¿Qué pasa con las mujeres que no acceden a los abortos que son legales hace 100 años? Tres historias por las que urge la despenalización y legalización.
Derecho a Decidir
Por Alba Rueda, Jésica Farías y Luciana Mignoli (*) / Foto: Analía Cid. Nosotras, activistas y comunicadoras feministas, estamos hartas…
Aborto legal ya, la mirada del Espacio de Mujeres del Frente Popular Darío Santillán
Por Colombia Informa En Colombia solo existen tres casos legales para abortar: cuando el embarazo constituye un peligro para la…
Se presenta por séptima vez el Proyecto de Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE)
Una exigencia sin fronteras
La justicia de Chubut absolvió a la médica de El Maitén que garantizó el derecho de aborto legal consentido de una joven en el año 2015. Sin embargo, en el mismo fallo condenó a la misma como responsable del delito de “lesiones culposas”. Una vez más, la justicia machista criminaliza y señala a aquellas que acompañan las decisiones de las mujeres.
En el día de ayer, el juez José Colabelli absolvió a la médica generalista del “delito de aborto consentido seguido de muerte”. Se trata de una causa llena de irregularidades donde sólo se acusa por la muerte de una joven de 17 años a la médica que garantizó el derecho al aborto legal solicitado por parte de la misma una semana antes de su fallecimiento, sin embargo no se investiga a los más de veinte profesionales de la salud que intervinieron en la situación de la joven durante la semana siguiente a la práctica del aborto legal.
Finaliza hoy el juicio contra la médica generalista de El Maitén, Chubut, quien en el año 2015 garantizó la interrupción legal del embarazo solicitado por una joven de 17 años quien -por causas que no han sido investigadas- murió una semana más tarde en el Hospital Zonal de Esquel.
Comienzó el juicio contra la médica procesada por garantizar el derecho al aborto de una joven que falleció en Chubut
Luego de tres años de criminalización, “Belén”, la joven tucumana que había sido condenada tras un aborto espontáneo fue absuelta por la Corte Suprema de Justicia de Tucumán gracias a la lucha del movimiento feminista que no la olvidó y visibilizó en su historia la necesidad de que no haya más muertas ni presas por ser mujeres, jóvenes y pobres.