Por Laura Salomé Canteros
La redacción del portal de noticias judiciales Infojus está siendo despedida en el contexto de ajuste económico y represión política que desarrolla el macrismo. Y esto, ¿en qué afecta al periodismo de géneros y derechos humanos? Dialogamos con María Florencia Alcaraz, una de las despedidas.
El paradigma de violencia, ajuste económico y represión política e ideológica que inauguró el gobierno de Cambiemos abarca también –y por qué no y no casualmente- la comunicación que se piensa, siente y ejerce con perspectiva de géneros y derechos humanos. A través de recortes y desvío de pautas, despidos a trabajadoras/es, aprietes y vaciamiento a medios estatales y privados, el macrismo se inauguró con medidas que apuntan al silenciamiento de voces que supieron denunciar prácticas de violencia institucional y machista desde los Estados y la sociedad.
Esto está pasando con el cierre de Infojus, el portal de noticias judiciales, contribuyendo –paradójicamente- el Ministerio de Justicia y DDHH de la Nación, a lastimar el objetivo de comunicar como un aporte a la lucha por el pleno ejercicio de los Derechos Humanos. “Cuando vino la nueva gestión en diciembre no pudimos cubrir ningún femicidio más”, relata María Florencia Alcaraz, periodista de Infojus quien el viernes pasado comunicó a través de las redes sociales que el telegrama de despido había tocado el timbre de su casa. Y las consecuencias están a la vista.
La gestión de Germán Garavano borró un total de 11.700 artículos de la producción de Infojus Noticias 2013-2015, casi el 83% de toda la producción de tres años, haciendo desaparecer coberturas sobre sentencias de femicidios, interpretaciones de avanzada, denuncias y un vasto recorrido judicial en el avance para la conquista de leyes que contribuyen a la calidad de vida de la comunidad LGBTTTI.
Sobre trata de personas se borraron 445 notas entre información de juicios contra proxenetas y por talleres clandestinos. De la cobertura de historias de violencia contra las mujeres, faltan 415 notas, incluyendo la cobertura de las causas de Melina Romero y Ángeles Rawson. Y sobre el #NiUnaMenos, unas 49 publicaciones no están más.
“Infojus es un registro en materia de derechos humanos”
Periodismo joven, con garra, que se cuestiona, que innova, que contagia trabajando desde los Estados pero en constante relación con las víctimas de las violencias y sus familias, que patea los pasillos de los Tribunales y claro, que construye a la par de quienes hacemos medios populares, alternativos y comunitarios desde donde muchas y muchos aprendieron la fuerza de las convicciones y la importancia de aportar desde el ejercicio de la profesión al cambio social. Y así es María Florencia Alcaraz, a quien conocimos en la cobertura del juicio por la libertad de Yanina González. Florencia accedió a dialogar con Marcha sobre la importancia del trabajo de Infojus, y esto nos dijo:
-¿Cuál consideras que es el aporte de Infojus a la lucha por los DDHH?
El lema de Infojus Noticias fue “detrás de los expedientes hay personas”. Quienes trabajamos allí en estos tres años encaramos cada una de las notas desde esa perspectiva: nuestros protagonistas fueron las víctimas, los ciudadanos. El trabajo que se hizo desde Infojus es un registro en materia de derechos humanos.
Las causas y los casos que cubrimos siempre tuvieron un seguimiento. No los tomamos como casos aislados sino como un entramado inserto en un momento histórico. Lamentablemente el nuevo gobierno decidió borrar ese registro. Es la muestra de un Estado que no quiere tener registro de los avances, los retrocesos, los debates, las reflexiones que se dieron en materia de derechos humanos. Es lamentable.
En definitiva, el aporte que hicimos fue intentar dejar un registro de la lucha por los derechos humanos.
-¿Y a la comunicación que se construye con perspectiva de género(s)?
Puntualmente sobre la comunicación con perspectiva de géneros, había periodistas que veníamos de una formación específica en este tema, otros no. La redacción de Infojus Noticias supo construir una mirada con respecto a la comunicación desde esa perspectiva con muchísimo respeto. Aprendimos de las coberturas del femicidio de Angeles Rawson, el de Melina Romero. Hubo casos que nos marcaron el camino. Los varones y las mujeres, los periodistas, los fotógrafos y quienes manejaban las redes sociales: todos entendimos que teníamos que pararnos desde esa mirada si queríamos hacer periodismo judicial y policial con una perspectiva de derechos humanos.
