Por Vivian Palmbaum*
En el club Boca Juniors la continuidad de las políticas de gerenciamiento va recortando las disciplinas deportivas en función de la rentabilidad y del impulso de políticas cercanas a la multiplicación de los negocios y ajenos a los intereses populares.
El jueves 7 de enero pasado se jugaba el primer partido del equipo de Boca en la Liga Nacional de Básquet. Esta disciplina parece estar amenazada en su continuidad por la decisión de sus actuales dirigentes, que ya eliminaron el voley masculino y femenino y el fútsal femenino.
El colectivo de hinchas del club “Boca es Pueblo” hizo nuevamente un llamado a la comunidad de hinchas. En esta oportunidad se trató de una nueva convocatoria en defensa del club y de las disciplinas deportivas por fuera del fútbol. Para dar presencia, fue para los socios activos y adherentes, porque pasaban gratis hasta con un invitado.
En octubre de 2015 presentó su plataforma política la organización Boca es Pueblo, a sabiendas de estar marginados de la participación en la contienda electoral que designa a las dirigencias. Este conjunto de hinchas, que va creciendo, viene luchando por disputarle la hegemonía a las actuales dirigencias elitistas que han reservado el espacio deportivo como un coto de caza de los grandes negocios del fútbol, al mismo tiempo que se obstaculizan las demás disciplinas deportivas federadas. Este colectivo viene señalando que los dirigentes desconocen la función social de un club centenario con gran arraigo e identidad territorial, ya que ha expulsado a los sectores populares negándoles el ingreso y atesorando el espacio social para los sectores pudientes. No olvidemos que Daniel Angelici procede del riñón el partido de Mauricio Macri, quien lo ungió como dirigente y con el que mantiene estrechos vínculos. Recordamos que durante la gestión de Macri al frente de la institución deportiva se favoreció la reforma del estatuto social, única en su tipo, que reserva la dirigencia a una clase que deba presentar avales por 14 millones de pesos para presentarse a elecciones, es decir, exclusivamente para una clase adinerada.
El actual presidente del club xeneise impulsa la construcción de un mega proyecto para levantar un estadio shopping en los terrenos de Casa Amarilla y abandonar el emblema más representativo para los hinchas: la Bombonera, de alto valor simbólico.
En una charla con integrantes de la organización Boca es Pueblo nos contaron sobre la situación actual y perspectivas del club.
¿Que consecuencias tiene sobre Boca Juniors la continuidad de la gestión de un gerenciador como Angelici, que acaba de ser reelegido?
La primera consecuencia es la profundización de las políticas elitistas de los últimos 20 años que reservaron el club para una casta de adinerados dejando fuera a los sectores populares. En este momento para nosotros el principal y más perjudicial peligro es la construcción de un estadio shopping y el abandono de la Bombonera, lo que significaría la eliminación definitiva de la clase trabajadora de la cancha de Boca, con todo lo que eso significa para un club popular. Al mismo tiempo se contraería una deuda impagable cuyo objetivo es llevar al club a la bancarrota para cumplir el gran anhelo de Mauricio Macri: constituir una una Sociedad Anónima.
Hicieron pública una convocatoria a acompañar al plantel y cuerpo técnico en lo que es el primer partido de la Liga Nacional. ¿Por qué creen que puede ser el último semestre que se juegue la Liga Nacional de Básquet?
Entre la gente se fue generando esta necesidad y por eso nos sumamos. La semana pasada bajaron de la Liga Nacional al equipo de voley femenino, campeón en 4 de las últimas 5 ediciones. A esto se suma la eliminación del equipo de voley masculino, a mediados de 2015, junto con el futsal femenino. Con la destrucción de estos equipos nos dimos cuenta de que la disciplina que corre peligro próximamente es el básquet. Durante los últimos años, el presupuesto destinado a ese deporte no aumentó, lo que representó que en la práctica fuera decayendo la calidad de los planteles por falta de recursos. Se dieron de baja los contratos de dos deportistas extranjeros y se adeudan tres meses de sueldo, que no tienen razón alguna para no haber sido pagados. Todos estos indicadores nos dieron la pauta de que este puede ser el último semestre en La Liga.
¿Por qué no tienen difusión las disciplinas deportivas dentro del club? ¿Tiene alguna relación con la falta de rentabilidad?
Las disciplinas deportivas extra futbolísticas no tienen difusión por el solo hecho de no ser rentables. A esta dirigencia no le interesa difundir aquello a lo que no puede darle provecho económico. Estas prácticas deportivas no tienen tanto marketing y por tanto no fortalecen la imagen institucional que a ellos les interesa. Así, no se promueve su desarrollo y porque además está reservada solo para socios, lo que en este momento resulta inaccesible a los sectores populares y del barrio, porque el requisito excluyente es ser poseedor de una tarjeta de crédito.
Solventar estas disciplinas no resultaría un gran esfuerzo económico para el club, pero las prioridades tal como lo expresara Macri son: “disciplina que no se autosustenta se cierra”.
¿Qué relación tienen las políticas de la Ciudad con Boca?
El PRO de Ciudad y el PRO de Boca trabajan con intereses conjuntos. Un ejemplo de ello es la promoción de una ley que prohíbe que la gente esté parada durante los partidos de fútbol, algo que es inviable para el 99% de los clubes. Esta ley fue impulsada por Oscar Moscariello, ex vice de Boca y legislador del PRO, y su intencionalidad, con el apoyo de su difusión mediática, tiende a crear la necesidad de construir un estadio de mayor capacidad.
Cuando estaba finalizando nuestra conversación los integrantes de Boca es Pueblo nos respondieron sobre la privatización del espacio de Casa Amarilla y dijeron que: “les parece una aberración de parte de los funcionarios públicos de la Ciudad. Porque priorizan los negociados de las constructoras por sobre las reales necesidades de los vecinos de la Boca como son la vivienda y el espacio verde totalmente precarizadas y limitados. Como hinchas de Boca tampoco estamos de acuerdo con el estadio shopping, tal como lo vinimos diciendo”.
Sentenciaron: “Estamos convencidos que la Bombonera no queda chica, sino que la achicaron las dirigencias de los últimos 20 años y que se puede ampliar tirando los palcos y adquiriendo las dos medias manzanas detrás”.
El próximo 19 de enero caerá el martillo, la Corporación Buenos Aires Sur adjudicará la licitación de los terrenos de Casa Amarilla, ubicados en La Boca. Este acto implica la privatización de tierras públicas favoreciendo al club Boca Juniors, que fue la plataforma desde donde saltaron a la política el actual presidente de la Nación y muchos de sus gerenciadores. Sobre estos terrenos está proyectado levantar el estadio shopping de Boca. Los hinchas junto a los vecinos, organizaciones de La Boca presentarán el próximo lunes 18 (de enero) un Recurso de Amparo ante la justicia para frenar el despojo que favorece los negocios del macrismo.
Una vez más podemos ver que se profundizan las políticas excluyentes y exclusivas que se respiran en un club, que se aleja de su larga tradición popular, y que se han extendido a las políticas nacionales. Hoy quiere volver a imponerse que solo tiene valor lo que tiene un equivalente en rentabilidad económica. Sin embargo la iniciativa colectiva y organizada encuentra alternativas de lucha para enfrentarse a las políticas públicas que inevitablemente llevan la marca del fracaso para los sectores populares.
*Parte de la O.S.y P. Los Pibes