Tensión en la relación entre Rusia y Estados Unidos a causa de la defensa antimisil instalada en territorio europeo por la Organizacióndel Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
El presidente ruso, Dmitri Medvedev, llamó al dialogo abierto para resolver las diferencias en torno a la implementación y alcance de la defensa antimisil estadounidense en el viejo continente. Alertó también sobre la toma unilateral de decisiones por parte del gobierno de Estados Unidos como la posibilidad de “crear condiciones para la confrontación y para una onerosa carrera armamentista”.
El primer mandatario ruso, quien finaliza su mandato el martes próximo, aprovechó la nutrida concurrencia a la inauguración de la conferencia internacional “Factor de la defensa antimisil (DAM) en la formación de un nuevo espacio de seguridad” para señalar que “los pasos unilaterales para desplegar un sistema de defensa antimisiles, sin tomar en cuenta el contexto internacional y los derechos legítimos de otros Estados, inevitablemente suscitarán medidas de respuesta y esto afecta directamente los cimientos de la estabilidad estratégica”.
Organizado por el Ministerio de Defensa, el evento reunió en Moscú a más de 200 militares y expertos de un medio centenar de países, entre ellos, los 28 Estados miembros dela OTAN, Rusia y otros integrantes dela CEI (Comunidad de Estados Independientes) yla OTSC(Organización del Tratado de Seguridad Colectiva), así como China, Corea del Sur y Japón.
Durante el mismo, Rusia utilizó resultados de modelos computarizados para mostrar como las instalaciones de defensa antimisiles dela OTANpodrían afectar sus sistemas de seguridad y por lo tanto las fuerzas de la disuasión nuclear, incrementando las posibilidades de un conflicto.
El secretario del Consejo Nacional de Seguridad, Nikolai Patrushev, afirmó que la salida óptima era elaborar una concepción conjunta de defensa, en la cual deben participar todos los países de la región, sin excepciones, y recordó que Rusia propuso variantes como el empleo conjunto de los datos de sus estaciones de radiolocalización, propuesta que, según aclaró, no fue escuchada porla OTAN.
“Nosotros esperamos un compromiso jurídico de la alianza atlántica de que de ninguna forma dirige su escudo antimisil contra las fuerzas estratégicas rusas”, afirmó. “En caso contrario, deberemos defendernos y aplicar medidas de respuesta técnico-militares. Por ahora, el dialogo continua”, agregó.
Desde Washington afirman que el sistema de defensa que será instalado en seis fases hasta el 2020 apunta a contrarrestar una amenaza potencial de Irán. Sin embargo, desde el Kremlin afirman que este sistema que involucra interceptores de alcance corto en Polonia, Rumania y barcos de guerra en el Mediterráneo podría ser usado contra misiles rusos.
La subsecretaria de defensa de Estados Unidos para asuntos globales estratégicos, Madelyn Creedon, dijo en una conferencia de prensa telefónica que es muy importante para ellos mantener la estabilidad estratégica entre ambos países. “En general, Estados Unidos ha sido muy claro respecto a que los sistemas no están diseñados ni pretenden lidiar en forma alguna con la defensa de Rusia”, afirmó.
Por su parte, Barack Obama expresó la supuesta voluntad del gobierno estadounidense de comenzar nuevos acuerdos para reducir el arsenal nuclear que establece que deben limitarse a 1500 ojivas de ambos lados para el 2020.
Pese a estas declaraciones de la administración norteamericana el jefe del Estado Mayor ruso, Nikolai Makarov, consideró que Rusia yla OTANaún no superan el punto de inflexión en la discusión en cuanto a la defensa antimisil y que es necesario no equivocarse en la elección de la alternativa: regresar a la confrontación o establecer una cooperación mutuamente ventajosa.
Makarov admitió que el sistema DAM en Europa será capaz de interceptar hacia 2020 una parte de los misiles balísticos intercontinentales emplazados en territorio ruso o a bordo de submarinos. Ante esto, Moscú ha manifestado que sila OTANno analiza sus preocupaciones de seguridad, podría desplegar armas para superar el escudo e incluso atacar instalaciones de misiles.
“En esta situación, Rusia procurará reforzar la protección de los silos de lanzamiento, ocultar en lo posible la ubicación de misiles nucleares sobre plataforma móvil, subir el grado de alerta para el uso de estas armas y asegurar que las ojivas de misiles balísticos rusos sean capaces de burlar cualquier sistema DAM. Al mismo tiempo, propone ala OTANevaluar conjuntamente los planes del escudo antimisil en Europa a partir de una serie de criterios estrictos, como número y velocidad de interceptores, su alcance, ubicación o capacidad de interceptar diversos cohetes”, dijo Makárov
“La decisión sobre el uso preventivo de los medios de destrucción disponibles se tomaría en un periodo de deterioro de la situación y tomándose en cuenta el carácter desestabilizador del sistema DAM que genera la ilusión de un ataque impune a desarmar al adversario”, aclaró el funcionario durante su intervención en la conferencia realizada el día de hoy.
“El emplazamiento de nuevas armas ofensivas en el sur y el noroeste de Rusia (…) incluido el despliegue de sistemas de misiles Iskander en la región de Kaliningrado representan una de las posibles variantes para destruir la infraestructura de defensa antimisil en Europa”, aseguró.
Desde el Estado Mayor se destacó que la seguridad regional y global forma un todo único e indivisible y que la disuasión nuclear recíproca sigue desempeñando un papel importante en la tarea de garantizar la estabilidad y la seguridad a escala mundial.
Esta disputa que entorpece los intentos por mejorar los vínculos ruso-estadounidenses se prevé como un obstáculo para enmendar las relaciones después de que Vladimir Putin vuelva al Kremlin la semana próxima para un mandato presidencial de seis años.