Se oficializó la candidatura de Luiz Inácio Lula da Silva a presidente de Brasil y en Buenos Aires, movimientos sociales se reunieron con el núcleo de campaña del Partido dos Trabalhadores (PT) en Argentina con la presencia de Guilherme Boulos, precandidato a diputado federal, y Juliano Medeiros, presidente del PSOL.
Por Laura Salomé Canteros @laurasalome | Fotos: Leandro Paiva en redes de Guilherme Boulos
“Cuidar al pueblo” es el llamado de las izquierdas y el progresismo para las próximas elecciones presidenciales de la región que serán en Brasil el 2 de octubre y que presentan a Luiz Inácio Lula da Silva como su líder y principal candidato. Tras casi cuatro años del proyecto de odio antiderechos y del desgobierno de Jair Bolsonaro, comienza a revelarse cuál será la agenda de la reconstrucción que será producto de la unidad política, la movilización popular y el cambio más allá de las anteriores gestiones del Partido dos Trabalhadores (PT).
En un contexto de violencia política y de amenazas por parte de las élites armadas de suspensión de las garantías constitucionales e incluso de las elecciones, el aporte de los movimientos sociales al futuro gobierno del PT es una esperanza para ganarle al miedo en las calles, redes y triunfar en las urnas. Por eso, con Marielle Franco presente en cada ejercicio de memoria, son los derechos de los pueblos originarios, de las mujeres y LGBT, de las poblaciones racializadas y de los sectores populares los primeros a recuperar.
En Argentina, el desafío es convocar a 12 mil brasileñas y brasileños que votarán en las diferentes provincias y de quienes un 70% son mujeres. Para eso estuvieron en Buenos Aires, Guilherme Boulos y Juliano Medeiros del Partido Socialismo y Libertad (PSOL) dentro del PT. Fue el día en que se oficializó la candidatura a presidente de Lula da Silva, quien estará acompañado por Geraldo Alckmin (ex gobernador del Estado de San Pablo) como candidato a vicepresidente.
¡Vamos a ganar y en la primera vuelta!
Guillerme Boulos será el diputado más votado de la historia de Brasil. Así lo presentan sus compañeras y compañeros de militancia ante la elección que definirá el rumbo de la región y que fronteras adentro presenta innumerables desafíos para los movimientos populares. Coordinador del Movimiento de Trabajadores Sin Techo (MTST) y del Frente Pueblo Sin Miedo, estuvo en Buenos Aires para compartir la importancia de que ésta sea una campaña desde abajo.
Boulos agradeció a quienes resistieron estos casi cuatro años en Argentina y explicó qué representa esta elección para el pueblo brasileño: “tanto Argentina como Brasil sufrieron dictaduras militares, con persecución, tortura y asesinatos, para que hoy podamos estar aquí”, inició. “Por eso, lo que está en juego no es una elección de dos proyectos sino una batalla de la democracia contra la barbarie, el autoritarismo, para que podamos continuar organizándonos y tengamos los derechos más elementales”. Para el dirigente y ex candidato presidencial, la batalla de “Lula vs. Bolsonaro” es histórica y de todo el continente, “para que el autoritarismo, el golpismo y la política que se somete al imperio, no prevalezcan”.
“Hoy estamos globalizando la solidaridad y la esperanza diciendo que es posible construir la integración latinoamericana”, había dicho al principio de su intervención en el teatro Empire, en el barrio de Congreso, “vamos a ganar y en la primera vuelta”, arengó, “la de Lula será la victoria de un pueblo y de los ideales de justicia social en el continente”. El dirigente social habló sobre la agenda de destrucción del desgobierno antiderechos y agregó: “Vamos a elegir a Lula para derrotar a Bolsonaro”, dijo Boulos, “pero también para que los 30 millones de brasileños que están con hambre tengan comida, empleo y libertad; y para cambiar la agenda política del país, para combatir a quienes están destruyendo la Amazonía y garantizar los derechos de los pueblos originarios” y redobló la propuesta, “vamos a elegir a Lula para que los más ricos empiecen a pagar la reconstrucción del país con un impuesto a las grandes fortunas”. También se refirió a los mensajes de amenaza golpista del actual presidente y dijo que son un motivo más para ganar.
