María Ester Ledesma era trabajadora sanitaria del Hospital Gandulfo en Lomas de Zamora. Se contagió de coronavirus, su situación se agravó por varias enfermedades preexistentes y falleció el jueves pasado. Había solicitado seis veces la licencia por estar entre la población de riesgo.
Por Redacción Marcha |
Quienes trabajan en salud son parte de las personas más expuestas al COVID19. A los insuficientes o nulos protocolos de cuidado de los y las trabajadoras se suman las graves deficiencias estructurales de la salud pública. Hoy lunes 8 de junio, frente a la puerta del Hospital Luisa C. de Gandulfo de Lomas de Zamora, las y los trabajadores de la salud convocan a una jornada de duelo. Será desde las 11 horas, a raíz de la muerte prevenible de María Ester Ledesma.
Marcha dialogó con una enfermera del Hospital Gandulfo, compañera de María Ester Ledesma e integrante de la planta de trabajadorxs del hospital que deben enfrentar al COVID19 con lo que se puede. Antes de contestar quién era María, su compañera hace un silencio y traga saliva. Apenas han pasado unas horas desde que su compañera y amiga perdió la vida.
“María Ester Ledesma era una enfermera de 50 años, se desempeñaba como enfermera en pediatría. Una persona muy responsable y muy querida por sus compañeros. Las enfermeras del sector de pediatría son muy especiales porque trabajan con chicos. María Ester era diabética, insulinodependiente, hipertensa y tenía un problema de obesidad, lo que la convertía en una persona de alto riesgo ante el COVID19. Por decreto, los trabajadores de salud fuimos declarados indispensables y nos cortaron vacaciones, licencias, todo. Se suponía que iba a haber algunos trabajadores de grupos de riesgo que se le iba a dar licencia. La compañera pidió tres veces esa licencia. El tema era que tenía nada más que 50 años y el decreto que firmaron desde el Ministerio decía que tenía que tener más de 60.
Trató seis veces de sacar la licencia pero no hubo caso. Siguió trabajando, atendiendo pacientes con COVID19. Por ejemplo, uno de los primeros casos que hubo en Lomas de Zamora, que era un matrimonio y sus dos hijos que estuvieron internados en el hospital. Sus compañeros trataron de cuidarla pero hubo momentos en que no se pudo porque no hay personal y la compañera se contagió. El contagio de COVID19 en una paciente de riesgo triplica lo que es la enfermedad. Lamentablemente falleció el día jueves y no solamente eso, sino que su madre falleció la semana pasada, a la que ella contagió, su hijo sigue internado y su hija y su esposo también están contagiados pero están dentro de su casa.
Los trabajadores del hospital venimos reclamando, algunos agrupados en ATE y otros no, que ‘queremos justicia por María Ester’. Porque el sistema perverso del Siape[i] instalado por María Eugenia Vidal y que el nuevo gobernador, Axel Kicillof, no hizo nada para revertir, nos obliga a ir a trabajar aun enfermos para no perder dinero, porque tenemos sueldos bajos, porque si faltamos por enfermedad se pierde plata. Y a los compañeros que sí le dieron la licencia por la pandemia el gobierno provincial no les pagó los 5000 pesos del bono porque no estaban al pie de cama. Es muy injusto lo que está haciendo el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires.
Nosotros vamos a seguir peleando, vamos a seguir estando en la puerta del hospital reclamando justicia por María Ester. Hoy vamos a hacer una jornada de duelo en la puerta del Hospital Gandulfo para que se visualice que los trabajadores de salud somos seres humanos y no un número, como piensa la Provincia de Buenos Aires”.
¿Cuál es la situación que atraviesan los y las trabajadoras del hospital?
“Actualmente tenemos compañeros que tienen diversas enfermedades de base que también el sistema Siape les niega la licencia. Hoy tuvimos una reunión con la dirección del hospital, donde exigimos que a los compañeros se los cuide, sabiendo que hay personas operadas del corazón o que tienen EPOC u otros problemas que el sistema del Siape niega”.
¿Qué están haciendo la intendencia y la gobernación?
“Tenemos pacientes COVID19 positivos que podrían estar aislados. Ahora se habilitó un club que está cerca del hospital que tendría que estar controlado y asistido por el Municipio de Lomas de Zamora, pero lamentablemente tanto Martín Insaurralde, como el Secretario de Salud Pública, Mariano Ortega, lo dejan a la deriva, así que se tiene que hacer responsable el Hospital Gandulfo de enviarle la comida a la gente que está ahí y de enviarle un médico del hospital para que los controle, cuando eso es responsabilidad del Municipio. El Estado municipal y el Estado provincial son responsables. El Estado provincial es el asesino de María Ester Ledesma. Vamos a seguir peleando para que este asesinato no quede impune”.
