Por Vivian Palmbaum @vivi_pal
En la tarde del jueves 30 de noviembre se realizó una conferencia de prensa en el Centro Cultural de la Cooperación, para anunciar el lanzamiento de la Semana de Acción Global contra la Organización Mundial del Comercio. Allí se dio a conocer la inédita medida del gobierno argentino, calificada como papelón internacional, por la cual se rechazaron las visas de las personas que como representantes de la sociedad civil vienen a participar de las deliberaciones, en lo que constituye una nueva violación de derechos.
Fuera OMC
Una serie de actividades que se nuclean en la Cumbre de los Pueblos, se realizarán entre el 7 y el 13 de diciembre, como respuesta a las deliberaciones de la Conferencia Ministerial de la Organización Mundial del Comercio, con sede en Argentina, y para poner en agenda una economía para los pueblos.
La Confluencia Fuera OMC, constituida por distintos colectivos de trabajadores, gremiales, culturales y de distintas regiones del país y del mundo viene organizando desde hace meses actividades para rechazar las deliberaciones de la OMC en la Argentina, que tienen como finalidad fortalecer al capital globalizado y maximizar sus ganancias de espaldas a las necesidades de los pueblos.
En la Conferencia de Prensa se anunció un hecho inédito de censura que sucede por primera vez “en los veinte años que viene deliberando la OMC”. Lxs organizadores de la Semana de Acción Global explicaron que: “tal como está establecido para la Conferencia de la OMC se realizan acreditaciones de delegados y delegadas de los gobiernos, de las organizaciones de la sociedad civil, de la prensa y de toda la gente que pueden tener acceso a una parte de las reuniones, no en las negociaciones, pero le da seguimiento a lo que va sucediendo”. Es una presencia muy importante.
Con gran preocupación se expresaron en la conferencia de prensa: “El gobierno argentino es el primer gobierno en el mundo que se ha arrogado el derecho de decir quienes pueden y quienes no pueden venir a participar, como se hace habitualmente”. La noticia se conoció ayer y es probable que estas personas no puedan ingresar a las conferencias y tampoco al país ya que les han denegado la visa. La comunicación fue enviada directamente a la OMC, en lugar de haber informado a las personas afectadas. “Se cuentan hasta ayer por lo menos 50 delegados y delegadas de todo el mundo que no podrán ingresar a nuestro país”.
Con motivo de lo que es considerado un acto de censura inédito, desde que se han iniciado las reuniones ministeriales de la OMC, se ha cursado un comunicado al Presidente de la Nación, con copia al Ministro de Relaciones Exteriores, a la Ministra de Seguridad y a la Presidenta de la Conferencia Ministerial de la OMC, Susana Malcorra, al Embajador Roberto Azevêdo, Director General de la OMC. También en los países de origen de los delegados y delegadas censuradas y denegadas las visas se están haciendo las gestiones para revertir esta decisión. Desde la Confluencia calificaron la decisión del gobierno argentino como “un papelón internacional, y una violación a los derechos de las personas”.
Petición al presidente
Ing. Mauricio Macri, Presidente de la Nación:
Recibimos en el día de la fecha, con extrema preocupación, información de las oficinas de la Organización Mundial del Comercio en Ginebra notificando que el gobierno argentino ha decidido denegar la acreditación para la próxima Conferencia Ministerial de la OMC, que tendrá lugar en Buenos Aires, de un número sustancial de delegadas y delegados de la sociedad civil local e internacional, quienes a su debido tiempo habían sido acreditados por la OMC. Esa misma información desaconseja a los y las representantes de las diversas organizaciones sociales viajar a Buenos Aires, para evitar que les sea denegado el ingreso.
También es objeto de grave preocupación la decisión de su gobierno de denegar visas de entrada a otras personas debidamente acreditadas y, en otros casos, sea para participar en la Conferencia Ministerial o en actividades relacionadas, demorar o retardar innecesariamente la tramitación de las mismas.