Finalmente, Boulos planteó el desafío que sigue para los movimientos populares tras la victoria en las urnas: “vamos a hacer que Bolsonaro y los suyos paguen por sus crímenes” y recordó el femicidio político de Marielle Franco, concejala de Río de Janeiro. “Ella fue aesinada por milicianos, quienes están en el palacio gobernando con Bolsonaro. Por justicia para Marielle queremos verlos en la cárcel”. Y terminó, “tengo la certeza de que con Lula presidiendo a Brasil y con las victorias importante de la izquierda en el continente, vamos a rescatar una nueva ola progresista y la unidad de nuestros pueblos para un cambio más profundo” y agregó “para eso necesitamos la movilización popular, la unidad política y la solidaridad internacionalista“. Una vez más en la región, los eslogans de campaña toman voz y cuerpo: “la esperanza va a ganarle al miedo”, concluyó.
Salimos a las calles en los momentos decisivos
Juliano Medeiros, cientista político y presidente nacional del Partido Socialismo y Libertad (PSOL), se refirió a la convicción para la unidad. “Sentimos la solidaridad de los movimientos populares de Argentina”, inició y se refirió inmediatamente a su amiga y compañera, Marielle Franco: “su lucha e historia significa para miles de jóvenes un ejemplo y es un orgullo tremendo saber que se convirtió en un símbolo de resistencia feminista”.
Medeiros comentó cuáles son los principales retos y aportes del PSOL en un frente de unidad que involucra a siete partidos para derrotar a Bolsonaro y garantizar la victoria de los pueblos el 2 de octubre próximo. “Primero, tuvimos que construir la unidad de los sectores populares con Lula, el principal líder de los últimos 40 años”, contó. “Segundo, viabilizar un programa de reconstrucción nacional, porque lo que hizo la burguesía y las élites para destruir fue muy profundo”, y amplió, “necesitamos un programa más radical que las experiencia anteriores de gobierno“.
A modo de anécdota, Medeiros comentó que tras sucesivas reuniones, Lula “incorporó la idea de que tiene que ir más allá” y aclaró, “en una coalición de izquierdas no damos cheque en blanco a nadie, para eso -desde el PSOL- presentamos 12 puntos para una agenda de cambios y transformación para que, tras la victoria en las urnas, podamos evitar la frustración de los sectores populares”.
Medeiros realizó una cronología de los últimos años destacando que los momentos decisivos en que el fascismo atacó a los pueblos, el PSOL estuvo en las calles; y luego agregó el último reto para los movimientos, el “cómo hacer los cambios”, y se refirió a “hacer una apuesta a la movilización social” y advirtió: “no vamos a reconstruir nuestros países sin movilización, desde arriba, es necesario hacerlo desde abajo e involucrar cambios superiores a la primera ola progresista“.
Renata Codas, contó que desde 2016 construyen el núcleo PT en Argentina, un armado fundamental para esta campaña que arrancará formalmente el 16 de agosto. Un espacio que se generó para disputar las narrativas de la derecha tras el golpe a la ex presidenta Dilma Rousseff. Y arengó, refiriéndose a que en un 70% quienes votarán en el país son mujeres “las mujeres y les jóvenes vamos a vencer a Bolsonaro, acá en Argentina y en Brasil“. Además, Mariel Fernández, intendenta de Moreno (PBA), habló sobre la importancia de cuidar los procesos de los gobiernos populares: “si hay algo que aprendimos es que cuando perdemos uno, terminamos afectando a la democracia en la región” y rememoró el golpe de Estado en Bolivia. “Tenemos una tarea militante y es que nos encontremos para que las y los hermanos brasileños voten por Lula”, finalizó. El acto fue organizado por Barrios de Pie y también estuvo la legisladora porteña Lucía Cámpora.