Por Nicolás De la Barrera
Los trabajadores de la empresa avícola Cresta Roja alcanzaron un acuerdo que revirtió los despidos y el lock out luego de una semana de conflicto. En entrevista radial con el programa La Revancha, Darío Sánchez reconstruyó el acuerdo alcanzado, la evolución del conflicto y las persecuciones que sufrieron.
Es uno de los sectores que estuvo a la sombra de la producción vacuna. Sin embargo, emparejó su producción incrementando el consumo del mercado interno y las exportaciones, la industria avícola se convirtió así en un sector pujante. Pero la crisis de los últimos años dejó al descubierto los contextos adversos que atravesaron las economías regionales. El caso de Cresta Roja, fue testimonio de una época donde primó la tendencia de la caída de los precios de los alimentos a nivel global.
Para Darío Sánchez, uno de los voceros de los trabajadores, fue posible destrabar el conflicto que finalizó tras la firma de un acta acuerdo con la empresa Raic S.A., elaboradora de los productos Cresta Roja, ya que “se logró que se escuchen realmente los reclamos”.
Luego del despido de 600 trabajadores y la amenaza por parte de la empresa de cerrar sus instalaciones e irse del país, la homologación del acuerdo en el Ministerio de Trabajo bonaerense el lunes 27, permitió la reincorporación de los puestos de trabajo. La resolución incluyó además el pago de las quincenas adeudadas así como del aguinaldo.
Según Sánchez, el acuerdo llegó luego de varias medidas de fuerza y de numerosos casos de hostigamiento contra los trabajadores. “La patronal fue tomando represalias, iniciando una persecución importante contra todos los compañeros más activistas”.
La empresa que ocupa el segundo lugar como productora de alimentos avícolas en el país, detrás de Granja Tres Arroyos, intentó amedrentarlos con denuncias policiales y el envío de cartas documento a los trabajadores que publicaban en sus perfiles de Facebook diversos comentarios sobre el conflicto. La disputa había comenzado en el mes de junio, luego de que los trabajadores de la firma avícola protestaron por el pago en cuotas de sus sueldos.
Cuando llegó la fecha del nuevo cobro, la empresa hizo un descuento arbitrario en sus haberes. “Protestamos de nuevo y la empresa nos presentó un lock out patronal. Nos cerró las puertas y nos dejó a todos los compañeros afuera”, explicó el trabajador.
Tras esa primera manifestación, Cresta Roja envió 370 telegramas de despido que fueron frenados por la implementación de una conciliación obligatoria. Sin embargo y a dos días de vencerse el plazo de las negociaciones, la empresa redobló la apuesta y mandó aproximadamente otras 300 notificaciones de despido más, explicó Sánchez.
A partir de ese momento, se sucedieron las medidas de fuerza de los trabajadores, que incluyeron el bloqueo de las dos plantas de la avícola y el corte de la autopista Ezeiza – Cañuelas y de las vías del ferrocarril Roca.
Finalmente y luego de que la empresa recibió un subsidio de 100 millones de pesos otorgado por el Gobierno bonaerense, llegó la firma del acta entre los empresarios y los trabajadores.
Sánchez destacó que tras varias movilizaciones lograron ser atendidos por el intendente de Ezeiza, Gastón Granados, y pudieron firmar el acta, que fue ratificada este lunes en la cartera de Trabajo de la provincia de Buenos Aires.