Por Camila Parodi
El Tribunal de Mar del Plata halló culpable de la violación y asesinato de Laura Iglesias, a Esteban Fabián Cuello el único imputado de la causa. Una nueva conquista del movimiento de mujeres que sienta precedente al considerar este accionar en el registro de femicidios y que sirve de impulso para continuar desmenuzando la complicidad policial que se cree hay detrás del caso.
Luego de las intensas jornadas que se realizaron los días 8, 9, 10 y 11 de junio, llegó la mañana del lunes donde se leería la sentencia, sin lluvia ni frío que las detenga militantes de organizaciones de mujeres, sociales, sindicales, estudiantiles y de derechos humanos se acercaron a las puertas del tribunal, decididas a “aguantar con bastante en contra, porque la necesidad era la de hacerse escuchar” como lo expresó a Marcha Lujan Sangoy, integrante de Conurbanas.
Ya para horas del mediodía donde el frío no se daba a vencer, el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 3 de Mar del Plata resolvió condenar a Esteban Fabián Cuello como “autor penalmente responsable de los delitos de robo y abuso sexual seguido de muerte” de Laura Iglesias, la trabajadora social del Patronato de Liberados Bonaerense (PLB) quien se encontraba ejerciendo su tarea en Miramar cuando fue asesinada.
Con la lectura de la sentencia familiares y compañeras de Laura la celebraron como un nuevo paso para el esclarecimiento del asesinato ya que “se tomaron todos los alegatos planteados por la defensa y la familia a lo largo del juicio y eso es muy importante”, remarcó Sangoy luego de participar de la jornada.
Por su parte Lucía iglesias, la hija de Laura manifestó su sensación como “una alegría mezclada con la tristeza y la indignación”. Si bien, este es sólo un primer paso en la búsqueda de verdad y justicia de la causa, y así lo entendieron familiares, compañeras y el movimiento de mujeres que acompañaron el desarrollo de las jornadas, también se celebró la sentencia dictada por los jueces Juan Sueyro, Eduardo Alemano y Fabian Riquert quienes insistieron en la continuación de la debida investigación de todos los responsables de su muerte. Por su parte, los magistrados solicitaron a su vez que dicha sentencia sea incluida en la Unidad de Registro, Sistematización y Seguimiento de Femicidios y de Homicidios Agravados por el Género de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación.
Se espera que se avance en otras líneas de investigación
Laura tenía 53 años en marzo del 2013 cuando salió en su rutina de visitas y acompañamientos a detenidos con libertad asistida que se encontraban bajo su tutela. En el camino su auto se atascó, imposibilitada para seguir su recorrido logró que la lleven a Mar del Plata para volver por la tarde en busca de su auto. Al día siguiente, su cuerpo fue encontrado sin vida en un descampado en Miramar. Ella estaba realizando su trabajo en un barrio de la ciudad balnearia en situaciones de abandono y precariedad por parte del Patronato por lo que días previos al asesinato había manifestado su preocupación ante la hermana.
Si bien desde un principio este hecho fue tomado como un acto de violencia aislado tanto para la cobertura mediática como por el abordaje de investigación criminal, familiares y compañeras del Patronato de Laura insisten desde sus inicios en la necesidad de que se profundice la investigación sobre la posible complicidad policial en su asesinato. En ese marco, denuncian a su vez la hostilidad y soledad en la que fue dejada su compañera ante semejante tarea. Por ello los jueces extendieron la sentencia al Ministerio Público Fiscal de forma tal que el mismo investigue la participación de otros posibles inculpados en el crimen pero también al trabajo del Patronato de Liberados Bonaerense (PLB) para que aborde la situación de vulnerabilidad de quienes ejercen dicho trabajo.
Ante este tema Sangoy manifestó que el hecho de que hayan “reconocido la figura de femicidio y las condiciones laborales ya que era una lucha que Laura como delegada estaba dando previo a su asesinato es muy importante” ya que más allá de este caso reconoce la lucha “muchas de las compañeras que estaban ahí eran amigas de militancia en el sindicato entonces que el fallo reconozca la situación de precariedad laboral de ellas”, expresó la militante.
Los familiares de Laura vienen llevando su causa como bandera desde que comenzaron a encontrar las irregularidades de la misma. Participando de los Encuentros Regionales y Nacionales de Mujeres como así también de distintas actividades de Derechos Humanos, “los Iglesias” de la localidad de Hurlingam, ciudad natal de Laura lograron instalar la lucha por Verdad y Justicia por Laura Iglesias como una bandera más de las reivindicaciones del movimiento de mujeres.
Es así que para Lucia Iglesias “fue muy importante la presencia de las feministas de organizaciones sociales en el veredicto”, en particular recalcó la presencia y acompañamiento de la Campaña Nacional Contra Las Violencias Hacia Las Mujeres, “gracias a las mujeres organizadas en los movimientos sociales tuvimos el acceso a contactos, radios, apoyo en fin a la visibilización de la causa”. Por su parte Sangoy, remarcó la importancia de la participación del colectivo organizado de mujeres a lo largo de las jornadas, “esta sensación de estar entre nosotras, estar acompañadas, sabiendo que te cansas y canta la otra, es una interesante posibilidad del colectivo de estar compartiendo con un montón de compañeras sabiendo que estamos ahí porque buscamos lo mismo: justicia”.
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