La CELAC cobra impulso con la visita de la troika que la preside a los dos gigantes asiáticos. Se consolida un bloque interregional, económico y político, que promete picar en punta de cara a la profundización de la crisis mundial.
Desde diciembre pasado, cuando se puso la piedra fundacional de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) en Caracas, poco y nada se ha hablado por estas tierras del organismo que nucléa a los 33 países que conforman el continente, sin Estados Unidos y Canadá.
Cuando se hace referencia a esta organización suele resaltarse como primera instancia el carácter integrador y soberano que adquiere en el actual contexto americano y mundial. Si bien esta es una de sus características principales y una de las razones por la que se constituyó, como alternativa a la OEA que sobrevive bajo el tutelaje de Estados Unidos, la CELAC presenta un desafió y abre posibilidades inmensas constituyéndose como una potencia multinacional.
En este sentido los representantes de la troika que preside el organismo realizan esta semana la visita a los dos gigantes asiáticos: China e India. La troika está formada por el país que ejerce la presidencia pro témpore del organismo (Chile), el anterior (Venezuela, en este caso como presidente fundador) y el país que lo presidirá el año entrante (Cuba).
Alfredo Moreno, canciller de Chile; Nicolás Maduro, su homólogo venezolano y Rogelio Sierra, viceministro de Exteriores de Cuba, arribaron a India para reunirse con su par Somanahalli Mallaiah Krishna. Los cuatro ministros realizaron el martes una cumbre de cancilleres en la que esbozaron las líneas de un plan de acercamiento económico de gran envergadura.
“América Latina tiene grandes reservas energéticas, como petróleo, gas, minerales, grandes extensiones para la agricultura y, en el caso de India, ha incentivado más lo que es la parte industrial, el avance tecnológico, cosas que nosotros necesitamos para dar un salto hacia el desarrollo”, afirmó Moreno a una agencia de noticias.
Una horas antes del encuentro conjunto, los cancilleres latinoamericanos tuvieron sendas reuniones bilaterales con su par indio, para adelantar las relaciones entre sus países.
India es un motor económico mundial en crecimiento, integrante del BRIC -junto a China, Brasil y Rusia- es una de las principales economías emergentes. Actualmente el intercambio comercial con la región latinoamericana asciende a 25.000 millones de dólares y cuenta con inversiones estimadas en 16.000 millones.
Cantidades nada despreciables, pero que se basan principalmente en sus relaciones con los países más grandes de la región como México y Brasil; pero la visita de la CELAC apunta a la cooperación mutua como bloque regional. “La CELAC proporciona una plataforma para interactuar directamente con 33 países. Nuestras relaciones son cordiales y las económicas están creciendo”, apuntó Krishna durante una rueda de prensa.
Del encuentro en el palacete capitalino de Hyderabad, se rubricó un documento donde se acordó “intensificar el intercambio de visitas a todos los niveles, incluido el máximo, para lograr una asociación estratégica”.
Es así que más allá de lo económico se ubica el acercamiento cultural y la alianza política. El comunicado da cuenta de la intención por estrechar la cooperación en los organismos internacionales. “Tenemos un entendimiento sobre diversos acontecimientos regionales y las amenazas a la paz y la seguridad internacionales, y estamos dispuestos a trabajar en temas como la reforma de la ONU, el cambio climático y la situación económica global, en interés de los países en desarrollo”, expresó el canciller indio, en sintonía con la idea de construir un mundo pluripolar, una premisa en la creación de la CELAC.
En este sentido el canciller venezolano destacó el doble reto de este acercamiento: la integración hacia adentro basada en el respeto de la diversidad cultural y política, y la integración “paralela al mundo emergente”.
Con la firme determinación de acercarse también desde lo cultural y lo social, el Consejo Indio de Asuntos Globales (ICWA) organizó el miércoles un seminario sobre la actualidad de Latinoamérica y el Caribe, donde participaron los representantes de la CELAC.
Del Taj Mahal a la Muralla China
Este jueves la troika aterriza en China para reunirse con su par,Yang Jiechi, con los mismo objetivos que envuelven a la gira asiática. En este caso la iniciativa surge luego de que el presidente de China, Wen Jiabao, propusiera crear un foro de cooperación de alto nivel al visitar recientemente Latinoamérica.
La relación de América Latina y el Caribe con China se encuentra más avanzada y cuenta con mayores cimentos, de lo que se tratará ahora es de aceitar y aumentar esa relación de manera conjunta con el bloque continental. Actualmente la relación comercial entre ambas regiones llega a 234.000 millones de dólares.
China fue uno de los primeros países en saludar la creación de la CELAC enviando una carta de felicitaciones mientras se constituía el organismo. “Llegará el día en que empecemos a hacer acuerdos. Por ejemplo: La CELAC con China, y con muchos otros países del mundo y regiones”, expresó en ese momento el presidente venezolano Hugo Chávez.
En el marco de la crisis económica mundial que está haciendo estragos en Europa -empezando por sus eslabones más débiles- los países llamados periféricos vienen dando pasos importantes en blindarse económicamente de forma interna y en interacción con otras economías emergentes.
La alianza de la CELAC con dos de las economías más dinámicas del planeta, tienen un importancia estratégica. Pero también en materia política aporta un ingrediente nada menor, al apuntalar la tan mentada construcción de un mundo pluripolar que de al traste con la unipolaridad ejercida por el amo del norte.