Como mínimo, 25 empresas constructoras israelíes han falsificado documentos con el objetivo de expropiar tierras para levantar asentamientos judíos en zonas palestinas. La denuncia fue realizada el domingo por Mohammad Elias, responsable de Asentamientos y Muro de la Autoridad Palestina.
Las autoridades palestinas revelaron que los títulos falsos son alrededor de 25 en la aldea de Marda, en el noreste de la Cisjordania, y que documentos similares fueron encontrados en la aldea de Qarawat Bani Hassan. “Estamos buscando todas las herramientas legales para resistir los intentos de las compañías constructoras israelíes encaminados a controlar y confiscar tierras”, indicó Elías en declaraciones difundidas por la agencia Maan.
Los delitos efectuados por estas compañías se descubren en momentos en que el gobierno israelí busca construir un intercambiador de transportes cerca de Qarawat Bani Hasán para comunicar Jerusalén con el asentamiento de Maale Adunim. A su vez concuerda con la política expansionista del Estado de Israel, que desde hace décadas impulsa la creación de asentamientos judíos en Palestina, en su gran mayoría habitados por ciudadanos ultraderechistas.
La construcción de colonias por parte de Israel ha sido denunciada a nivel internacional y resoluciones de la Organización de Naciones Unidas (ONU) han condenado esta política, aunque los sucesivos gobiernos de Tel Aviv rechazan cumplirlas. Además, desde Palestina se denunció que este tipo de medidas de expansión bloquean la posibilidad de diálogo de paz entre ambas partes.
Según la ONU, desde la ocupación militar de Cisjordania en 1967, Israel ha construido 150 asentamientos ilegales en la zona y hay otros 100 emplazamiento provisionales levantados por los colonos y considerados ilegales incluso por el propio Estado israelí. Se calcula que medio millón de israelíes viven en estas colonias. A estos datos se suman los conocidos días atrás, que señalan que Tel Aviv anunció un plan de confiscar alrededor de 100 hectáreas de tierras pertenecientes a los palestinos en la ciudad de Nablus ubicada en el norte de Cisjordania, con el fin de construir asentamientos ilegales. Desde hace más de un año, Awarta, junto con otras aldeas, ha sido escenario de confiscaciones e incursiones realizadas por fuerzas israelíes.
La cadena HispanTV informó que una organización no gubernamental para la vigilancia de asentamientos israelíes informó a finales de mayo que Israel planea construir al menos mil asentamientos ilegales en Al Quds, Jerusalén. A esto se agrega que se firmaron contratos para la construcción de unas 300 viviendas en el asentamiento nororiental de Ramot y 797 parcelas van a ser puestas a la venta en Gilo. HispanTV indicó que Tel Aviv confiscó 1.977 hectáreas de Cisjordania para utilizarlas en actividades relacionadas con los asentamientos ilegales.
Otra denuncia de la ONU
La semana pasada, el relator especial de Naciones Unidas sobre la situación de los derechos humanos en los territorios palestinos ocupados por Tel Aviv, Richard Falk, alertó que existen maniobras que pretenden distraer la atención del mundo con respecto a la conducta de Israel en los territorios palestinos ocupados.
“Ni Israel ni sus aliados pueden justificar los hechos que ocurren en esas tierras y es vergonzoso que existan organizaciones con el único propósito de confundir a la opinión pública”, expresó el funcionario. Falk denunció que los gobernantes desvían, distorsionan y difaman para, de esa manera, permitir que la violencia contra los palestinos continúe.
El relator de la ONU también explicó que existen “campañas irresponsables y deshonestas dirigidas a desacreditar a quienes documentan la realidad de la conducta de Israel durante los últimos 46 años”. Como ejemplos, Falk recordó la demolición de casas de palestinos y la repoblación de los territorios ocupados con ciudadanos judíos. El funcionario advirtió sobre la constante detención de personas sin la presentación de cargos y “el castigo colectivo impuesto a un millón 750 mil palestinos a través del bloqueo contra la Franja de Gaza”.
Falk aseveró que alrededor de 650 mil israelíes se han instalado en los territorios ocupados hasta finales del año pasado, mientras Tel Aviv persiste en la construcción de nuevos asentamientos para sus colonos en esas tierras. A su vez, afirmó que el Estado israelí ha confiscado los sistemas hidráulicos y de tierras que existen en Palestina.
Por último, el relator de la ONU manifestó que unos 750 mil palestinos han sido detenidos por Israel desde el inicio de la ocupación y en el presente hay cerca de 5.000, entre ellos 236 niños y otros 200 recluidos bajo el llamado sistema de detención administrativa, sin cargos en su contra.