En el día de ayer diversos medios uruguayos y argentinos levantaron declaraciones del canciller oriental Luis Almagro a Radio Universal sobre Malvinas. Las mismas supondrían un diferendo respecto a la política argentina hacia las islas.
En la mañana de ayer, miércoles, el canciller de la República Oriental del Uruguay, Luis Almagro, fue entrevistado en Radio Universal. Durante la entrevista se le preguntó por el posible envío de un avión con productos uruguayos a la Islas Malvinas planificado para el día 13 de abril y qué repercusiones puede haber en relación a la postura uruguaya de apoyo al reclamo de soberanía de nuestro país. Ante esta pregunta Almagro respondió que “nunca dijo que hay que hacer un bloqueo comercial a la isla” y que los empresarios de su país le venden “a quién quieren y pueden”. Además sostuvo que realizar un bloqueo sería “violatorio a los derechos humanos de los habitantes de esa isla y lo mismo que decimos para Cuba, lo decimos en este caso”.
Desde los medios conservadores, tanto de un lado como del otro del Río de la Plata, se intentó presentar estas declaraciones como una fisura en la unidad latinoamericana lograda en torno al reclamo de soberanía sobre el archipiélago. Sin embargo los hechos y la misma Cancillería uruguaya desmienten esto.
En un comunicado publicado el mismo día por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Uruguay reiteran el apoyo al reclamo argentino y advierten sobre la manipulación mediática. “Ante versiones de prensa relacionadas con declaraciones formuladas por el señor Ministro de Relaciones Exteriores, se entiende necesario precisar” comienza el comunicado. En el primer punto “se reitera la tradicional posición de Uruguay de respaldo a las reivindicaciones de soberanía argentina sobre las Islas Malvinas” para luego aclarar que “no existe bloqueo a los habitantes de las Islas Malvinas por parte de ningún país del continente”. Finalmente el comunicado concluye aclarando la comparación con el bloqueo a Cuba del que tantos medios se hicieron eco: “la oposición a cualquier bloqueo es parte integral de la Política Exterior del Uruguay, siendo un ejemplo de ello la tradicional postura con respecto al bloqueo a Cuba. En ese sentido, dicha mención al ejemplo citado constituye solamente una referencia al fundamento de la postura de nuestro país en la materia”. “En ningún caso es remotamente aceptable la comparación realizada por medios de prensa, dado que no existe ningún bloqueo a los habitantes de las Islas Malvinas, como sí existe un bloqueo violatorio del derecho internacional respecto a Cuba”, remata de forma contundente.
¿Y cuál es el negocio entre Uruguay y las Islas Malvinas?
El diario británico The Sun publicó en estos días que las “bloqueadas Falklands (Malvinas) son ayudadas… por Uruguay”. En esta nota se sostiene que empresarios uruguayos estarían dispuestos a vender sus productos en las islas ayudando a superar el “bloqueo” impuesto por Argentina.
Entrevistado por el diario El País de Uruguay Guillermo Wild, vicepresidente de la Cámara de Comercio Uruguayo-Británica, declaró que “hay medios de transporte confirmados para proveer a las Islas Malvinas en el caso que sea necesario”. Y agregó que “hay muchas compañías que están interesadas en hacer distintos tipos de transporte de carga (a las Islas), tanto marítimo como aéreo”. Sin embargo, acto seguido aclaró que “el gobierno no participa” en estas tratativas. El presidente de la misma entidad comercial, Conrado Hughes, ratificó esto en declaraciones al diario argentino La Nación al afirmar que “la operación anunciada para el 13 de abril no tiene apoyo alguno del gobierno”.
Finalmente, en la misma entrevista mencionada más arriba, Wild sostiene que por ahora el avión “está vacío”. Está disponible pero “si no hay interesados, no se hace el vuelo”. De esta forma se puede ver como de un supuesto negocio (no confirmado aun) entre empresarios uruguayos privados y el gobierno británico de las Malvinas se intentó crear un entredicho diplomático.
Si bien no se puede descartar que empresarios uruguayos aprovechen la tensión entre Argentina y Gran Bretaña para hacer negocios en las islas, el accionar de ciertos medios de comunicación ante esta noticia es, de mínima, cuestionable. Nuevamente se observa en nuestro continente el peso que pueden llegar a tener las grandes empresas mediáticas y cuál es su posición respecto a determinados conflictos.
El gobierno uruguayo tuvo que salir a desmentir rápidamente la operación que se montó. De esta forma sigue sosteniendo públicamente la unidad sudamericana en el reclamo de soberanía sobre las islas que tanto molesta a ciertos sectores de uno y otro lado del Río de la Plata.