Marcha
    Facebook Twitter Instagram YouTube
    Facebook Twitter Instagram
    MarchaMarcha
    • Quienes somos
    • Sin Fronteras
      • Democracia
      • Derechos Humanos
      • Economia
      • Extractivismo
      • Migraciones
      • Política
      • Opinión
    • Feminismos
      • Derecho a Decidir
      • Violencias
      • Entrevistas
      • Librelocalab
      • Nuestra América
      • Trata y explotación sexual
      • Opinión
    • Especiales
      • ¿Quién defiende a lxs defensorxs?
      • #SomosMultitud
      • Defensoras. La vida en el centro
      • ¡Nosotres Sim!
    • Niñez
      • Crianzas
      • Derechos
      • Educación
      • Nuestramérica
    • Deportes
      • Opinión Deportes
      • Crónica
      • Pinceladas
      • Otras Yerbas
    • Culturas
      • Películas y series
      • Libros
      • Entrevistas
      • General
      • Especiales
      • Música
      • Teatro
      • Yo estuve ahí
    • Marcha 10 años
      • Ciencia y Tecnología
      • Economía
      • El País
      • Especiales
      • Opinión Nacionales
      • Policiales
    • Archivo Fotográfico
    Marcha
    Home»Culturas»Música»Se van, como se han ido tantos
    Música

    Se van, como se han ido tantos

    31 julio, 20145 Mins Read
    Compartir
    Facebook Twitter LinkedIn Pinterest Email

    Se van, como se han ido tantos

    Por Lucas Peralta. Cinco años atrás moría uno de los más trascendentales murgueros de la banda oriental, Washington “el Canario” Luna. No necesitó partir para convertirse en leyenda, ya lo era en vida.

    Hombre de boliche, de esperanzas de quiniela, transeunte tanto de escenarios populares como de mesas de truco, a Washington “el Canario” Luna no le costó mucho pasar a ser una de las figuras más conocidas de la música popular uruguaya. Despacio, sin quererlo, situándose en ese espacio que él mismo tanto defendió y ubicándose como “uno más del montón” comenzó a abrirse camino en los escenarios populares. Poseedor de una de las mejores voces de carnaval de todos los tiempos, su canto quedará adherido por siempre a todo febrero que nos toque transitar. Sí, podríamos decir que su voz fue su marca; y el carnaval, su oficio.

    Nacido en el barrio Villa Española de la capital uruguaya. Fue lustrador de zapatos, trabajador portuario, vendedor de diarios, de billetes de lotería y de refrescos en el Estadio Centenario. Amigo de los amigos, propietario de códigos cada vez más extintos -motivo por lo cual le valió el alejamiento de más de un compañero de trabajo- al Canario bien le puede caer aquel mote de “murguista”. Sí, pero de los de antes. 

    Luna debutó en el Carnaval uruguayo en 1956, con tan solo trece años de edad. La primera murga que integró fue “Los Pichones de Antaño”, y esta tarea la mantuvo ininterrumpidamente hasta el año 2000, cuando salió por última vez junto con Tabaré Cardozo en la murga “La Clarinada”.

    En el medio, innumerables presentaciones en todo ámbito y categorías del carnaval: cabe recordar que Luna había comenzado como carnavalero en otra categoría que no era justamente la murga, sino en una comparsa de negros y lubolos llamada “Guerreros Africanos”. También participó en grupos de humoristas, como los “Negros Melódicos” y “Jardineros de Harlem”. Pero resultan muy recordadas y sobresalen -ahora, a la distancia y con la ventaja de la historia- sus participaciones en “Don Timoteo”, espectáculo a partir del cual, en 1966, se le pegó el apodo de “Canario” por un personaje que le tocó representar en un couplé. En la formación de “La Milonga Nacional” fue quizá su participación más notoria, o la propia en “Falta y Resto”, murga que se convirtió en uno de los símbolos populares contra la dictadura en la década del 80,  de la cual fue uno de los fundadores junto a Raúl “Tinta Brava” Castro.

    Voz de la misma calle

    Para algunos resultó un hallazgo encontrarse con esa voz en 1985 cuando Jaime Roos lo convocó para grabar la canción “Brindis por Pierrot”, que se incluiría en aquel disco homónimo que abrió las puertas al género Murga Canción. Otros, los seguidores del carnaval, los venían siguiendo desde aquellos tiempos en los que -según comentarios de muchos veteranos- “el carnaval era otra cosa”. Aunque desde ambos lados del mostrador podemos adscribir que lo que permitió que “el Canario” trascendiera el ámbito carnavalero y recorriera no solo el Uruguay sino los escenarios de buena parte del mundo con su canto popular urbano fue esa “tercia” inconfundible y, hasta ahora, inalcanzable. Pero esa voz mítica encontró su expresión más auténtica en los tablados, en la calle o en la “cantarolas” de los clubes montevideanos antes que en los registros de estudio amparados en la perfección técnica a la hora de registrar un hecho artístico y sonoro. Sino, ¿cómo alguien con tan extensa carrera grabó solo cinco discos –Todo a Momo (con Falta y Resto en 1986), Otra vez carnaval (1989), El Canario en su salsa (con el grupo Combo Camaguey en 1992), El Canario al tope (1997) y El tablado callejero (con Tabaré Cardozo en 2007)- en más de cincuenta años de carnaval?

    “Ruido a ciudad” se llama la canción homenaje que Tabaré Cardozo le dedicó en su disco El zoológico de mi cabeza (2011), donde habla, con una precisión que solo puede adquirir un poeta, del grito virtuoso del barrio, de este pájaro de la ciudad, del trino de viejo canario, del hombre con voz de metal, para que no nos olvidemos nunca -porque quedó ahí, grabado para siempre- de este hijo del canto esquinero, hecho en la mesa de un bar, con su vida de curda orillero, oro es tu timbre inmortal, que el 31 de julio de 2009 tiró la última carta del mazo, tiñendo la estirpe de ayer.

    Falleció en Montevideo, cuando tenía setenta años. Seguramente hoy, más de un parroquiano de aquel boliche interminable sito en Buenos Aires esquina Montevideo levante una copita de grapa con limón en cualquier mostrador en un brindis por Canario Luna, por el pierrot callejero que supo hacer de su voz un oficio, o solamente “una changa para poder comer con aceite de vez en cuando”, tal como le gustaba decir a él. ¡Salud Canario!, que la próxima -aunque no la última- va por mí. 

    Escuchá al Canario Luna desde aquí:

    Brindis por Pierrot

    Que el letrista no se olvide

    El tiempo me enseñó (con Tabaré Cardozo)

    También te puede interesar

    Bronca linda en la Paternal: crónica de Divididos en el Estadio Diego Armando Maradona

    29 octubre, 20247 Mins Read

    Divididos en Argentinos Juniors: una excusa para recordar cuando salieron a bancar al Diego

    18 junio, 20245 Mins Read

    20 AÑOS DE LA ORQUESTA DE INSTRUMENTOS AUTÓCTONOS Y NUEVAS TECNOLOGÍAS

    5 junio, 20242 Mins Read
    Podcast

    Marcha Noticias

    Domicilio legal: Llerena 2579, Código postal 1427
    Dirección de correo electrónico: marchanoticias.org@gmail.com

    Registro de Propiedad intelectual RL-2021-78108500-APN-DNDA#MJ

    Ciudad Autónoma de Buenos Aires
    ARCHIVO
    MARCHA_ARCHIVO
    Descargar
    Manual
    Facebook Twitter Instagram YouTube

    Enter para buscar. Esc para cancelar.