Por Mario Hernández
El Hospital Garrahan afronta un nuevo ajuste del Gobierno porteño, en el último año y medio el recorte ascendió 450 millones de pesos. Peligra la salud de los habitantes y los salarios de los trabajadores.
En diálogo exclusivo con el delegado de los trabajadores y trabajadoras del Hospital Garrahan, Gustavo Lerer, la situación que viene atravesando uno de los centros de salud más importantes de la Ciudad de Buenos Aires deja como resultado un estado alarmante. Más de 114 millones de pesos fueron retirados desde agosto a hoy, ya que la Legislatura de la Ciudad “aprobó una partida presupuestaria correspondiente a menos de un tercio de lo acordado y firmado en las paritarias” salariales 2015. El auditor general de la Ciudad, Adriano Jaichenco, aseguró que lamentablemente el Hospital no es noticia por “sus avances tecnológicos, por hacer un doble trasplante de corazón o de pulmón, sino por el importante recorte presupuestario que viene sufriendo desde el año pasado”.
Si bien el Hospital es un ente autárquico de administración compartida, lo que implica que sea sostenido en partes iguales por el Ministerio de Salud de la Nación y por el Gobierno porteño, sus autoridades aseguran que el Ministerio “está cumpliendo con su compromiso”.
-Recortaron el presupuesto del hospital por una decisión adoptada por la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires, donde se expresaron en forma positiva 50 diputados que representan al PRO, Frente para la Victoria, Partido Socialista, Coalición Cívica, SUMA, Frente Progresista y Popular, Frente Renovador, Partido Solidario, Confianza Púbica Democrática y Confianza Pública. Solamente se opusieron cuatro legisladores, del Frente de Izquierda y los Trabajadores (FIT), Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST), Bien Común y Verde al Sur. ¿Cuáles son los fundamentos, si es que existen, de parte de los legisladores y qué es lo que están discutiendo los trabajadores/as y las asociaciones profesionales respecto de esta medida?
-Los fundamentos que tienen habría que preguntárselos a ellos, te dirán que es para el bien común y una serie de mentiras como los comentarios que hizo la diputada Gabriela Alegre que dijo que faltaba plata para el Garrahan y después votó a favor del recorte. Esto es ajuste y campaña electoral. Tradicionalmente el gobierno de la Ciudad se niega a hacer el aporte que le corresponde, no solo con el gobierno de Macri, con el de Ibarra también pasó lo mismo. En el único momento en el que no hubo problemas fue después de la gran huelga que hicimos en el 2005, durante 3 o 4 años el Gobierno aportó lo que le correspondía que era el 50% del presupuesto y después nuevamente empezó a recortar.
En 2014 aportó 113 millones de pesos menos y en 2015 unos 226 millones aproximadamente. De la última partida presupuestaria que se votó en la Legislatura donde el Consejo de Administración pidió 150 millones de pesos, donde estaría incluido el acuerdo de paritarias autorizado por el Gobierno porteño. Dado que el hospital es bi-jurisdiccional, para dar el aumento tiene que tener el acuerdo de los cuatro concejeros, dos nombrados por el Gobierno Nacional y dos por el Gobierno de la Ciudad. Ahora en vez de los 150 millones, darán 44 millones.
-Hay que pagarle a Fernando Niembro.
-Entre otras cosas, a Niembro, a la Metropolitana y para la campaña electoral de Macri. Lo que está claro es que los que le pagan a Niembro no es solamente el macrismo, sino todos los representantes legislativos que nombraste, incluido el FPV.
-Sí. Excepto por los cuatro diputados que mencioné y las abstenciones de Nuevo Encuentro, el Partido Socialista Auténtico y Seamos libres. La inmensa mayoría de las fuerzas políticas de la Ciudad se han pronunciado a favor de este recorte…
-Esto es lo que nosotros y varias fuerzas venimos llamando el “pacto PRO-K en la Ciudad”, sepamos que Macri no podría gobernar sin el acuerdo del bloque del FPV que le vota el 99,9% de las leyes que presenta. El caso más resonante fue el proyecto del Centro Cívico en el Hospital Borda, con el dinero de la venta del Mercado del Plata, votado por el oficialismo nacional y después resultó tragicómico ver a los diputados del FPV rasgarse las vestiduras cuando nos reprimía la Metropolitana en el Borda. No se puede explicar esa represión si no hay un acuerdo entre las dos fuerzas políticas, tampoco que los únicos que quedemos procesados seamos los trabajadores, como fue el caso de mi compañera Cristina Díaz Alem y cinco compañeros más, después de la brutal represión en el Borda. En el procesamiento no hay ningún funcionario y ni un solo policía.
