El presidente de Chile, Sebastian Piñera decretó el Estado de Emergencia y Excepción en Santiago y mandó a los miltares a las calles para reprimir la insurrección del pueblo. En solo uno de los hospitales de la capital, alrededor de 30 personas llegaron lesionadas durante la noche. La mayoría, menores de 21 años.
Por Karen Vergara Sánchez* desde Santiago / Foto: Frente Fotográfico
Partieron con más fuerza el martes 15. Decenas de jóvenes estudiantes entre 13 y 17 años planificaron evasiones masivas en el Metro de Santiago, como respuesta al aumento del precio del pasaje y también manifestando un descontento, -compartido por la población-, que devela la precarización de la vida y la desigualdad existente en el país.
Chile, que en el año 2016, según cifras del Banco Mundial se transformó en el séptimo país más desigual del mundo, estaba incubando un malestar general que también responde al incremento de la cesantía y las políticas conservadoras y represivas del presidente Sebastián Piñera y su gabinete, que cuenta con constantes declaraciones polémicas que esta semana finalmente terminaron por colmar la paciencia de los santiaguinos.
Es el caso del ministro de Economía, Juan Andrés Fontaine, quien indicó el lunes 7 de octubre en los medios que “el que madrugue será ayudado”, señalando que si un trabajador tomaba el transporte público capitalino a las 7AM podría evitar el alza de precios, al no estar en la hora punta de ingreso (mayor demanda).
Se suma a las palabras del Ministro de Hacienda, Felipe Larraín, quien ante el aumento del coste de la vida, señaló “los que quieran regalar flores en este mes, las flores han caído un 3,6%”, desatando la indignación de los ciudadanos y ciudadanas. Días antes se había destacado su llamado a “rezar” para reactivar la economía.
Por otro lado, la amplia aprobación nacional al proyecto de 40 horas de trabajo semanales, enarbolado por la diputada del Partido Comunista, Camila Vallejo, había demostrado el hastío que se estaba empezando en los hogares. La televisión y los medios de prensa tradicionales se llenaron de vergonzosas encuestas a empresarios y políticos oficialistas, señalando su rechazo absoluto a la idea.
El movimiento siguió adquiriendo fuerza con el paso de los días, sumándose al descontento nacional por el sistema de AFP’s que tiene a adultos mayores jubilándose con pensiones equivalentes a 120 dólares, un cuarto del sueldo mínimo nacional, y que no alcanza para sobrevivir. Se discute la posibilidad de retirar los fondos de pensión de manera anticipada, ya que una profesora sigue una causa legal para intentar quebrarle la mano al modelo. Mismo modelo que en la actualidad tiene a las empresas administradoras de los fondos de pensión con ganancias millonarias, que en ningún caso se traspasan a los trabajadores.
Si bien, las evasiones partieron de forma pacífica y encabezadas solo por estudiantes secundarios, ya en la mitad de la semana se presentaba un apoyo transversal de los ciudadanos, quienes en matinales, programas de televisión y de radio manifestaban su apoyo a las acciones, pese al conservadurismo de reporteros y animadores de los canales de televisión, quienes intentaban tensionar el diálogo hacia la toma de medidas represivas. Comenzaron también a viralizarse a través de redes sociales, distintos vídeos de los mismos civiles intentando dialogar con Carabineros, dándoles a conocer el por qué de las movilizaciones espontáneas.
Durante la tarde del viernes 18, las manifestaciones llegaron a su punto máximo, desconcertando a policía y gobierno, puesto que no existe vocería, partido político o dirigente liderando la causa. Carabineros se agolparon en cada estación de Metro, causando mayor indignación al cerrar los accesos, lanzar gases lacrimógenos al interior de los subterráneos y apalear estudiantes. Una adolescente recibió un disparo en el muslo, desangrándose con rapidez, la cual quedó registrada en un dramático vídeo que se viralizó a través de redes sociales, y que fue atendida en primera instancia por los mismos transeúntes y paramédicos del sector.
