Marcha dialogó con Nora Cortiñas, Madre de Plaza de Mayo Línea Fundadora, sobre la reciente disolución del Instituto Espacio para la Memoria de Capital Federal. Paso atrás para la política pública sobre memoria en el paquete de acuerdos entre el kirchnerismo y el macrismo.
Por los próximos 30 años el gobierno nacional tendrá el usufructo del predio de la ex ESMA y de otros cuatro ex centros clandestinos de detención de la última dictadura. Esto se confirmó luego de que a fines de la semana pasada el legislativo porteño, por orden política de Mauricio Macri, refrendara el acuerdo de transferencia al Estado nacional. En esta aprobación se disolvió el Instituto Espacio para la Memoria (IEM), con objeto de crear un nuevo ente, intentando así disolver de un plumazo más de 8 años de trabajo por la memoria, verdad y justicia.
Nora Cortiñas dialogó con Marcha y Che Barracas sobre el tema, quien expresó una “gran preocupación” sobre el futuro manejo que pueden hacer los gobiernos sobre la política pública de memoria.
¿Cuál es tu opinión en relación a esto y cuál serían las consecuencias reales de la disolución?
-Bueno primero la disolución del instituto es un error muy grande del gobierno. A cambio de negocios con el PRO hacen un retroceso de todo lo que hemos avanzado estos años en las políticas públicas de derechos humanos. Porque es cierto, hemos progresado. Tenemos los juicios; se abrieron los sitios de detención tortura y muerte, y la justicia a través de la investigación en estos sitios va avanzando. Además también la justicia ahora había declarado una orden de no innovar en donde se iba a hacer un museo en el espacio de investigación que tienen para determinados crímenes de lesa humanidad que se cometieron en ese espacio. En definitiva, esto nos preocupa y mucho.
La disolución del Instituto Espacio Memoria es parte de la medida, a la par de crear una nueva entidad, ¿Qué sabes de esta nueva orientación?
-No sabemos que va a pasar con esto y cómo preservar la memoria. Esta herramienta que es el Instituto, para ese camino de la memoria la verdad y la justicia, y la falta de respuesta concreto que tuvimos. Se tira para atrás todo el componente de este instituto, el Consejo de la Dirección, en definitiva todo el desempeño de 8 años. Todo este trabajo contra la memoria se hizo de una manera totalmente inmoral, sigilosamente, solapadamente, por atrás. Mientras se avanzaba en la difusión de lo que fue el terrorismo de Estado se estaba destruyendo todo lo que en ese camino se había hecho durante 8 años.
¿Piensan presentar alguna medida, algún reclamo para frenar esto?
-Por ahora no sabemos qué va a pasar, desde luego que seguiremos la lucha, desde el ámbito que sea posible porque dudamos de cómo va a ser el manejo que van a tener estos sitios. Algo bien concreto, por ejemplo: a dónde va a ir a parar el plantel de trabajadores, que son casi 130, y que hoy por ejemplo estan sin trabajo, ¿Qué va a pasar con ellos? Se hizo una propuesta y se creó un Consejo asesor, que dudamos de cómo pueda caminar este consejo asesor. Asique bueno, tenemos la buena voluntad de querer pensar en positivo y que no van a destruir todo lo que se hizo porque si sería un manchón contra la imagen que hasta ahora tenía el gobierno en estas políticas públicas.
Precisamente una de las causas de mayor rechazo que causó este traspaso a manos de nación es el posible uso que le pueda dar el gobierno.
-Y es claro, porque imagínate se lo dieron a 30 años, y cada gobierno que venga va a poder hacer lo que quiera. Pero desde luego, el peligro mayor, imaginate que el gobierno de la ciudad gana el PRO las elecciones y si se desenvolvió de esto alegremente, bueno no gratis porque hizo negocios, pero lo entregó porque con los derechos humanos no quiere saber nada, ¿Qué va a pasar entonces en este próximo gobierno si llegan a ganar. A dónde va todo el fruto de una lucha, de ese empeño para trabajar contra la impunidad y para que haya justicia por los treinta mil desaparecidos. Entonces nos deja que pensar y una gran preocupación.