El pasado 21 de Mayo se presentó Talíria Petrone, concejala del PSOL, amiga y compañera de Marielle Franco. Una actividad que se organizó a 70 días del asesinato de Marielle y Anderson en Rio de Janeiro.
La actividad se realizó en medio de una mística que recorrió la sala con un sentimiento de profunda emoción.
A continuación las palabras de Taliria Petrone que expresó como el colonialismo, el patriarcado, el fundamentalismo y el capitalismo marcaron el cuerpo de Marielle.
Una resistencia latinoamericana
Estoy muy emocionada de compartir este momento con todas y todos. Es un momento para todos los luchadores y luchadoras de América Latina marcado por el dolor. Pero un dolor que se transforma en resistencia. Una resistencia que Marielle Franco incorporaba en su cuerpo y en su voz. Desde hace 70 días que nos despertamos todos y todas de una manera diferente: extrañándola, pero con la certeza de que se equivocaron al intentar silenciarla.
Hablar de Marielle Franco y de la realidad de Brasil es hablar de esa pareja indisociable que es el dolor y la resistencia. Son elementos que nos persiguen desde hace 70 días y desde el día en que fuimos colonizados y colonizadas. Estar acá tiene un significado muy fuerte, no tengo dudas que ahora más que nunca nuestra resistencia, la de toda latinoamericana, debe buscar terminar con ese proceso de colonización.
Esta resistencia debe ser necesariamente latinoamericana, necesariamente feminista, antirracista, indígena, anticapitalista, anti LGBT-fóbica. Todo eso se une en lo que era Marielle, en lo que era su resistencia, en lo que es nuestra resistencia. Los asesinatos de Marielle Franco y de Anderson Gomes no son una estadística más en la violencia de Brasil, sino que son un crimen político, una persecución política, y es necesario que los ojos del mundo se vuelvan a esta realidad.
Pienso que la democracia en Brasil nunca se concretó, el proceso de democratización post-dictadura militar es un proceso incompleto, especialmente para quienes viven en las favelas y en las periferias. En este momento la democracia incompleta esta siendo cada vez más encerrada. En América estamos sufriendo golpes institucionales. En Brasil no es diferente, y la ejecución de Marielle se suma a esos ataques de la América encerrada.
Yo soy una de las que construye un nuevo partido, el PSOL[1], que tuvo ciertas críticas al último ciclo de gobierno, dado que no llegó a realizar cambios estructurales que eran necesarios, como la reforma agraria, romper con la lógica militar, la democratización de los medios de comunicación y la reforma tributaria. Es innegable que ahora, en este momento, con el impeachment que sufrió Dilma, con la selectividad y la connivencia de nuestro poder judicial, que terminó con la prisión de Lula y su imposibilidad de disputar las elecciones. En Brasil se está poniendo un muro, sobre un régimen que funciona supuestamente sobre un marco democrático, pero que afecta específicamente a algunos cuerpos. La ejecución de Marielle Franco fue un punto por fuera de la curva, incluso cuando se habla de los asesinatos de defensores de derechos humanos, porque tuvo una osadía y un nivel de cobardía que hacen acordar a tiempos de la dictadura. Como si ese proceso nunca se hubiera cerrado.
La historia de una colonización vigente
Es necesario enmarcar la ejecución de la compañera Marielle en nuestra realidad como parte de Latinoamérica. El proceso de colonización no se cerró en Brasil. La historia brasilera no se quedó en el tiempo histórico. Brasil fue el último país en abolir la esclavitud. Fueron más de 300 años de esclavitud en Brasil. Hace poco se cumplieron 130 años de la ley de abolición, pero infelizmente las estadísticas demuestran que fue un proceso que nunca terminó. Más de 2 millones de personas fueron secuestradas y llevadas de sus tierras, de diferentes partes de África, fueron separadas de sus familias y esclavizadas. Fueron transformadas en cosas, vendidas, intercambiadas. La construcción social de qué es ser negro en Brasil nos transforma en enemigos del estado. La esclavitud es un pilar importante que tiene que ver con la ejecución de Marielle.
El patriarcado que formó nuestra historia en Brasil, con los grandes poderosos, los hacenderos de café, los productores de caña de azúcar, siguen ocupando esos espacios, siguen reproduciendo esa lógica patriarcal. Ellos ejercen su poder sobre las mujeres blancas, pero en especial ejercen su poder sobre los cuerpos de las mujeres negras, sexualizando sus cuerpos y violándolos.
Un tercer elemento en la historia de la colonización es la lógica fundamentalista. Brasil sistemáticamente viola la ley del estado laico y eso afecta directamente a los cuerpos de las mujeres. El capitalismo se apropió de esta historia y de este conservadurismo y reforzó esos elementos. Al capitalismo le interesa oprimir a los negros, oprimir a las mujeres e intervenir en las distintas formas de familia.
