Por Lilí Agudo/ Ilustración por Julia Garibaldi Tobias
Jaque al rey.
El rey ha huido.
Jaque a la reina.
Se escondió en el castillo.
Jaque al caballo.
Se murió de hambre.
Jaque a la torre.
Está derruida.
Jaque al alfil.
Se arrojó al abismo.
Jaque a los peones.
Son todos esclavos.
¿de qué nos sirvieron las reglas
si terminaron con los jugadores?
Hay que buscar a la reina
y al alfil,
liberar a los peones.
Reconstruir el reino.
Levantar casas
en vez de torres
y que las reglas
las ponga el pueblo.
¿Acaso es justo que el peón avance
de a un casillero
mientras la reina se mueve
en todas las direcciones?
Cuna de oro
o pesebre de paja
se marca tu destino
con el nombre de tu casa.
Que el que haga
tenga.
Y el que robe
pague.
En este juego
no se regalan vidas
tampoco se perdonan
movimientos que matan.
Y el pueblo
peón que avanza
en todas las direcciones
va en busca de los casilleros
permitidos al poder.
***
Este poema fue escrito en junio de 2015 luego de participar en la acción poética del Colectivo FinDeUnMundo en conmemoración del asesinato de Maximiliano Kosteki y Darío Santillan. Es un homenaje a estos jóvenes que representan a un pueblo cansado de ser peón de reyes.