“Marri Marri Folle
Ca huenu chau, Huenu Ñuque
Huenu Zomo, huenu Huentru
Purrapay purrapay Folle
Fentecom Pui, Huenu Folle”
Canto a la bandera de la comunidad mapuche
La comunidad mapuche de San Martín de Los Andes realizó el 10 de diciembre una ceremonia de integración intercultural, en el marco del Día Internacional por los Derechos Humanos.
Por Vivian Palmbaum | Foto: Lof Paicil Antreao
Este 10 de diciembre, en el marco del Día Internacional por los Derechos Humanos, se realizó la ceremonia de visibilización de la Nación Mapuche en la ciudad de San Martín de Los Andes.
Por quinto año consecutivo, como cada 10 de diciembre, se realizó el izamiento de la bandera mapuche, Wenu foye, en la plaza de San Martín de Los Andes, con una ceremonia de integración intercultural. La comunidad mapuche logró, después de luchar mucho tiempo con el municipio y el Consejo Deliberante de dicha ciudad, que se les reconociera este derecho.
“Se celebra este acontecimiento de lucha que logra recordarle a la sociedad de San Martin de Los Andes que todavía estamos vivos y de pie”, afirmó Luis Alberto Curruhuinca, integrante de la comunidad. “Para recordar que este territorio es nación Mapuche y que hoy todavía estamos vivos. Nuestra historia estaba asentada aquí cuando llego el ejercito genocida de la Campaña del Desierto”.
Se trata de una iniciativa para fortalecer la identidad del pueblo Mapuche, impulsada por las comunidades Mapuche Vera, Cayún, Vfkowe Newen, Curruhuinca y la zonal Wiliche en el marco de la Confederación. La iniciativa cuenta todos los años con el apoyo de organizaciones sociales, culturales y políticas.
Para ser reconocidxs y respetadxs como Pueblo Mapuche se iza la bandera Mapuche, Wenu foye, junto a la bandera nacional, como símbolo de la interculturalidad. Así también lo expresaron en un comunicado distintas organizaciones sociales, gremiales, culturales y políticas, y afirmaron que constituye un paso en el reconocimiento de la igualdad y la no superioridad de algunas culturas por sobre otras.
Con la chicha o mushai, las plantas sanadoras o lahuenes, el agua del Lafquen, que cada uno tenía en su casa o ruca. Con su pañuelo, pollera, trailono, makun, instrumentos, entre los que no faltaba el cultrún, se convocó a la ceremonia.
Una ceremonia que se inició a las 5.30 hs. en el Lago Lacar, cerca de los eucaliptus, para rogar y luego compartir unos mates entre las y los integrantes de la comunidad. Luego tuvo lugar una marcha por la Av. San Martín hasta la plaza al ritmo de los instrumentos. Allí estudiantes de las escuelas de la ciudad y de la comunidad izaron juntos y juntas las banderas, acompañadxs por el sonido del cultrún.
No hay mapuches sin territorio
La integración intercultural no solamente se trata de los símbolos que necesitan ser reconocidos, sino que también implica el respeto a los territorios ancestrales que se hallan en disputa frente a un poder voraz que intenta quedarse con sus tierras. Una situación que se intensificó durante el gobierno de Cambiemos, con políticas represivas que tuvieron como resultado la pérdida de las vidas de Santiago Maldonado y Rafael Nahuel, y tantos anónimos, a manos de las fuerzas de seguridad.
Un atropello que consuma un Poder Judicial que no respeta los tratados que reconocen la propiedad comunitaria y ancestral, reconocida en la reforma constitucional de 1994, mientras ya venían apurando órdenes de desalojo.
La comunidad Mapuche está íntimamente ligada a su tierra, que le da sentido a su existencia. “Nosotros somos parte de la tierra, la tierra que no se negocia ni se abandona”, contó la machi Betiana, de la comunidad Mascardi.
En el día de los derechos humanos, 10 de diciembre, los derechos indígenas también se encuentran entre los fundamentos para la libertad, la justicia y la paz.
Nación Mapuche
La comunidad mapuche no se divide en nacionalidades y a ambos lados de la Cordillera se encuentra perseguida y criminalizada.
El derecho internacional, la declaración de Naciones Unidas sobre el derecho indígena y la declaración americana reconocen a los pueblos indígenas el derecho a la libre determinación. Por eso en el cerro Ñielon se autoconvocaron los días 11 y 12 de diciembre para hacer la segunda sesión de la Asamblea Constituyente Mapuche, que tiene por objeto elaborar un estatuto para la autodeterminación mapuche. Así lo expresan también los pueblos mapuches del otro lado de la Cordillera. Un instrumento que les permitiría conformar un gobierno para luego negociar con el gobierno chileno. Este estatuto tendrá por objeto hacer respetar los tratados internacionales en materia de territorios indígenas, que fueron tomados sin el consentimiento del pueblo mapuche en el marco de ocupación territorial del ejército chileno.