Los trabajadores del programa “Buenos Aires Presente” se encuentran en estado de movilización a raíz de la intención del gobierno porteño de desarticularlo y avanzar contra la organización sindical.
El programa “Buenos Aires Presente” (BAP) funciona con un equipo multidisciplinario que nuclea a trabajadores sociales, sociólogos e historiadores, entre otros, como un programa de emergencia destinado a personas en situación de calle. La delegada general de los trabajadores del programa, Julieta Minervini explicó el intento del Gobierno de la Ciudad: “quieren trasladar a 6 compañeros a otros programas sin saber bien a qué programas van a ir, de los cuales 5 somos afiliados de ATE, lo que nos hace entender que esto es persecución política, ya que justo el 21 de diciembre se conformó la junta interna y el mismo día llegó la impugnación, que es el mecanismo que está implementando el macrismo en la Ciudad”
Las tareas de los trabajadores del BAP consisten en acercarse en móviles del Ministerio de Desarrollo Social a las distintas personas en situación de calle y ofrecerles distintos recursos de contención social, de prevención en materia de salud, etc. Según denunció Minervini, “también hay un vaciamiento del programa porque se están subejecutando los recursos, por ejemplo de las 45 camionetas que tiene el programa, sólo 10 funcionan”.
A su vez, también repudió la persecución gremial y el “apriete” por parte de “una patota de gente del gremio SUTECBA”, que hace un mes y medio entró a la base operativa del programa Buenos Aires Presente (BAP), en el Hogar Hospital Rawson, dependencia perteneciente al Ministerio de Desarrollo Social que conduce la funcionaria Carolina Stanley, con armas de fuego y preguntando quienes eran los delegados de ATE.
La mayoría de los trabajadores del programa Buenos Aires Presente (BAP) cobran sus salarios en negro. El salario del mes de noviembre fue de $2.865, quedando por debajo de la canasta básica. Entre los reclamos que hacen respecto de la situación laboral en general, exigen además del aumento salarial, el pase a planta permanente y el reconocimiento de las tareas para el reencasillamiento, para cumplir con el derecho a la Carrera en la administración pública. Recientemente consiguieron la reincorporación de cuatro de ellos que habían sido despedidos, en un proceso de lucha que también dio como fruto la elección por primera vez de una Junta Interna gremial del programa.
Agostina Giameo, también delegada, afirmó que su lucha es por defender “no sólo nuestra fuente de trabajo sino también una política pública que llega a los sectores más necesitados”.
Ayer se realizó una asamblea, en las calles Amancio Alcorta y Ramón Carrillo, en la puerta del Rawson, donde los trabajadores decidieron realizar hoy a las 12 una radio abierta frente al edificio de la subsecretaría de Desarrollo social de la Ciudad de Buenos Aires para denunciar esta situación y “exigir una respuesta al gobierno de Mauricio Macri”.