El ex embajador de Colombia en México y actual integrante de la Coordinación Nacional del Pacto Histórico, Moisés Ninco Daza, estuvo en Buenos Aires como veedor y en misión de solidaridad con Cristina Fernández de Kirchner debido a la causa de lawfare en la que se la condenó a prisión y proscripción. Después de la masiva movilización en repudio al fallo de la Corte Suprema y en respaldo a la ex presidenta, Moisés Daza dialogó con Marcha sobre la sanción de la Ley de la Reforma Laboral, la violencia política y una alianza de unidad de cara a las próximas elecciones que auguran a la senadora María José Pizarro como precandidata a la presidencia de Colombia.
Por Maru Waldhüter
Después de casi dos años el Congreso aprobó la ley para la Reforma Laboral ¿Por qué fue tan extenso el proceso y con tantos obstáculos?
El establishment político en el marco del trámite demostró la capacidad que tienen para romper los mismos pactos institucionales que se han construido, incluso por ellos mismos. En la discusión en la Cámara de Representantes se aprobó un articulado muy cercano a la propuesta de la Reforma Laboral del gobierno. Hubo un proceso de concertación muy importante, no solamente triestamentario como se plantea tradicionalmente por parte de la OIT, es decir, trabajadores, empresa y Estado, sino en general con diferentes actores nacionales e internacionales. Esta discusión de la concertación de la Cámara de Representantes fue completamente transgredida por la comisión séptima del Senado y ocho congresistas de la oposición que decidieron romper con todo lo que se había avanzado en la Cámara. Esto generó una ola de indignación nacional porque se vió como esos ocho senadores pasaron por encima a la Cámara de Representantes, pero además al voto popular, que fue el mandato que dictó la necesidad de una Reforma Laboral.
A partir de eso, el presidente convocó a un proceso de movilización social en el que planteó que si el Congreso de la República cerraba la discusión de forma subrepticia y a espaldas del pueblo, la decisión la iba a tomar el pueblo a través de una consulta popular. Esto es importante destacar porque determinó la organización de la discusión política en Colombia. Este llamado a una consulta popular generó un enorme nerviosismo en el establishment, un nerviosismo peligroso que, incluso sentimos, tuvo que ver con el atentado al senador Miguel Uribe Turbay. Así comienza un proceso desde el presidente del senado Efraín Cepeda y los medios de comunicación que, se fungen hoy como la vanguardia política cada vez que los partidos políticos de la derecha se muestran ineptos e ineficientes para hacer su propia política, y empiezan con una narrativa de surgimiento de autoritarismo en Colombia, una democracia plebiscitaria que se reemplazan los mecanismos institucionales concebidos a partir del Congreso.
Es importante destacar la posición mayoritaria del pueblo colombiano que en los medios, en redes sociales y en las calles se expresó de manera masiva a favor de la Reforma Laboral. Solo a partir de la movilización social del poder popular, porque Petro es un estratega y un conductor, pero fue el pueblo colombiano y su movilización la que generó que se diera la Reforma Laboral y fuera aprobada finalmente en el Senado.
¿Qué modificaciones trae la Reforma al mundo del trabajo?
El pago de horas extras, recargos dominicales y festivos. Se proyecta que a partir de julio de este año la remuneración adicional sobre la hora ordinaria sea del 80%, en 2026 del 90% y llegar a julio de 2027 con el 100%. La regulación del trabajo en plataformas digitales de reparto incluye además, la cobertura de pago de seguridad social integral a cargo de la empresa. Los contratos de aprendiz del Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA) se reconocerán como contratos laborales, porque existía el contrato pero no la perspectiva laboral y era una precarización importante en ese sentido y la juventud popular accede muchas veces más al SENA que a la educación superior. Se formalizará ell trabajo del campo, de periodistas, artistas y madres comunitarias. Y en materia de licencias, se contempla la ampliación del permiso de paternidad y la licencia para personas menstruantes, así como también un auxilio de conectividad para teletrabajo que cubra los costos de internet y electricidad. Estos son algunos de los puntos que se buscan mejorar a partir de la Reforma Laboral.
Por estos días también nos enteramos que el proyecto de La ley integral Trans pasó con éxito el primer debate en la Cámara de Representantes ¿Como sigue y qué podemos esperar?
Hay que decir que en la relación de fuerzas del Congreso la Cámara de Representantes no solo es generacionalmente más joven sino que, tiende a haber una orientación un poco más progresista mientras que, en el Senado generacionalmente son más mayores y con una orientación más conservadora. Esta relación de fuerzas impactó en la discusión de este proyecto que tuvo un primer debate exitoso pero que sabemos que en el escenario del Senado así como lo fue también para otros debates progresistas en relación al orden social de nuestro país va a enfrentarse a un fuerte oposición conservadora.
