Desarrollador de software y defensor de la privacidad en la información, el sueco Ola Bini ha sido acusado por el gobierno del Presidente de Ecuador, Lenin Moreno, de desastibilizar a su gobierno y desde hace nueve meses se encuentra privado de su libertad luego de ser arrestado en el aeropuerto de Quito. Por su parte, Bini denuncia y comprueba irregularidades en el proceso judicial, seguimientos a su equipo jurídico, y hostigamiento a familiares y amistades.
Durante la entrevista Bini aseguró no tener idea de qué se le acusa desde hace nueve meses que está privado de su libertad. Su equipo jurídico tampoco lo sabe: “El Gobierno ecuatoriano nunca ha dicho el motivo real. Cuando me arrestaron me acusaron de haber atacado la integridad de sistemas informáticos pero no dijeron cuáles sistemas informáticos”.
Maria Paula Romo, ministra del gobierno de Ecuador ha asegurado, según Bini, que el desarrollador ha trabajado con el excanciller Ricardo Patiño, del gobierno de Rafael Correa () para desastibilizar el actual gobierno de Lenin Moreno. A su vez, el actual Presidente de Ecuador ha declarado públicamente que Bini tiene una relación criminal con Julian Assange (expulsado de la embajada de Ecuador en el Reino Unido y entregado al gobierno británico el mismo día de la captura de Bini).
“Soy amigo de Julian Assange, nunca he trabajado con él en nada, ni he trabajado con Wikileaks en alguna cosa, pero ellos acusan de que yo trabajé con él para desestabilizar el Gobierno”.
Pantallazos de la fiscalía
Según Bini, cuando se le arrestó no se le acusó legalmente de nada: “unas 30 horas después de mi captura, finalmente me acusaron de un delito, de todos los posibles crímenes, de la violación al artículo número 232, que es el ataque sobre la integridad de los sistemas informáticos pero nunca especificaron cuáles sistemas informáticos”.
Dos días antes de la audiencia frente a un juez, la Fiscalía cambió los cargos contra Bini. Se le acusa de violentar el artículo número 234, que refiere al acceso no autorizado a un sistema informático, y lo que tiene la fiscalia de Ecuador es una foto, un pantallazo, que muestra la irrupción de Bini a un sistema informático propiedad de la Corporación Nacional de Telecomunicaciones -CNT-.
Los peritos de la acusación, quienes revisan la calidad y vericidad de las pruebas en un juicio, ya concluyeron que no pueden hacer ninguna extracción de datos informáticos de la fotografía presentada por la fiscalía, es decir, no existe ninguna evidencia para condenar a Bini por medio de ese pantallazo.
“La acusación de la intrusión es de octubre de 2015, contra la CNT, y eso fue durante el gobierno de Correa. La CNT es una empresa pública, si ellos necesitaban alguna información tendrían maneras más fáciles de hacerlo que pedir a alguien como yo que interrumpa en la CNT” añade Bini.
Defensa de los derechos humanos digitales
“Es absurda la idea de los derechos digitales, los derechos humanos deben ser los mismos sin importan dónde están en el mundo real. Vivimos mucha de nuestra vida en el mundo digital entonces es real”, explicó Bini para introducir los motivos que desde hace treinta años lo definen como ser humano y que hoy defiende contra el abuso de la privacidad de las personas.
“El derecho a la seguridad y la privacidad es mucho mejor protegido en el mundo analógico, la vigilancia en el mundo digital es más fácil y muchos gobiernos sostienen que el lugar digital es distinto y no tiene los mismos derechos […] Los derechos deben ser iguales donde sea, no es una declaración muy radical decir eso pero muchas personas creen loco decirlo”, sentenció Bini.
El gobierno de Lenin Moreno actualmente hostiga y violenta los derechos de Ola Bini. Entre risas, viviendo la difícil situación, Bini aseguró que: “La mayoría de los días hay carros parqueados fuera de mi edificio, siguiéndome cuando salgo al trabajo, o cuando voy a cualquier lado. A veces la vigilancia es más pesada, a veces no están, pero en general, desde que salí de prisión me siguen a casi cualquier lado”.
Entrevista completa: