Por Diego Fina. El Torneo Final promete ser apasionante y cuenta con la particularidad del retorno de futbolistas de prestigio internacional, como es el caso de Riquelme, Gago y Montenegro. Muchos buscan continuidad pensando en el Mundial.
En los últimos años, cada vez que se inicia un nuevo campeonato argentino se hace foco en la cantidad de jugadores de jerarquía que emigraron, principalmente jóvenes proyectos. Sin embargo el actual mercado de pases se caracterizó por la vuelta de figuras de peso, no sólo en el plano de los futbolistas, sino también en la dirección técnica, con los regresos de Ramón Díaz y Carlos Bianchi.
La proximidad con la Copa del Mundo del 2014 es un factor que en parte explica dicho fenómeno. Un ejemplo de ello es Fernando Gago, quien sin lugar en el Valencia de España decidió volver a la Argentina para jugar en Vélez, el último campeón local, siendo la gran sorpresa del mercado. El volante es una de las piezas claves en el esquema del entrenador del seleccionado nacional Alejandro Sabella y rechazó ofertas de Brasil y de Europa con el objetivo de sumar rodaje en un club que también disputa la Copa Libertadores y la Copa Argentina.
Caso similar es el de Juan Manuel Martínez, que arribó a Boca tras ser tenido poco en cuenta en el Corinthians de Brasil y en un gran momento personal. Tuvo un buen rendimiento en el verano y una actuación discreta en su debut por el torneo con victoria ante Quilmes. Luego de tantas idas y vueltas llegó el regreso tan esperado al club de la Ribera de Juan Román Riquelme tras siete meses de ausencia y actualmente se entrena con el plantel en busca de la puesta a punto. Ambos fueron pedidos por Bianchi, quien despertó de su siesta y con su presencia también jerarquiza el campeonato argentino, al igual que Díaz. El riojano ya le cambió la cara a River y sumó dos jugadores de nivel como Juan Iturbe y Leonel Vangioni. Este último cumplió una labor destacada en su victorioso debut con gol incluido ante Belgrano y se afianza como titular en el conjunto de Núñez.
La situación de Daniel Montenegro pasa por lo visceral, ya que su incorporación a Independiente se dio por su amor a la institución y para colaborar en dejar al club en Primera, comprometido seriamente con los promedios. Su primer partido no fue como lo esperado y el “Rojo” cayó como local ante Newell’s, permaneciendo de este modo en zona de descenso directo. Racing por su parte contrató los servicios del mediocampista Mario Bolatti, uno que nunca logro afianzarse en el Internacional de Porto Alegre y sin dudas le da un salto de calidad al fútbol argentino, en especial por su buen trato del balón, algo que últimamente escasea. En su primer partido ante Atlético de Rafaela su equipo cayó por 3 a 0 y el sólo ingreso unos minutos.
Muchas veces el sueño de jugar en Europa queda opacado y jugadores que emigran ante ostentosas propuestas económicas se olvidan de lo deportivo y terminan regresando antes de lo esperado. Pero hay ejemplos donde lo económico pasa a un segundo plano. De hecho anteriormente ya habían arribado otros futbolistas de trayectoria como David Trezeguet, Maximiliano Rodríguez, Gabriel Heinze, Leonardo Ponzio, Mauro Camoranesi, Fernando Cavenaghi y Alejandro Domínguez. El fútbol argentino debe poder reinventarse y ofrecer un espectáculo acorde a la pasión que lo rodea. Es habitual que en un partido el marco supere ampliamente al mismo desarrollo del juego, a las propuestas de los equipos. Si bien la mayor responsabilidad de este fenómeno recae en el trabajo de los entrenadores y de las presiones con las que se juega, las individualidades forman los planteles y mayor sea el nivel de ellas más posibilidades habrá de tener buenos partidos.
Es de esperar que este arribo de talentos contribuya a mejorar el nivel del fútbol local y se pueda ver un torneo entretenido. El correr de los encuentros torcerá la balanza para un lado u otro, pero a priori genera interés el posible desarrollo que tendrá el certamen. Sólo resta disfrutarlo, o padecerlo.