Por F. García, E. Manino y P. Salas desde Tucumán. Luego de 35 días de toma, los estudiantes de la Universidad Nacional de Tucumán obtuvieron una entrevista con el rectorado que se comprometió a llamar a una sesión extraordinara del Consejo Superior para discutir sus demandas.
A 35 días del inicio de las tomas de las facultades de Filosofía y Letras, Psicología, Artes y Ciencias Naturales de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT), se sumó al conflicto la Facultad de Educación Física. La medida de fuerza comenzó luego de que dos alumnas de la UNT fueran abusadas sexualmente durante el mediodía a metros de la Facultad de Filosofía y Letras. Los estudiantes reclaman desde entonces el esclarecimiento de los casos de abuso, la Declaración de Emergencia en Violencia Sexual y Doméstica, la implementación de la ley 26.485 para erradicar la violencia de género y la ley en Educación Sexual Integral. A su vez, vieron como medidas preventivas la aplicación del Boleto Educativo Universal, la construcción de comedores universitarios y el presupuesto necesario para el ya puesto en marcha por los estudiantes de Filosofía y Psicología, todos ellos cerrados por la dictadura.
El día 30 de septiembre, luego de largas horas de asamblea, los estudiantes de la Facultad de Educación Física decidieron tomar la el edificio considerando la instancia decisiva en la que se encuentra el movimiento estudiantil, ya que se acercan reuniones con autoridades que podrían ser determinantes. Si bien la decisión fue tomada por la mayoría de los estudiantes, no dudaron en aparecer en un intento de frenar la toma el grupo afín al rectorado que es representado por la alianza Franja Morada-Movimiento Sur. Aparición que causó cierta indignación ya que uno de los militantes de la agrupación Franja Morada fue denunciado por un caso de violencia de género dentro de la residencia de la Universidad.
Los estudiantes denuncian que las autoridades no tienen intención de acelerar los tiempos. La última toma, sin embargo, resultó determinante para que el rector de la Universidad, Juan Alberto Cerisola, concediera una audiencia con los delegados de las cinco facultades donde se desarrollan medidas de fuerza.
Tras una fallida sesión del Consejo Superior, los estudiantes lograron entrevistarse con la máxima autoridad de la casa de estudios y su gabinete. Allí se comprometió a realizar una nueva sesión extraordinaria para el próximo viernes donde, por primera vez los decanos en su conjunto, expresarán su postura acerca de los proyectos presentados de Género, Boleto y Comedor.
La toma de la Facultad de Educación física reforzó la lucha y esto también se notó durante la marcha que acompañó la reunión del martes. La movilización contó con más de dos mil estudiantes y otros sectores de la sociedad tucumana. Además de los cánticos, los estudiantes, se organizaron para realizar intervenciones artísticas en el patio central del rectorado para darle color a la movilización, mientras los voceros de las distintas carreras se encontraba reunidos con el rector.
Este miércoles se realizó la asamblea interestudiantil en donde participan no sólo estudiantes de las facultades que se encuentran tomadas, sino también de las otras y de los colegios secundarios. Allí se discutió sobre el plan del lucha a la espera de lo que pasará en la sesión extraordinaria del Consejo Superior programada para el viernes 4 de octubre a las 16 hs.
Mientras tanto, dentro de la toma las facultades siguen organizadas en comisiones (cocina, limpieza, seguridad, prensa y difusión), además de las comisiones creadas para tratar los cuatro puntos principales del pliego.
En las facultades tomadas siguen funcionando talleres, clases abiertas, ciclos de cine. Dichas actividades se encuentran organizadas por los mismos estudiantes, no sólo de las facultades tomadas sino también por otros sectores que se suman a la participación.