Redactamos un artículo en torno a eso, una especie de manual de estilo, que fue publicado el año pasado. Vinieron a darnos capacitaciones en la temática, periodistas como Sibila Camps y Liliana Hendel. El manual de la Red PAR circulaba en la redacción y si un compañero tenía una duda sobre una palabra, un término o una forma de nombrar consultaba a quienes tenían un recorrido en género. Construimos desde lo colectivo.
Armamos un “equipo de géneros” junto a Matías Máximo y casualmente ambos fuimos despedidos. Ese equipo quedó totalmente desarmado. Cuando vino la nueva gestión en diciembre no pudimos cubrir ningún femicidio más. Nos dijeron que se trataban de “casos policiales” y no querían cubrir policiales. Para nosotros fue muy duro, después vinieron los despidos, el borrado de notas: el vaciamiento ya estaba en marcha.
– Si tuvieras que pensar en alguna anécdota o historia en la que hayas sentido que ejerciendo el periodismo dentro de Infojus haya contribuido a la lucha por los DDHH, ¿cuál sería?
El día que la absolvieron a Yanina González estaba lleno de periodistas en los Tribunales de San Isidro. Muchos que no habían estado durante todo el juicio. Cuando terminó todo y el Tribunal le dio los argumentos impresos a la abogada de Yani, la Chiqui Conder, los periodistas se abalanzaron para tener una copia de ese texto. La Chiqui me miró y me lo dio para que me encargara de las copias. Para mí fue un voto de confianza enorme. Se lo estaba dando a la periodista de Infojus.
Después hay un caso puntual que es el de Suhene Carvalhaes, víctima de femicidio. A través de un amigo en común conocí a la hermana, estaban buscando un abogado y le recomendé a la Chiqui Conder. Ella los empezó a acompañar porque a pesar de que se trataba de un femicidio la causa no estaba caratulada como tal. Después de varias semanas recién publicamos el caso en Infojus. Primero fue la ayuda, después fue la nota. Para mi es así. Funciona de esa manera.
Y hay casos que nos marcaron mucho como el crimen de Melina (Romero), la historia de Alika Kinan, la cobertura del juicio por Yanina González, el travesticidio de Diana Sacayán que cubrimos durante 24 horas con Matías Máximo, conocer a Reina Maraz en el penal de Los Hornos, recorridas por prostíbulos cuando se hacían allanamientos: quizás me olvido de muchos pero todo fue una experiencia enorme. Es muy doloroso que hayan borrado ese material porque es de todos y todas. Se hizo con recursos del Estado.
De las solidaridades y la lucha
El Ministerio Público Fiscal, a través de la Procuraduría de Violencia Institucional (PROCUVIN), presentó un amparo en resguardo del derecho individual a la información y del capital cultural e intelectual que representan los archivos del portal, y la Comisión Provincial por la Memoria (CPM) acompañó el amparo y solicitó ser “amicus curiae” en la acción judicial. Además, tanto la Red PAR –Periodistas de Argentina por una comunicación no sexista-, como la RIPVG –Periodistas con visión de genero-, emitieron una carta abierta al Ministro de Justicia y un comunicado respectivamente en solidaridad con los despidos de trabajadoras y el retroceso que implica el desmantelamiento del portal de noticias judiciales para el periodismo y la comunicación de géneros.
“Reclamamos al señor ministro de Justicia y a la señorita directora de Infojus Noticias la inmediata restitución a la web de todo el material de archivo, y la continuidad del trabajo según los fines y las pautas manifestados por la propia agencia”, dice la carta de la Red PAR. Hoy, y quizá a partir de la fuerza colectiva de las y los trabajadores de Infojus que no se quedó callada y de la empatía con la audiencia y las solidaridades que supieron crear, se puede acceder a las notas producidas por Infojus en: http://archivoinfojus.gob.ar/
Mientras, el camino y el rol social y político de los medios estatales, comerciales y populares, hegemónicos y combativos, siguen en construcción y debate. Y para los tiempos que corren, quizá los caminos de la autogestión sean los más adecuados.
Podes seguir las novedades de lxs trabajadorxs de Infojus en: facebook.com/TrabajadoresInfojusNoticias/