Una situación estructural
Una profesional de la salud de la Asociación de Profesionales de la Salud de Lomas de Zamora, de la CICOP Democráticos lista 17, nos contó cómo es la situación estructural en la que se produce la muerte de una trabajadora de la salud.
“En los hospitales y unidades sanitarias, desde que empezó la pandemia, hubo una lucha constante para poder reclamar los equipos de protección personal, los protocolos, que esos equipos tengan la correspondiente calidad y cantidad, y que sean de acuerdo a la actividad que haga el profesional o no profesional. Si bien hay unidades sanitarias que por ahí tienen estos insumos, no todas podemos decir lo mismo.
También lo que nos pasa es que esta cuestión es estructural. Si bien el COVID19es inédito, es nuevo, es una pandemia, hace 100 años que no sucede, desnuda la situación en la que estamos en el sistema de salud pública, el desguace desde hace años…esto viene desde antes del macrismo, cuando no se invertía en salud y lo que se buscó siempre fue la mercantilización de la salud. El negocio de las prepagas da cuenta de esto”.
La profesional habló sobre la naturalización de las malas condiciones laborales, evidenciando en “no reclamar cuando no hay agua en la unidad sanitaria, no reclamar cuando no hay jabón, cuando no hay lavandina, naturalizar que así se trabaja, eso hizo que hoy estemos totalmente expuestos ante esta situación. Muchos gremios se han burocratizado y también han naturalizado estas malas condiciones de trabajo. No hay protocolos claros en relación a qué hacer en cada caso, eso también nos deja a todos vulnerables. Porque, por ejemplo, se obliga a las pediatras a que atiendan pacientes por infecciones de vías aéreas y no hay un protocolo en relación a eso, porque si el niño viene con síntomas es posible que también tenga COVID19 y no tenemos equipo de protección adecuado, por lo cual también ha afectado el desarrollo de nuestro trabajo”.
Continuó su relato diciendo que “no es que sean malas las condiciones laborales, sino que el trabajador expone su vida. Nos parece bastante criminal cómo se está manejando el Estado provincial y el Estado argentino, porque se le negó reiteradas veces las licencias a las personas del grupo de riesgo, como si fuera que la persona que es personal esencial tuviera otro sistema inmunológico. Nuestra compañera del hospital Gandulfo falleció siendo grupo de riesgo, seis veces pidió la licencia y seis veces se la rechazaron. Esto es muy doloroso. Un Estado que supuestamente dice que te cuida no lo hace. Es importante tener presente que puede ser un discurso lindo pero estamos pasando otra situación en los hospitales y en las unidades sanitarias.
“Estamos exigiendo que se conforme un comité de emergencia en el cual puedan ser escuchados trabajadores y trabajadoras, donde los gremios tengan participación, donde las organizaciones, donde la gente tenga voz en este armado, en este abordaje de algo tan grave como es una pandemia”.
Desde ATE Sur, luego de organizar jornadas de protesta y ollas populares para visibilizar la situación, denunciaron en un comunicado los reiterados pedidos y la negación sistemática de licencias por grupo de riesgo al personal de salud. Tanto es así que recién el 1 de junio, y luego de 70 días de cuarentena, se autorizó por acuerdo paritario que las embarazadas puedan estar exceptuadas de ir a trabajar.
La profesional de la salud además agregó que “en Lomas de Zamora no se están entregando alimentos a las personas que lo necesitan, nos parece bastante preocupante la situación en que está la población que nosotros atendemos, que en muchos casos no han cobrado el IFE, no recibe alimentos por parte del municipio, no hay medicación para pacientes crónicos ya desde antes. Esto es una situación crítica. Necesitamos que esto cambie. Además del COVID19, otras personas van a morir por enfermedades crónicas.
“Estas malas condiciones laborales te llevan a la muerte. Nosotros sentimos que es importante poder visibilizar esta situación, nosotros vemos que se quiere acallar los casos que van apareciendo de profesionales infectados, como si fuera algo que no se puede decir. Culpabilizan a las y los trabajadores: ‘el trabajador no se quiso poner el equipo de protección personal’.
[i] Siape, o Sistema Único de Administración de Personal de la Provincia de Buenos Aires, es una plataforma online a través de la cual se hacen las gestiones y consultas de recursos para todos las y los trabajadores del Estado y funcionarios.