La iniciativa busca garantizar el ejercicio pleno de los derechos para las personas trans, además, incorpora un enfoque étnico-racial y antirracista que reconoce la realidad de las personas negras, afrodescendientes, raizales y palenqueras, con identidades de género diversas.
Se aproxima una intensa agenda electoral. De alguna forma lo fuiste contando pero ¿cómo caracterizas este periodo?
Por fortuna diría que hoy la agenda política nacional la está poniendo el presidente Petro. Por otra parte, vemos con enorme preocupación el atentado que hubo contra el senador Miguel Uribe porque creemos que, si bien sería apresurado decir que fue un sector partidario definido, si es un sector de clase muy claro que es la burguesía asociada a la economía ilegal, al narcotráfico. Particularmente la junta del narcotráfico que es una federación internacional de capos desde donde se dio la orden, de acuerdo a las investigaciones que ha revelado el presidente Petro del atentado. Esto fue un poco un intento desesperado de un golpe en la mesa a costa de la propia vida de algunos de los voceros políticos conservadores, particularmente Miguel Uribe, y en ese sentido es una demostración de que tuvieron que acudir a las metodologías del atentado para poder revertir una situación en la que es el gobierno popular del presidente Petro es el que está planteando la agenda nacional.
Apenas pasó el atentado se activó una operación mediática coordinada de una forma excelsa, hay que decirlo. El primer mensaje de un medio de comunicación fue de Infobae en sacar algo abiertamente falso al decir que la persona que atentó contra Miguel Uribe, supuestamente había gritado “Petro presidente”. Esto fue desmentido de manera inmediata por los mismos videos. Tal vez algún interés habría por parte del medio Infobae en propiciar esta desinformación ligado a los intereses que están detrás del atentado, hay una unidad de clase detrás de eso, pero es una muestra de la desesperación de una derecha que no logra unidad política, no logra unidad ni siquiera en torno a los mecanismos para definir sus propias candidaturas y ante lo cual, tanto Gustavo Petro como el Pacto Histórico, estamos adelantándonos en proponer la agenda nacional, sus mecanismos para desarrollarla y para tomar nuestras propias decisiones.
¿Parte de esa agenda está relacionada con la estrategia de unidad, de esta alianza de los sectores del progresismo y las izquierdas? ?¿Es un escenario novedoso este para Colombia?
Hay que decir que esta experiencia particular es novedosa porque no solamente se trató de la creación de una nueva personería jurídica, un registro electoral, sino de la fusión partidaria. Estamos hablando de que cada una de estas fuerzas que, previamente lograron su personería jurídica a través de luchas intensas, incluso de víctimas, desaparecidos, asesinatos, genocidios como el caso de la Unión Patriótica y el Partido Comunista, hoy se disponen en términos de fusionarse. No significa que desaparece ni el Partido Comunista, ni la Unión Patriótica, ni el Polo Democrático, ni Colombia Humana, ni la Minga Social y Nacional, quiere decir que hubo un entendimiento y un criterio de responsabilidad histórica con el pueblo colombiano y con el proceso del cambio a un nivel que nos permitió, incluso a pesar de lo que nos han costados las personerías jurídicas y los derechos políticos que hemos recibido, disponerlos a la fusión en el Pacto Histórico. Pongo este contexto porque quiere decir que nos ha costado mucho a cada organización poder ejercer nuestros derechos políticos y que el hecho de que logremos la fusión implica también un mensaje no solamente de unidad, sino que es algo que reitero, hemos puesto sobre la mesa en la discusión la responsabilidad histórica, porque en medio de estas discusiones políticas siempre está el pueblo.
¿En esta línea entonces es que se propone la candidatura de María José Pizarro para las próximas elecciones presidenciales?
Hay mecanismos definidos por parte del Pacto Histórico a partir de escuchar el reclamo de las bases y la orientación del presidente Petro y es que las decisiones sobre las candidaturas y las listas se tomen a partir de un mecanismo de consulta abierta a la ciudadanía, ni siquiera internas entre los partidos. El objetivo es responder a ese llamado que trae un argumento fundamental y es que si queremos candidatas y candidatos representativos en causas de agenda y de prioridades populares requieren de la votación y que la democracia equilibre la discusión. En esos términos hay que decir que la posibilidad, y esto es a título personal, de que María José Pizarro sea candidata por supuesto que tiene que ver con su clarificación política, con su criterio, con su perspectiva pero también tiene que ver con el hecho de que ella representa a amplios sectores de la población colombiana, a agendas muy diversas de la población que reclaman hoy mismo ese tipo de liderazgos y ese tipo de candidaturas como la de María José. Ella ya mencionó públicamente su intención de continuar en la carrera presidencial y nosotros creemos creemos que ella representa buena parte de las prioridades populares.
