Del 25 al 27 de agosto se dieron cita en la ciudad de Córdoba más de mil personas para abonar al debate económico desde una perspectiva crítica. Demostrando el interés por construir una mirada plural y afincada en el horizonte de cambio social, se sucedieron tres días de intensa actividad en la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Córdoba.
Las Jornadas de Economía Crítica alcanzaron su novena edición, rotando anualmente de sede, en una auténtica vocación territorial. Se trató al mismo tiempo del XI Encuentro de la Sociedad Latinoamericana de Economía Política y Pensamiento Crítico (SEPLA), que reúne economistas de toda la región y España. Se encontraron así contingentes y participantes llegados desde Santa Fe, Rosario, Buenos Aires, La Plata, Mendoza, Bahía Blanca, Neuquén, Mar del Plata, Tucumán, Tandil, entre otras ciudades argentinas, y de Uruguay, Brasil, Perú, Colombia, México, Paraguay, Ecuador, Israel y España. Se constituye así un foro amplio de debate para las perspectivas económicas que escapan al opresivo canon neoclásico.
Una batalla de ideas
La Sociedad de Economía Crítica de Argentina y Uruguay (SEC), responsable por las Jornadas, renovó así su compromiso con la disputa en el campo de las ideas.
La economía, como ciencia que produce y reproduce valores, ideas y proyectos, ha sido colonizada desde hace décadas por un dogma teórico asociado al ascenso del neoliberalismo. En el caso argentino, este giro se impuso durante la última dictadura cívico militar mediante cierre de carreras y cátedras, mediante la expulsión, detención y desaparición de docentes y estudiantes, mediante la quema de libros y apuntes, mediante la censura a los espacios de difusión de ideas: contra lo que se suele enseñar en las aulas, no se trató de una “victoria” intelectual, sino de una imposición por la fuerza. Desde entonces, este dogma ideológico impregna las currículas de la mayoría de las universidades, centros de formación e incluso escuelas, liderando la producción de manuales como vehículo de reiteración de ideas aparentemente no conflictivas, mostrándose como el cenit del conocimiento económico. Esto no impide que aparezcan algunas disidencias o variaciones internas, en el marco de acuerdos comunes, que ofrecen la ilusión de pluralidad.
Se trata, en realidad, de la reproducción de un canon, que al ofrecerse como única alternativa -o como la alternativa “victoriosa”- permite impregnar al conjunto de la sociedad de sus ideas, valores y proyectos políticos. Abundan profesionales que sin alternativas teóricas y metodológicas a la vista, acaban por aceptar este dogma neoliberal como el único marco de trabajo disponible, no solo en las aulas, sino en la prensa, en las consultoras, en la función pública, dejando como único límite la moral o las buenas intenciones. Este fenómeno es aún más generalizado entre el público en general, cuando su acceso principal a las ideas sobre la economía está mediado por lo anterior: la escuela, la prensa, los funcionarios públicos.
No es, por lo tanto, un problema solo de la academia o la ciencia, sino una auténtica batalla de ideas, de las formas que tenemos para pensar un mundo diferente. La SEC aporta apenas su grano de arena en esta disputa, convocando a diversas heterodoxias a reunirse y debatir, desde un marco de compañerismo y horizontalidad.
Jornadas de Economía Crítica
La apertura del evento estuvo signada por el compromiso del local CoPenCE para no dejar pasar la oportunidad de referir a la sentencia a cadena perpetua a 28 represores en la mega causa del centro clandestino de detención La Perla y Campo La Ribera. Las mesas centrales ofrecieron miradas diferentes sobre el proyecto económico de Cambiemos en Argentina, las perspectivas de la ofensiva capitalista en América Latina, y las formas de comprender el derecho a la ciudad, marcando desafíos para las clases populares en diversas escalas de territorialidad. Particular mención requiere la participación de integrantes de la Toma de Barrio Parque Las Rosas, que expusieron con apabullante lucidez su lucha concreta en el aula magna de la universidad. Las visitas a las cooperativas La Barranquita y Luna Nueva, y a la Feria Agroecológica Córdoba fueron otros espacios donde el protagonismo pasó a manos de organizaciones populares. La mesa plenaria de la SEPLA contó con participaciones del FIT, Patria Grande y la corriente político-sindical Rompiendo Cadenas, además de las exposiciones sobre las situaciones de Brasil, Colombia, España, México y Paraguay. Este plexo reflexivo se expandió en 36 ejes y simposios con cerca de 160 ponencias, y 9 talleres, que incluyeron, entre otros, el muy convocante espacio de economía feminista, y uno de contabilidad y administración crítica. Se presentó también el cuarto número de la revista de la SEC, Cuadernos de Economía Crítica.
Las Jornadas de Economía Crítica se consolidan así como un espacio de gran creatividad y compañerismo para pensar alternativas económicas, en un marco plural y crítico.