La clase trabajadora que orienta nuestra lucha es concreta, no es algo etéreo. Es la clase trabajadora que tiene género, tiene color, tiene orígenes y vive en un determinado territorio. Todo eso se personificada en el cuerpo de la compañera Marielle. Ella había elegido un lado que no negaba la formación histórica del Brasil y lo afirmaba cotidianamente, todos los días, enfrentando esa historia.
Militarizar los cuerpos
Cada año 30 mil jóvenes son asesinados por las fuerzas de seguridad. De cada 100, 71 son negros. La respuesta del estado, que es el responsable de este genocidio, de esos asesinatos, de esas ejecuciones, es reforzar la militarización que también es la responsable por la ejecución de Marielle. El estado de Rio de Janeiro está bajo una intervención federal militar, justamente el estado en donde la policía más mata. Esto es un refuerzo de la militarización de la vida y de los cuerpos. Los cuerpos son ejecutados por el estado. El mismo estado que debería cuidar a esos cuerpos.
Esto viene de hace ya tiempo, porque infelizmente desde el mundial pasado y desde los juegos olímpicos ya se estaban haciendo inversiones de más de 600 millones de reales en el ejército y se gastaron mil setecientos millones de reales en la supuesta guerra de las drogas y del crimen organizado. Es el estado matando a través de operaciones policiales que operan verdaderas masacres.
Brasil es el tercer país con mayor cantidad de prisiones en el mundo. En ellas, 40% son presos provisorios, sin sentencia, en su mayoría negros, que están presos por hurtos o pequeños tráficos. Solo el 10% son por crímenes graves. A su vez, aumentó más del 500% el número de mujeres encarceladas en los últimos 10 años y más de 70% de esas mujeres son negras y vienen de favelas. Esta historia del colonialismo, de la esclavitud, del patriarcado y del fundamentalismo se expresa en el cuerpo de Marielle Franco
Marielle Franco
Marielle Franco era mujer en un país que se encuentra en el 5to país con más femicidios en el mundo.
Marielle Franco era mujer y negra en un país donde, a pesar de que luchamos contra la violencia contra todas las mujeres, el índice de asesinatos de mujeres negras subió el 54% mientras que el de mujeres blancas disminuyó el 10%.
Marielle Franco era mujer y negra en un país donde los hijos de las mujeres negras son sistemáticamente asesinados y encarcelados por las fuerzas de seguridad.
Marielle, mujer y negra. Marielle era favelera, villera, en un país que tiene un déficit habitacional terrible y un país en que el estado llega a las favelas para llevar violencia y represión, pero no para llevar educación, salud y asistencia. Las poblaciones de las favelas son sitemáticamente removidas, retiradas de sus casas como si fueran objetos. En la época de los juegos olímpicos se movieron 22 mil personas en la ciudad de Rio de Janeiro como un ejemplo de modelo de desarrollo. Es el mismo modelo que expulsa a las poblaciones originarias de sus tierras hace más de 500 años, que mata a los defensores de los derechos humanos y que se encuentra inserto en el modelo del agronegocio.
Marielle mujer, negra, favelera, lesbiana, en el país que más asesina LGBTs en el mundo. La expectativa de vida de los y las transexuales en Brasil es de 35 años. Reflejo de una lógica fundamentalista que no se cerró y que estaba expresado fuertemente en el cuerpo de Marielle, una mujer que amaba a otra mujer.
Marielle era defensora de los derechos humanos. En 2017, setenta activistas de los derechos humanos fueron asesinados en nuestro país, especialmente activistas que luchaban por los derechos de personas sin tierra y de los pueblos originarios.
Marielle era también concejala. Nosotras somos mayoría en la población del país, pero minoría en la política formal. En las favelas cuando hay algún derrumbe o similiar, las que llevan adelante las redes de solidaridad somos las mujeres, pero en la política formal somos menos del 10%.
Marielle era socialista en un país donde el 1% de la población concentra más del 50% de la riqueza. Todo eso se concentraba a su vez en el cuerpo de Marielle y era denuncia en su voz.
Marielle se enfrentó a todos los poderes constituidos, se enfrentó a todos los que gozaban estos privilegios.
La historia de los cuerpos de los pueblos que sobreviven hace más de 500 años traídos en los navíos desde el Àfrica y en los pueblos originarios, la historia de marginalización de los cuerpos se resumía en el cuerpo de Marielle.
[1] Partido Socialismo e Liberdade (Partido Socialismo y Libertad). Fundado en 2014 a partir del desprendimiento del Partido de los Trabajadores (PT)