Por Roma Vaquero Diaz*.
Cincuenta años después de la creación de una de las obras más destacadas de la artista plástica Marta Minujín, se recreó en el MAMBA “La Menesunda según Marta Minujín”, obra que rescata a la creada en 1965 entre fotografías, videos, notas y testimonios de artistas que participaron en aquel entonces.
La Menesunda -palabra que viene del lunfardo y significa lío, confusión, enredo- es una instalación que hace sentir al visitante como un niño o una niña que entra a una casa de la infancia encantada: husmear en la habitación de los padres, reflejarse en espejos y televisores, jugar a maquillarse, subir escaleras, esconderse en los rincones o en la heladera; entrar por túneles que te llevan a calesitas de colores, pero también a recovecos más oscuros y de temor para salir como un adulto emocionado con ganas de volver a recorrer sus propios recuerdos.
Es que Marta Minujín logra convertir el museo en una sala de juego, consigue arrancar el arte de su mandato como objeto y te instala definitivamente en el asunto. Su objetivo es que vivencies el arte. Estar en la obra, ser la obra y divertirte en la experiencia.
La Menesunda nace en 1965, en el Instituto Di Tella. Creada por Minujín junto a Rubén Santantonin, con la colaboración de Pablo Suárez, Floreal Amor, Leopoldo Maler, Rodolfo Prayón y David Lamelas; consistía en una estructura laberíntica de 400 metros cuadrados, en una excursión por once situaciones multisensoriales que sacudían física y simbólicamente. Pretendía también distanciarse de lo impuesto mediante el juego para posibilitar otra mirada. Volver extraña la experiencia cotidiana, salir de lo obvio para poder observar el otro lado de las cosas. Tornar extraño lo conocido, experimentar, vivir en arte. En ese momento, la muestra fue un éxito y estuvo abierta 15 días.
Con esta obra, Minujín comienza a desplegar el Arte de Participación Masiva. Esta idea sostiene que el arte no es sólo para la gente del arte sino para todo aquel que lo desee, porque todos tienen el derecho a vivir en arte. Cuando recuerda La Menesunda, la artista manifiesta que “la gente se metió en el arte, vivió en arte y lo hizo popular”. Con esta obra además desarrolla la interdisciplinariedad ya que en La Menesunda estaba contenido el arte cosa, el objeto, el video y la participación.
Reviviendo La Menesunda
En octubre de este año, cincuenta años después de esa fiesta en el Di Tella, el Museo de Arte Moderno de Buenos Aires presenta “La Menesunda según Marta Minujín”, y la obra sigue teniendo el mismo encanto. Por un lado, poder experimentar y conocer una obra que es parte del inconsciente colectivo argentino y por el otro, sacudir la propia historia.
La reconstrucción se realizó a partir de fotografías, videos, notas y el testimonio de los artistas que colaboraron en la pieza original. Se tuvo especial cuidado en cada detalle y Minujín estuvo atenta a cada elemento del montaje.
Poner el cuerpo a la experiencia sin saber lo que viene, perderse en el tiempo, mantener el equilibrio en el espacio. La vida cotidiana está plagada de arte y el artista lo descubre, lo comparte y nos invita a jugar para sacudirnos el paso y que inventemos nuestra propia forma de caminar. Y claro está, esta caminata nunca es solitaria, es para construirla entre todos.
*Profesora de arte. Performer
**La Menesunda se puede visitar hasta febrero de 2016 en el MAMBA, Av. San Juan 350 (CABA), de martes a viernes, de 12 a 18hs