Rechazamos estas medidas unilaterales y autoritarias que violan derechos fundamentales de las personas y organizaciones involucradas, cercenando la participación democrática en un ámbito en que se discuten cuestiones de nivel global que afectan al conjunto de la sociedad. No hacen más que mostrar al mundo que el suyo es un gobierno con alto desprecio por el estado de derecho, los derechos humanos y la convivencia democrática. De acuerdo con la información recibida, su gobierno ha alegado razones de “seguridad” sin mayores explicaciones, en lo que puede interpretarse claramente como una tentativa de impedir la participación de voces críticas de las políticas que su gobierno y otros más, buscan avanzar en el marco de esta Ministerial. Cuestiones mismas que se vienen negociando en secreto, como la posible firma de un acuerdo mal llamado de “libre comercio” entre la Unión Europea y el Mercosur, o la cesión de soberanía y control sobre áreas de importancia estratégica como las compras gubernamentales, la agricultura ecológica, las finanzas y el comercio electrónico de los datos personales.
Estos hechos, además, resultan inauditos. En más de 20 años de existencia de la OMC, nunca un gobierno anfitrión ha tomado decisiones de esta naturaleza y amplitud. Muchas de las organizaciones y personas cuya acreditación se deniega han participado activamente en las Conferencias Ministeriales y otros ámbitos institucionales de la OMC desde su creación misma. Así como también en espacios de discusión y movilización en diversos países del mundo entero, de manera paralela, como en esta ocasión será la Semana de Acción #Fuera OMC y la Cumbre de los Pueblos Construyendo Soberanía. Entre ellas, se incluye la Confederación Sindical Internacional (CSI), UNI, La Vía Campesina, Amigos de la Tierra Internacional, el Instituto Transnacional y la Red de Justicia Global.
La actitud de su gobierno contraviene la práctica diplomática regular para las conferencias internacionales de los organismos multilaterales. Al ofrecerse como país anfitrión de la Conferencia Ministerial 11, el gobierno de la Argentina ha acordado permitir la participación en la reunión al conjunto de participantes registrados por la organización internacional, incluyendo a los delegado/as de los países, la prensa, representantes de organizaciones no-gubernamentales, y otros. Es inadmisible que el Gobierno Argentino ahora se arroga la toma de decisión de quienes pueden participar del evento que realiza la OMC, desconociendo las décadas de precedentes y los mecanismos oficiales establecidos y aceptados por Argentina como país anfitrión.
Señalamos asimismo que este cercenamiento de la presencia y participación de la sociedad civil cuestiona seriamente la capacidad de la República Argentina para asumir además la presidencia del G20. Sobre todo, a sabiendas mundiales del contexto de conflicto social y represión que las políticas de su gobierno van generando. A los hechos informados por la OMC y organizaciones sociales de todo el mundo, se suman el asesinato de Rafael Nahuel días atrás, la desaparición y muerte de Santiago Maldonado, la persecución a las comunidades originarios y la militarización de los territorios donde se realizará las próximas actividades tanto del G20 como la OMC. Caravanas de tropas de gendarmes se movilizaron en estos días camino a la comarca andina y se anuncia medidas gravosas de exclusión y control para los días de la Ministerial en Buenos Aires.
Instamos a su gobierno a revertir estas medidas de inmediato y a cumplir con sus obligaciones en materia de derechos humanos y participación ciudadana, haciendo efectiva en la realidad la voluntad de transparencia que proclama. Solicitamos además al Director General de la Organización Mundial del Comercio cancelar y trasladar a otro país la Conferencia Ministerial si esta cuestión grave y problemática no tiene pronta resolución.
Agenda de los pueblos
Recordamos que la Conferencia Ministerial de la Organización Mundial del Comercio inaugura una serie de deliberaciones mundiales respecto del comercio internacional, donde la Argentina busca un protagonismo regional e internacional, y que el próximo año 2018 la Argentina también será sede, durante todo el año de las deliberaciones del G20.
Los pueblos ya saben que para que ganen unxs deben perder otrxs, de espaldas a la soberanía de los pueblos. Un motor para continuar organizándose con acciones cada vez más creativas, que demuestran que ningún acto de censura podrá impedir construir una economía para los pueblos. La Cumbre de los Pueblos promete reunir a los pueblos del mundo que tendrán la oportunidad de compartir sus agendas e intereses.