Hoy, en Chile, se vive una elección histórica en la que se decidirá quién dirigirá las riendas del país durante los próximos cuatro años. Ello también incluye acompañar el proceso Constituyente impulsado por el pueblo. Para profundizar, hablamos con colegas de la Red de Periodistas Feministas desde las distintas regiones de Chile.
Por Carla Perelló, Laura Salomé Canteros, Mel Yaleva y Camila Parodi / Foto: @dezetag
Mientras avanza la votación en Chile el pueblo se mueve, va a votar, se atesta en las filas de bajo del sol que arde. Arde como ardieron las calles durante el estallido social de octubre de 2019, que sintetizó las demandas maceradas durante 30 años. Alzó su voz y exigió más justicia social para una vida digna. En ese contexto, se libró la disputa por quién ocupará el lugar en la Casa de La Moneda: los medios hegemónicos han mostrado una polarización.
Hoy, según informan periodistas de la Red de Feministas de Chile, durante todo el proceso de elecciones los grandes conglomerados de medios mostraron una polarización del pueblo chileno, Fabiola Gutiérrez, periodista feminista, afirmó que “hoy Chile está viviendo una jornada histórica para elegir al próximo presidente” y nos relata lo que se vivía en las calles: “En Santiago se han visto largas filas, lo que vaticina una alta participación, aunque esto solo se podrá ver al final de la jornada electoral”. Y agregó: “No es la única elección, también se juega la renovación del Parlamento: 155 diputadxs serán electxs por 4 años y el Senado se renueva en parte, 27 senadorxs serán elegidxs por 8 años”. ¿Qué se juega en los territorios’ Para la periodista, está en juego “cómo avanzamos en fortalecer la democracia, no retroceder en derechos y validar el proceso constituyente que se ha querido boicotear por la derecha del país”. Afirma que las elecciones son importantes para conformar un “Parlamento que acompañe la Convención Constituyente”. En relación a los feminismos, Gutiérrez afirmó que la candidatura de Gabriel Boric representa “el componente más fuerte de la agenda feminista, por eso se ve bastante esperanza”. No obstante, dice que “no van a ser de fácil gobernanza los próximos cuatro años ya que sigue instalada la demanda ciudadana por más y mejores derechos sociales”.
Cristina Añasco Inostroza, desde Osorno, sur de Chile, décima región de Los Lagos afirma que “hemos podido observar una gran cantidad de votación, quizá mayor a la del plebiscito del 2020, una gran cantidad de voto joven participando de este proceso”. Afirma que “es una alegría que el clima haya acompañado” y destacó que las personas habilitadas fueron a votar a pesar de “la poca información de las candidaturas no sólo de las presidenciales, sino de consejeros regionales, diputados y senadores”. “Para las feministas no da lo mismo quién gobierne”, retomó Gutiérrez. Las elecciones en Chile esperan el escrutinio. Son elecciones espantadas y ojalá también sean esperanzadoras.
Nathalie González nos habla desde el norte del país, la región de Atacama, desde allí sostuvo: “Lo más probable es que hoy no sepamos quién llegará a la presidencia, solo sabremos quiénes pasarán a la segunda vuelta presidencial. Pero si vamos a saber cómo queda conformado el Congreso y esto es muy relevante también frente al gran desafío de la nueva Constitución.”
Para González tampoco da lo mismo quién gobierne y se trata de una elección histórica: “Como feministas por supuesto queremos que quienes sean electos y electas tengan un enfoque feminista que estén a la altura de las discusiones y decisiones fundamentales, que estamos dando. Que lleguen más feministas a la toma de decisión y de poder porque sabemos que no siempre las mujeres avanzamos en derechos. Sabemos que los avances están directamente relacionados con quién gobierna.”
En esa misma línea, para la periodista González, tampoco es posible pensar el proceso electoral disociado del constituyente: “Se requiere que estén en sintonía con las transformaciones que se debaten en la Constituyente acá, por ejemplo, en el llamado norte minero, tenemos temas tan importantes como el extractivismo minero, la escasez hídrica, la contaminación las zonas de sacrificio y muchos otros temas que tenemos que debatir”