Claudio Armando, abogado de uno de los ferroviarios imputados por el crimen de Ferreyra, presentó un escrito para pedir que se investigue la conducta de quienes se manifestaron el 20 de octubre de 2010 e intentaron la interrupción del tren. Ayer se reunieron las 17 defensas para impulsar una estrategia común. Los argumentos que darán en el juicio.
Además de realizar numerosas maniobras para dilatar el inicio del juicio, los abogados defensores desarrollaron una batería de argumentos con los que intentarán defender a los diez civiles y siete policías imputados por el crimen entre ellos recusar a los jueces que integran el Tribunal Oral 21 y acusarlos de no ser imparciales, argumentar que lo ocurrido no fue “el ataque de una patota” sino “agresiones en una riña donde hubo agresiones mutuas” ante un “intento de cortar las vías” por parte de los tercerizados. A esto se suman las deducciones que hacen los abogados sobre las pericias balísticas y las conclusiones a las que llegan. Recordemos que el perito Locles, llevado por la defensa, alteró la bala que mató a Mariano Ferreyra, hecho por el que hoy está imputado.
Sin embargo, lo curioso y novedoso es que el defensor oficial Claudio Armando presentó un escrito donde pide que se investigue a los manifestantes y también a los funcionarios judiciales por no haber indagado la línea de interrupción del servicio de trenes en la causa por el homicidio de Mariano Ferreyra. En este sentido, se reflota la línea argumentativa que busca exculpar a los ferroviarios imputados en el crimen ya que su accionar se habría debido al intento de que los tercerizados no corten las vías ni interrumpan un transporte público. Investigar a los trabajadores tercerizados que fueron víctimas del ataque –recordemos que además del homicidio de Ferreyra hubo tres heridos de bala, Elsa Rodríguez, Nelson Aguirre y Ariel Pintos- parece ser una de las hipótesis que la defensa retomará a lo largo del juicio. Claudia Ferrero, una de las abogadas querellantes afirmó: “el escrito de Armando es extemporáneo y quiere presentar una devaluada teoría de los dos demonios. Como si de un lado estuvieran los malos que quieren cortar las vías y del otro los malos que asesinan. Acá había tercerizados reclamando sus derechos y una patota asesina que contrata barrabravas”.
Resulta sospechoso que el abogado defensor más activo de las 17 defensas sea Oscar Igunet, cuyo defendido es el picaboletos Guillermo Uño, acusado de esconder las armas luego del ataque de la patota, cuyo delito es menos al que pesa sobre Pedraza y compañía. Este abogado fue el mismo que presentó en una de las pericias al perito de parte Locles, quien golpeó reiteradamente la bala que mató a Mariano Ferreyra contra una mesa, por lo que es hoy está acusado por alterar la prueba. En efecto, en una maniobra que parece coordinada con el resto de los abogados defensores, Igunet presentará hoy nuevamente el pedido de recusación (que ya fue rechazado en dos oportunidades, por lo cual ahora se apela a Casación) para los tres jueces del TOC 21, Diego Barroetaveña, Carlos Bossi y Horacio Días. En las últimas horas trascendió que hubo una reunión secreta entre todos los abogados defensores para coordinar la estrategia judicial.
Por su parte, el abogado de Pedraza, Carlos Froment quien fue defensor de Roberto Viola en el juicio a las Juntas y abogado de Erman Gonzalez, ex ministro de Defensa de Menem en la causa por contrabando de armas, insistió en la inocencia de su defendido. Los días posteriores al crimen de Mariano, Froment defendió a Díaz y lo asesoró en sus declaraciones. Recordemos que en su primer declaración, Díaz dijo que hubo disparos desde el grupo que quería cortar las vías y que no hubo “patota” sino que concurrieron “espontáneamente” al lugar.
Según los abogados de la querella, los argumentos son bastante débiles tanto por las pruebas que se presentarán en el juicio como por los testimonios de cientos de testigos que brindarán su relato en Comodoro Py. La doctora Ferrero desestimó el argumento del enfrentamiento: “En el expediente está ampliamente probado que los manifestantes se estaban retirando y que no fue un enfrentamiento. Las filmaciones de C5N, los testimonios de los trabajadores de este canal que estaban allí, incluso el sumario policial, todo demuestra que los tercerizados se iban y la patota los va a buscar”.
Otro de los argumentos de la defensa es que la pericia balística demuestra que hubo un rebote de la bala y, según ellos, esto indicaría que no hubo intención de matar. Frente a esto, Ferrero indicó que la misma bala que mató a Mariano hirió en la cabeza a una de las militantes del Partido Obrero, Elsa Rodríguez. “Si un impacto directo a la cabeza no es intento de matar, díganme qué es”, se preguntó Ferrero. Según explicó Maximiliano Medina, abogado de la familia de Mariano Ferreyra, “las últimas pericias hacen que no descartemos la existencia de más de dos tiradores. Algunos testigos describieron a una tercera persona y los peritajes muestran que la muerte de Mariano es con una pistola 38, que es la misma que hirió a Nelson y a Elsa. Otra pistola hiere a Pintos y en el último peritaje se ve que la segunda herida de Nelson es con un proyectil de escopeta recortada. Además se secuestraron cartuchos de un arma calibre 22”.
Recordemos que los integrantes de la patota, al igual que Pedraza y el Gallego Fernández llegan al juicio detenidos, mientras que los siete policías acusados continúan en libertad.