Crédito foto: Infojus
La Ciudad de Buenos Aires está marcada por un creciente conflicto sobre lo habitacional y la falta de acceso a la vivienda. La toma en Lugano, en el predio cercano a Villa 20, está pronta a cumplir tres meses. Macri y la falta de políticas para la situación.
El barrio Papa Francisco -llamado así por sus vecinos- es un terreno de unas 10 hectáreas en Villa Soldati, tomado desde el 23 de febrero pasado. Aunque existe una orden del fuero penal porteño para desocuparlo por la fuerza, su aplicación todavía se encuentra en suspenso.
La semana pasada distintos vecinos y delegados del barrio, acompañados por organizaciones sociales y referentes políticos, se presentaron en el Instituto de la Vivienda (IVC) de la Ciudad Autónoma de Buenoas Aires para dar cuenta de la problemática que atraviesan. La crisis habitacional y la falta de políticas públicas para paliar esta problemática tienen efectos sobre más de dos millones de personas en Capital Federal, que son inquilinos tanto de espacios precarios como de viviendas o departamentos.
Poni, una de las delegadas, fue la primera en hablar ante el micrófono. “Queremos tierra o vivienda digna. No queremos nada regalado. A diferencia de lo que dicen muchos en los medios sobre nosotros, nosotros queremos pagar”, manifestó.
Sobre la pared del IVC los vecinos pegaron el mapa del Proyecto Nuevo Barrio Papa Francisco y Urbanización de la Villa 20. Es una propuesta en la que trabajaron junto con arquitectos del Taller Libre del proyecto social de la FADU-UBA. Beatriz Pedro, una de las arquitectas que colaboró con esta iniciativa comentó que se vive “una batalla desigual. La arquitectura y el urbanismo deben estar al servicio de estas causas”.
Marcha y Che Barracas dialogaron con Cristian, vecino del barrio y delegado por el reclamo, sobre la propuesta que presentaron en la Legislatura y el IVC, y cómo están padeciendo a diario la crisis habitacional en el barrio.
-¿Por qué pensaron en la conferencia de prensa?
-La conferencia de prensa tuvo apoyo de legisladores, organizaciones sociales y fundaciones, y lo que reflejamos es la crisis habitacional y lo que venimos sufriendo año a año quienes no tenemos vivienda. Hace un mes presentamos un proyecto junto a arquitectos, lo tiene la jueza Liberatori, e intervinieron profesionales de la FADU. El proyecto contempla a quienes están en la misma situación de calle.
-¿Cómo piensan el reclamo?
-Venimos luchando para que el gobierno de la ciudad se junte con Nación, y que la ciudad ceda los terrenos que estableció, en el 2006, de la policía federal para que se puedan sanear y luego construir viviendas. Si el gobierno de la ciudad tiene la voluntad se puede hacer. Estamos proyectando ahí unas tres mil viviendas. Somos entre ochocientas y mil familias las que estamos en Papa Francisco. La semana pasada los medios querían mostrar que no había nadie, mostrando solo la parte contaminada entre Cruz y Pola, pero es mucho más grande que eso. Y ya vamos por el tercer mes de toma. Se trata de vivir lo mejor que se pueda, pero no estamos en una buena situación, porque estuvo lloviendo mucho, se vino mucho frío, y el gobierno de Macri no fue capaz ni siquiera de mandar un camión de sanidad. No hay intenciones de que esto prospere y se urbanice, quieren que se haga una villa más. De hecho solo hubo palabras y discursos, nada más.
-¿Y qué propone Macri?
-No hay intenciones de nada. Siempre tuvimos la voluntad de trabajar en conjunto y que se llegue a cumplir la ley que trata sobre urbanización, sobre todo en el predio Papa Francisco. Nosotros venimos día tras día tratando de que esto no quede así, pero no hay ningún tipo de respuesta.
-¿En qué consiste el proyecto que vienen trabajando?
-Al proyecto lo habíamos presentado hace un mes, de la manera que ellos quieren, cumpliendo lo requisitos, y evidentemente no hay ninguna intención. Nosotros venimos destacando, las veces que hemos podido en reuniones o en conferencias, o en reuniones como por ejemplo con la Defensoría del Pueblo o la jueza Liberatori, que queremos pagar. No queremos que nos regalen nada. Actualmente, por ejemplo, en Lugano hay gente que ha pagado 1.500 pesos de alquiler y hoy no se puede vivir. Estamos tratando de que esto se pueda lograr, y que realmente se puedan hacer las viviendas y los vecinos podamos pagarlas.