Hay otras candidaturas, está Carolina Corcho que viene del Movimiento Popular por el Derecho a la Salud; Gustavo Bolívar que fue senador de la República; Susana Muhamad que recoge luchas ambientales de diversas organizaciones a nivel nacional y la experiencia de gobierno con una gran gestión en tres niveles: con Bogotá Humana como secretaria de Ambiente, luego como ministra Nacional de Ambiente, e internacionalmente a través del esfuerzo que lideró para ejecutar la COP 16 en Cali y que se lograra que los objetivos de Colombia quedaran plasmados en la declaración. Estas son las cuatro candidaturas que se proyectan desde el Pacto Histórico y en el marco de estas definiciones hemos puesto sobre la mesa la decisión de que el 26 de octubre el Pacto Histórico va a ir a consulta abierta para definir sus candidaturas a la Cámara, el Senado y a la presidencia, sino que, estamos proponiendo el 8 de marzo ir a consulta con una candidatura única del Pacto Histórico hacia unas primarias del frente amplio. Desde el Pacto Histórico estamos haciendo propuestas que de algún modo están determinando de qué manera se da la discusión política en el campo progresista en Colombia.

Mencionaste el atentado contra el senador Miguel Uribe Turbay ¿Les preocupa que se de una escalada de violencia en Colombia y el mundo?
Hay que identificar con mucha claridad la enorme coordinación que existe en la avanzada de la política de la muerte en el mundo. En ese sentido, el sionismo, el ente genocida de Israel, hace parte de la coordinación política de esas tácticas. En el caso de Colombia, la junta del narcotráfico opera en Dubai pero recoge a capos tanto de Europa como de las Américas y Asia y en estos términos hay que señalar que el asesinato de Fernando Villavicencio en Ecuador y el atentado contra Miguel Uribe Turbay en Colombia están ligados, dado que esta junta de narco cuenta con un centro de operación muy importante en Colombia y Ecuador. Hoy en día la matriz que quieren desplegar, y esto lo advierto públicamente, porque es la hipótesis que se está manejando es que desde Ecuador se desarrolló el plan del atentado de Miguel Uribe Turbay. El establishment ecuatoriano quiere culpar a Jorge Glass y al correísmo del atentado contra Fernando Villavicencio.
En estos términos, la estrategia de lawfare, la guerra jurídica que pasa por la guerra mediática, veo un recrudecimiento en el marco de este escenario y otro ejemplo claro es la proscripción y la condena a Cristina Fernández que, es precedida por un intento de asesinato. Hay que identificar de manera clara que este avance de la política de la muerte viene profundamente coordinado a partir del avance de la política de la muerte en Estados Unidos, y en la región de magreb, a partir del ente sionista de Israel. La desesperación y el nerviosismo de esas élites es peligroso ya que es una renuncia a la política institucional, a la deliberación democrática, y abraza con cada vez más fuerza estos escenarios de violencia política.
Nosotros y nosotras desde Colombia vinimos a solidarizarnos no solo simbólicamente, sino en articulación estratégica con Argentina, con el movimiento popular argentino, con la dirigente Cristina Fernández de Kirchner ya que, una de las primeras personas que habló con ella después de la decisión, inaceptable, de su proscripción vitalicia, fue el presidente Gustavo Petro. Esto responde no solo a una filiación emocional e identitaria con la izquierda latinoamericana, con el progresismo y el campo popular, sino por supuesto, a la conciencia histórica respecto a esta coordinación desde la economía ilegal del narcotráfico y de la coordinación política de los sionistas con Estados Unidos. Nuestra presencia responde a esa conciencia, a esa voluntad de articularnos estratégicamente. Estados Unidos pierde la capacidad hegemónica sobre nuestra región, Israel pierde margen de maniobra cuando Colombia rompe relaciones y empieza un embargo de armas y al carbón ya que, Colombia es uno de sus principales exportadores de carbón y en estos términos hay que decir que empezamos a trastocar las fronteras de los intereses fácticos. Con nuestra posición de política interior y política exterior estamos golpeando los grandes intereses privados transnacionales de la política de la muerte y reemplazando ese orden con una perspectiva y una política de vida. Tal como el propio Marx lo identificó en el tercer tomo de El Capital, cuando decía que el capitalismo va a acabar con las propias fuentes que lo produce que es la vida. La contradicción política hoy más que entre capital y trabajo, es entre el capital y la vida.
Foto: Ximena Astudillo Delgado