Por Pedro Perucca. En la cartelera porteña hay dos obras del maestro Mauricio Kartun: Chau, Misterix y El partener. Una oportunidad única para visitar el universo popular, tierno y doloroso del autor.
Mauricio Kartun, dramaturgo, director y maestro de dramaturgia (de sus talleres salieron figuras de la talla de Daniel Veronese, Federico León o Rafael Spregelburd), es sin dudas uno de los más importantes referentes del teatro argentino. De entre sus más de 25 obras originales y adaptaciones, además de las dos obras que vamos a reseñar brevemente, se pueden destacar, La casita de los viejos, Cumbia morena cumbia, Pericones, Sacco y Vanzetti. Dramaturgia sumaria de los documentos sobre el caso, Rápido nocturno, aire de foxtrot, El niño argentino, La Madonnita o la recientemente multipremiada Salomé de chacra.
En este largo recorrido como escritor, director y docente Kartun se ha mantenido siempre fiel a algunas premisas. En algún reportaje confesaba: “Como en todo lo creador: la única manera de laburar en esto es ser absolutamente fiel a todo lo que a uno lo conmueve o lo divierte. Y a lo que te apasiona”. En su caso, estas pasiones han pasado por diversas etapas, aunque siempre vinculadas a lo popular, a un rescate poético de situaciones, personajes y objetos tradicionalmente ignorados, si no despreciados, por la “alta cultura” patria. Así, en sus obras se pueden entremezclar sin prejuicios Roland Barthes y Atahualpa Yupanqui, Lacan y Los tres chiflados, Sófocles y Pepitito Marrone (dicho sea de paso, sorprendentemente descubro que este 27 de junio en que escribo se cumple otro aniversario de su fallecimiento). Y siempre con un humor omnipresente que suele preparar el terreno para esas lucidas cuchilladas que diseccionan los innombrables del “ser nacional” argentino.
Aunque ya no encuadra su trabajo dentro de aquello que llamó “dramaturgia de urgencia” (en los primeros años 70, antes de la dictadura, donde buscaba responder con “rapidez periodística” a las problemáticas políticas y sociales del momento) sus obras, incluso las más íntimas o menos “políticas”, nunca dejaron de hablar de la realidad social desde una mirada popular. Es que entrar en la lógica teatral de Kartun puede permitirnos mirar y comprender mejor este dichoso país en el que nos ha sido dado crecer. En un autoreportaje publicado hace algunos años en La Nación, explica: “El teatro te deja entrar empujado por vanidades, pero una vez en su organismo te vuelve órgano. Te metaboliza. Es como los genes, nuestros verdaderos patrones. El teatro te incorpora a su metafísica por razones menores, y una vez que te pone a teatrar es muy difícil que te suelte. Te agrega a su ritual de siglos y en cambio de entenderlo mirándolo desde la realidad, empezás a entender la realidad mirándola desde el teatro”.
Esta permanente vocación por lo popular afortunadamente ha encontrado también una signficativa respuesta en términos de popularidad. Diferentes versiones de sus obras han sido y son representadas constantemente en distintos escenarios del país y del mundo. En este momento, en Buenos Aires hay dos en cartel: Chau, Misterix (1980) y El partener (1988).
No había visto ninguna de las dos y, por suerte, puede verlas en ese orden, que además de ser su orden cronológico de producción también es, de alguna manera, el orden vital que les corresponde. Ambas se refieren a momentos de pasaje, de crecimiento, de fin de lo viejo y principio de lo nuevo, por lo tanto también de miedos, dolores, pérdidas y, con suerte, también algo de esperanza y de autoconocimiento.
Chau, Misterix
Chau, Misterix, la obra más representada de Kartun, prácticamente no ha pasado temporada teatral en la que no estuviera sobre algún escenario argentino o del mundo. De ella dice su autor: “Fue el resultado de mi primer contacto con el taller de Ricardo Monti. Yo venía de años de práctica de una dramaturgia explícitamente política, más rigidona, y la consigna de buscar en un imaginario personal me resultaba perturbadora. Creía tanto en las ideas por entonces que el mundo de las imágenes me parecía medio mantequita. Después apareció el barrio, el club, la infancia. El paraíso perdido, bah. Y me atrapó. ¿Quién se quiere ir del paraíso?”.
El eje articulador de la pieza es el personaje de Rubén Petric, un niño fantasioso y amante de las historietas de superhéroes pero torpe para los deportes (porque es “débil de los bronquios”) y habitual blanco de las burlas de sus coetáneos, que espera el baile de carnaval del club del barrio para estrenar pantalones largos (símbolo de abandono de la niñez en aquellos años 50 en los que se ambienta la obra) y conquistar a Miriam, la chica linda de quien gusta tímidamente.