Con el transcurso de las horas, en redes sociales comenzaron a aparecer imágenes de niños con balas de goma en el rostro, nuca y pecho. Vídeos que muestran el actuar desmedido de Carabineros, al nivel de empujar a un joven escaleras abajo en el Metro. Este vídeo, registrado en Puente Alto muestra el actuar desmedido de la policía, observándose como arrastran a un niño a través de una moto, por toda la cuadra donde éste reside.
Alrededor de las 21 horas, civiles comenzaron a informar que Carabineros había abandonado las instalaciones de Metro, tras lo cual comenzaron incendios en distintas estaciones, las cuales se señalan en estos momentos, superarían la treintena.
El presidente Sebastián Piñera, quien durante la tarde del viernes habría abandonado las reuniones y asistido a una pizzería del sector oriente de la capital para celebrar el cumpleaños de un nieto, debió volver a La Moneda, y cerca de medianoche realizó la declaración oficial de Estado de emergencia, la cual entrega facultades a militares para salir a las calles, y que además puede apelar a la libertad de reunión y movilización, quedando a cargo de la operación el general de división Javier Iturriaga del Campo.
Iturriaga del Campo, es hijo del fallecido Dante Iturriaga Marchese, militar vinculado a Colonia dignidad en la llamada "Operación Cerro Gallo" y una familia que incluye a comandantes involucrados en delitos de lesa humanidad en época de dictadura.
Durante la noche, la postal de los medios tradicionales que estaban cubriendo los incidentes, fue el incendio que afectó a la escalera de emergencia del edificio de ENEL, la cual no dejó lesionados y que concentró la atención, frente a los hechos de violencia que ya se estaban empezando a vivir por parte de la policía. A pesar de que se culpó inmediatamente a los manifestantes por el hecho, rápidamente Bomberos comenzó a divulgar fotografías de jóvenes ayudándolos espontáneamente a guiar las mangueras e instrumentos para apagar el fuego.
Hasta horas de esta mañana, la cifra oficial de heridos no revela lo vivido en las calles. Se habla de 11 lesionados, escenario muy diferente al que están constatando ONG’s e instituciones de DDHH. Se hace el llamado a que todas las personas que sean golpeadas, detenidas o torturadas tomen contacto con el Departamento de Derechos Humanos del Colegio Médico de Chile (COLMED) para solicitar constatación de lesiones.
Trinidad Bravo, médico del hospital San Juan de Dios, señala que en su turno de urgencias contabilizó alrededor de 30 personas lesionadas durante el transcurso de la noche, la gran mayoría de ellos menores de 21 años.
“Éramos 8 médicos atendiendo pacientes ambulatorios (con lesiones mayores pasaban al reanimador). Ahí pasó un chico de 14 años por heridas de perdigones. El resto estaban en categoría 2 y 3. Habían más de 10 heridos en extremidades inferiores por perdigones y a eso de las 2 o 3 de la madrugada llegó un grupo de 11 adolescentes esposados de a dos, custodiados por Carabineros a constatar lesiones menores, quienes tenían cortes y moretones”.
Respecto a las manifestaciones político-partidistas frente a esta situación, aún no existe una articulación clara desde la oposición para condenar el actuar del Gobierno. La situación parece haber tomado por sorpresa a todos los sectores. Tan así, que incluso la Intendenta de Santiago, Karla Rubilar solo fue vista la medianoche del sábado, siendo cuestionada por una periodista respecto a su ausencia durante la jornada. “Una trabaja, no tiene que dar explicaciones”, señaló Rubilar, desatando aún más la ira de quienes estaban utilizando RRSS en ese momento para comentar lo ocurrido.
En regiones, se están convocando movilizaciones para el próximo lunes 21 de octubre, y entre las demandas se exige la estatización del transporte público nacional.
Para cerrar esta nota compartimos esta imagen, registrada la noche del viernes en el sector Plaza Ñuñoa, donde un grupo de Carabineros llegó con escopetas y gases lacrimógenos intentando dispersar las reuniones pacíficas que se estaban realizando, donde habían niños, adultos y ancianos. Un hombre se acerca sin ningún tipo de herramienta a intentar dialogar con la policía siendo apuntado directamente.
Pasado el mediodía siguen los cacerolazos espontáneos en la zona centro de Santiago.
*periodista e integrante de @AmarantaONG