Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejercito del Pueblo (FARC-EP), anunciaron el cese unilateral del fuego desde el día de hoy hasta el 20 de enero de 2013, en el marco de la continuación de los diálogos de paz.
El comandante guerrillero Ivan Marquez anunció el día de ayer en el Palacio de Convenciones de La Habana, sede de las conversaciones de paz con el gobierno colombiano, el cese unilateral del fuego entre el 20 de noviembre de 2012 y el 20 de enero de 2013.
“No habrá acciones ofensivas, ni sabotajes, ni de ataques en ninguna parte del territorio nacional”, afirmó el líder de las FARC desde cuba.
Este anuncio se dio a través de la lectura de un comunicado el mismo día en que los 30 delegados de las FARC y la delegación del Gobierno de Colombia, encabezada por el ex vicepresidente Humberto de la Calles, retomaron diálogos en la búsqueda de poner fin al conflicto armado de casi 50 años en el país.
Este gesto se corresponde con la afirmación por parte de la guerrilla de que un alto al fuego sería beneficioso para el proceso, sobre todo para la población civil, la más golpeada en las décadas de duración del conflicto.
El gobierno de Juan Manuel Santos, por lo pronto, descartó la opción de alto el fuego bajo el argumento de que ese sería el resultado final si se materializa el éxito de las conversaciones.
El Ministro de Defensa de Colombia, Juan Carlos Pinzon, rechazó el jueves pasado esa posibilidad por considerar que “no tiene coherencia”, según informó la corresponsal de Telesur en Colombia, Angie Camacho.
“La fuerza pública tiene obligaciones de carácter constitucional e instrucciones presidenciales claras. Debe perseguir sin descanso en todo el territorio nacional a cualquier criminal u organización criminal”, afirmó el ministro.
Sin embargo y por su parte, el presidente colombiano aseguró en su intervención en la XXII Cumbre Iberoamericana celebrada en la ciudad española de Cadiz, que el gobierno esta determinado a llegar a un acuerdo, a la vez que agradeció el apoyo brindado por la comunidad internacional al proceso de paz.
“No será por intransigencia nuestra que estas conversaciones no tengan éxito en un tiempo prudencial”, afirmó Santos, y aseguró que las condiciones para alcanzar un acuerdo con la insurgencia colombiana “están dadas y esperamos que podamos llegar a un feliz término”.
A su vez, afirmo que debido a la violencia, crueldad y sangre con la que se ha desarrollado el conflicto, el proceso de negociación con las FARC debe estar guiado por los principios de dignidad, eficacia, prudencia y realismo.
La instalación formal de la mesa de diálogo en Cuba durará diez días, luego de los cuales se fijará la fecha del siguiente encuentro. En principió se tratará la cuestión de la tierra y del desarrollo de una política agraria integral, que incluye el acceso y uso de la tierra, programas de desarrollo e infraestructura.
La agenda de debate fijada en el “Acuerdo General para la Terminación del Conflicto y la Construcción de una Paz Duradera” incluye la participación política, el fin del conflicto, el problema del narcotráfico, la construcción de un paz estable, la atención a las victimas y cuestiones como desarrollo social, salud, educación, vivienda, erradicación de la pobreza, estimulo a la producción y seguridad alimentaria.