Un futuro incierto
-Elizabeth Ríos no ha sido reincorporada, ¿qué tienen pensado en relación a esta situación?
-Para nosotros el ajuste empezó hace rato, una de las muestras más importantes es el despido de Elizabeth Ríos con más de 23 años de antigüedad y que todavía no fue reincorporada.
-Es importante aclarar esto porque en un momento salió información que decía lo contrario.
-Sí, es el doble discurso que también utiliza el macrismo. Hubo una reunión el 18 de agosto, a más de un mes del despido, entre la compañera y los cuatro miembros del Consejo de Administración, donde dijeron que la iban a reincorporar. La cuestión es que nunca se puso por escrito y al día de hoy no hay resolución, por lo tanto, está vigente la cesantía, de hecho el sueldo de agosto se lo volvimos a pagar con la colecta de los trabajadores porque si no la compañera no podía ni pagar su alquiler ni mantener a su hija, lo cual es una barbaridad.
La situación de los trabajadores y trabajadoras es tan agravante como la realidad que afronta el Hospital, en todo momento hay faltantes de insumos y eso hace que baje la calidad. Igualmente más allá de que la plata obviamente sea necesaria, si no hay un control de los trabajadores y una apertura de los libros, funciona una caja chica bastante grande. Cada jurisdicción aporta 1.165 millones de pesos, donde los consejeros, entre ellos el Dr. Trotta, el candidato a diputado número siete de la lista de Scioli en la Ciudad, detrás de Kicillof y otros tantos ilustres, se reparte con los gremios, en primer lugar UPCN y en segundo lugar SUTECBA.
Entonces tenemos negociados como el de Fernando Niembro que se hizo famoso por la televisión, pero también está lo que le pagan a las tercerizadas, la explotación y las patotas que traen aparejadas estos negociados. El cierre de la sala de tres del año pasado, la destrucción de la sala de oncología, el jardín maternal hecho a nuevo y se llueve por todos lados, etc. Es innumerable la cantidad de negociados que llevan adelante las autoridades con la complicidad de la burocracia sindical, que tiene un modus operandi repetido en varias instituciones: lo vimos con Pedraza en ferroviarios y el ministerio de Trabajo, cuando fue el asesinato de Mariano Ferreyra.
-El 17 de septiembre preveen realizar un paro de una hora por turno….
-Es un plan de lucha que se votó en la asamblea del 3 de setiembre. Después de esta reunión fallida donde le prometen a la compañera la reincorporación veníamos tratando de seguir con asambleas y concentraciones, pero evidentemente tenemos que retomar y profundizar el plan de lucha. Por eso decidimos el corte de calle del pasado jueves 10 y el paro de una hora por turno el 17, así como el estado de asamblea permanente para determinar la continuidad. Si no hay soluciones con el paro de una hora por turno, veremos cómo continuar. Lo que hay que decir es que el primer punto de este plan de lucha es la reincorporación de la compañera, y el segundo el no al recorte ni en los salarios ni en el presupuesto, la apertura de los libros para control de los trabajadores porque la plata que no se roba el gobierno de Macri se la roban en el hospital el Consejo de Administración y los diferentes funcionarios.
No nos vamos a dejar utilizar por quienes quieren usar el presupuesto del salario de los trabajadores y trabajadoras así como los despidos para hacer campaña electoral. Denunciamos a las dos administraciones, macrista y kirchnerista, que hoy se disputan la Presidencia de la Nación, como responsables del despido de la compañera, el ajuste en el Hospital y el voto de la Legislatura reduciendo la partida.