomar eso?
-Lo que contemplaba el proyecto era la posibilidad de que actores sociales y un forista estuviera en la mesa de coordinación operacional. Como no conocemos la letra chica de la resolución que se está elaborando no sabemos si esto está presente o no. Pero lo cierto es que el el lado de lo que era el sistema control externo de la policía no había participación ciudadana, yo no comparto la participación ciudadana en sistemas tan complejos, no se cómo los vecinos pueden controlar cómo se hace inteligencia criminal. Es como que también los vecinos controlen cómo se hace una cirugía estética en un hospital público. No se si tienen capacidad para poder decidir si la anestesia que están usando es buena o mala. Esto que te estoy diciendo no es políticamente correcto, quedaría mejor decir “sí, el actor comunitario es un actor democrático”. La demostración es que la mayoría de la gente que participa en asuntos de seguridad pública han seguido un paradigma más bien fascista y no democrático. Porque los sectores populares no participan en los foros de seguridad pública en la provincia de Bueno Aires. Así que este mito de creer que la participación comunitaria es garante de mayor democracia o mayor garantías en favor de los sectores populares, a partir de la década del 90, en la provincia de Buenos Aires, se demostró que no es así. Entonces cuidado con el tema participación comunitaria. Nosotros armamos un sistema de control externo a través de un auditor, que dependía de un intendente, votado en el consejo deliberante, pero también de un sistema de auditoría provincial que se superponía y soslayaba con este último, para que no haya componendas en el nivel local. Era un sistema con tribunal externo inclusive. Policía que tanto en la auditoría provincial, como en la municipal, viera que está cometiendo una infracción grave, lo iba a acusar a un tribuna externo y entonces ahí se podía defender e iba a haber un juicio administrativo, como hoy tiene la policía de seguridad aeroportuaria. Este era el esquema institucional que se había estructurado. Pero yo no creo en la participación comunitaria democrática, porque para eso necesitas tener en primer lugar, un actor comunitario y democrático y no todos los actores que participan en esta materia son democráticos, es más, la mayoría no lo son.
-En relación con gendarmería y prefectura y la presencia fuerte que tienen en los barrios del conurbano bonaerense, ¿cómo pensás que se pueden vincular la nueva fuerza con las que ya están?
-En el proyecto de ley, que no tiene nada que ver con esta resolución, había todo un mecanismo de coordinación, no solamente con las fuerzas federales, sino también con el resto del sistema policial provincial. Algunos porque las actividades de investigación criminal, operaciones especiales y el mantenimiento del orden público seguían en manos del sistema administrativo provincial, y la policía judicial, cuando esté funcionando iba a depender del Ministerio público Fiscal y también iban a operar dentro del terreno, entonces nosotros elaboramos un capitulo muy extenso de mecanismos de coordinación… Sería muy engorroso técnicamente explicar los detalles finos de eso, pero se resolvía institucionalmente, porque nosotros abrevamos en la experiencia europea, principalmente la experiencia catalana, de procesos de descentralización a las grandes ciudades catalanas, de creación de policías municipales, tuvimos la ventaja de ver las dificultades que ellos tuvieron y cómo lo fueron resolviendo a o largo del tiempo. Porque además estamos vinculados a la mayoría de los funcionarios y académicos, que han acompañado ese proceso.
-Se calcula que se van a terminar destinando 4.500 millones anuales para financiar estos 15.000 nuevos policías que se suman a las otras fuerzas. ¿Te parece que esta militarización de la vida en sociedad se revierte con más fuerzas de seguridad?
-No creo eso. Nosotros creamos una policía democrática, no militarizada. Así que el financiamiento de la policía que nosotros creábamos por ley, no iba a ser en favor de la militarización, iba a ser en favor de construir policía democrática… Lo que va a hacer es policía bonaerense. Nosotros creábamos un sistema paralelo. Ahora sí, 4500 millones de pesos invertidos en esto, es más de lo mismo, ahí sí tenés razón, es militarización, evidentemente es ponderar, ampliar, apuntalar el sistema perverso que dio origen al debate de la necesidad de crear otra policía distinta. Es importante que se tenga en cuenta, que los que voltearon este proyecto de ley son los conservadores de siempre, los tipo que quieren una policía brava: el massismo, Granados, y los barones del conurbano.
Cuando el progresismo o la izquierda decían, con este proyecto de ley se está convalidando la conformación ejércitos privados para los barones del conurbano, yo ahora les pregunto a todos ellos, ¿por qué los barones del conurbano no quisieron esta ley? y ¿por qué el Frente Renovador, conservador, no quiso esta ley que es policialista? y ¿por qué Granados no quiso esta ley? si son los que en la teoría del progresismo iban a ser beneficiados con ejércitos privados. Lo que pasa es que el progresismo en Argentina tiene una mirada tan pobre de estos temas, sin matices, sin una buena lectura del poder, que justamente, porque tenemos un progresismo tan berreta, es que la derecha siempre tiene el campo libre para poder ganar.