La puesta sencilla e íntima de Laura Conde (surgida del Taller de puesta en escena dictado por Rubén Szuchmacher y Graciela Schuster) y las cálidas e infantiles actuaciones de los 4 actores en escena (Florencia Cavanna, Luciano Menéndez, Magdalena Pardo y Juan Ignacio Quaglia) permiten que se opere la magia de dejar de ver a adultos en el escenario para comenzar a ver a un grupo de chicos de diez años que, jugando, empiezan a lidiar con los dolorosos problemas del amor, del sexo, de los celos, de la vergüenza y de la derrota. Es decir, con el inexorable fin de la infancia.
El partener
La obra transcurre en una pieza de pensión pobre, en Campana, donde ha recalado Pachequito, recitador criollo en decadencia, artista borrachín y padre abandónico, que ha dejado a su hijo en el hospital de otra ciudad con una pierna quebrada. Hasta allí va a buscarlo y a confrontarlo su vástago, Nico, 16 años, zapateador criollo y partener, apenas puede volver a caminar. Por supuesto, también habrá alguna mujer para complejizar la trama.
Dice Kartun: “En pocas obras me he visto tan en exposición como en ésta. El partener está hecho de cosas que me conmueven hasta el alma. Las profesoras de folclore. Las peñas semanales. Un padre y un hijo varón, solos. Los artistas de cantina. Algunos pueblos de Buenos Aires. (…) De eso está hecho El partener. De esos retazos. De esos jirones del imaginario. De mis discos de pasta, y la ropa vieja que me gusta usar hasta los flecos. Las fotos blanco y negro y los álbumes de canciones. Del murmullo tristón de la radio portátil en la madrugada. De esas imágenes -irremediablemente melancólicas-, con las que fantaseamos los artistas retener alguna vez el pasado”.
La puesta, dirigida por Manuel Vicente (quien tiene una larga relación con Mauricio Kartún, bajo cuya dirección actuó en La madonnita y en la reciente Salomé de chacra) permite que se luzcan el complejo padre, querible y odiable, encarnado por Palomino en un papel que parece hecho a su medida, la mujer en discordia (una muy expresiva Ana Yovino) y el intensísimo hijo a cargo de Rodrigo Álvarez. ¿Puede esperar algo Nico de ese tipo al que ha seguido hasta el fin del mundo para mendigar unas migajas de amor paternal? ¿O tendrá que crecer, a los golpes, dolorosamente, como suele suceder, y afrontar en solitario los desafíos de la vida adulta, usando lo mejor que pueda las herramientas de las que ha podido proveerse como partener del entrañable Pachequito?
Crecer, hacerse hombre, nunca es fácil. Pero hacerlo relacionándose como propuestas tan lúcidas y amorosas como las de Kartun, seguramente lo hará, si no más sencillo, al menos más interesante y, con algo de suerte, menos doloroso.
Chau, Misterix – Ficha técnico artística
Autoría: Mauricio Kartun
Actúan: Florencia Cavanna, Luciano Menéndez, Magdalena Pardo, Juan Ignacio Quaglia
Voz en Off: Federico Brú, Florencia Cavanna, Laura Conde, Rocío Panozzo, Magdalena Pardo, Javier Torres, Matias Villard
Diseño de vestuario: Federico Brú
Diseño de luces: Juan Garcia Dorato
Diseño sonoro: Daniela Garcia Dorato
Realización de vestuario: Lucio Giagnorio, Valeria Glotzer
Fotografía: Gonzalo Benítez
Diseño gráfico: Juan Pedro Fernandez Argento
Asistencia de dirección: Daniela Garcia Dorato
Prensa: Debora Lachter
Producción: Compañía Grullas De Barro, Willy Poch
Diseño de movimientos: Milbia Tagliavini
Coreografía: Milbia Tagliavini
Coordinación general: Graciela Schuster, Rubén Szuchmacher
Dirección: Laura Conde
ELKAFKA ESPACIO TEATRAL
Lambaré 866 – Capital Federal
Teléfonos: 4862-5439
Web: http://elkafkaespacioteatral.blogspot.com
Entrada: $ 70,00 / $ 50,00 – Sábado – 21:00 hs – Hasta el 29/06/2013
Entrada: $ 70,00 / $ 50,00 – Sábado – 20:30 hs – Desde el 06/07/2013
El Partener – Ficha técnico artística
Autoría: Mauricio Kartun
Actúan: Rodrigo Álvarez, Juan Palomino, Ana Yovino
Vestuario: Mariana Tirantte
Escenografía: Mariana Tirantte
Diseño de luces: Gonzalo Córdova
Diseño sonoro: Araceli Matus
Asistencia de dirección: Yael Ken
Prensa: Duche&zarate
Producción: Cristina Fridman
Coreografía: Mara Linari
Dirección: Manuel Vicente
TEATRO DEL PUEBLO
Av Roque Sáenz Peña 943 – Capital Federal
Teléfonos: 4326-3606
Web: http://www.teatrodelpueblo.org.ar
Entrada: $ 80,00 / $ 50,00 – Viernes – 21:00 hs
Entrada: $ 80,00 / $ 50,00 – Sábado – 22:30 hs