En el marco de un nuevo 1° de mayo, Marcha publica un ciclo de entrevistas a diferentes referentes gremiales para analizar el contexto del país, la organización de los trabajadores y sus reivindicaciones. Hoy, Norberto Señor de ATE.
Marcha y FM Che Barracas dialogó con Norberto Señor, Secretario General de la Asociación de Trabajadores (ATE) Regional Sur sobre la situación de precarización de los trabajadores del Estado, el proyecto K sobre trabajo registrado, y las posibles soluciones al escenario actual.
-¿Qué postura tiene ATE Sur en relación al proyecto de ley de “Promoción del Trabajo Registrado y Prevención del Fraude Laboral” que impulsa el gobierno nacional?
-Cualquier trabajador estatal -no hace falta estar en la comisión de un sindicato- observa que hay mucho de oportunismo y mucho de cinismo en el planteo de que los trabajadores y los sindicatos ahora nos tendríamos que “ocupar de enfrentar la precarización”, porque realmente si no fuera tan dramático causaría gracia que un gobierno que ha hecho poco y nada para revertir los índices de precarización extrema que hay en nuestro país, sea el principal precarizador. Si uno observa cualquier trabajo que se desarrolla en el ámbito de un municipio, desde hace décadas, en vez de designar trabajadores de planta permanente, lo que se hace es designar personal de planta temporaria, alguien que va a hacer una actividad del tipo permanente. Y eso en el mejor de los casos, cuando no, directamente se absorben planes sociales, como por ejemplo en Argentina Trabaja, para barrer las calles, cuando debería ser alguien remunerado con un salario superior al mínimo vital y móvil, en blanco y con todos los derechos. Si eso lo extendemos a la órbita del Ministerio de Acción Social de la Nación, donde la cuñada de la Presidenta está al frente desde hace una década o más, el 95 % del personal no pertenece a planta permanente, y lo mismo pasa en el Ministerio de Trabajo.
Más que hablar de leyes que van a resolver este problema, a través de darle beneficios a las patronales, es decir que paguen menos aportes, como ocurría en la era Cavallo, con el compromiso de ir blanqueando a la gente que tienen en negro, nos parece que son hechos más propagandísticos que reales. No me refiero sólo al nacional, se llame Massa en Tigre, Binner en Santa Fé, Macri en Capital, todos aplican la precarización extrema, a la tercerización, a la contratación fraudulenta, a los contratos temporales que no son tales, o a los planes sociales, ni siquiera se pagan los salarios en blanco o se pagan sumas no remunerativas; entonces el primer paso que debe dar el Estado realmente, es debe cumplir con eso, y por otro lado, al revés, ser sumamente duro con quienes no cumplen con el blanqueo de los trabajadores, más que tener que dar ventajas impositivas, porque esa es su obligación legal.
Cualquier pobre violenta una ley y enseguida le cae todo el peso y hasta se organizan campañas mediáticas para que se lo linche o se lo mate, sin saber si era culpable o no; en cambio cualquier empresario en Argentina puede dejar a miles sin trabajo, puede echar a trabajadores, puede no pagar los salarios, y sin embargo jamás la represión cae sobre él, sino que caen sobre quienes reclaman esos derechos.
-Este proyecto se va a tratar el 30 de abril, ¿tiene viabilidad, crees que puede ser aprobado?
-Lógicamente puede ser aprobado, en tanto el gobierno nacional con sus propias filas puede lograr esos votos, incluso puede tener aliados de ocasión. Nos parece que intentan una pose frente al día de los trabajadores que viene precedido por una huelga, la más importante de toda la era kirchnerista -me refiero a la huelga general con una masividad que cuestionó las políticas salariales, y sociales, y también educativas como la gran huelga docente- hacer esta pose realmente puede significar que se vote una ley.
Estamos convencidos desde ATE, que ninguna solución a la precarización laboral viene de la mano de quienes privilegian intereses empresarios, es decir, los que ponen el acento en que para que haya más trabajo, los empresarios tienen que ganar fortuna. Este gobierno evidentemente ha hecho muy poco con las herramientas que tenía a mano en todos estos años como para revertir la situación con seriedad. La “verdad” va a venir de la mano de la realidad, de la mano de los trabajadores, de la fuerza, de la organización, y de las luchas de los trabajadores. Mientras tanto, todo lo demás nos parece pura cháchara.
Estamos cerca de un 1° de mayo, que nos trae a la memoria tantos muertos por luchar por los derechos de los trabajadores, precisamente ante la voracidad del capital. Sabemos que todos los derechos que nos quitan son para favorecer la voracidad empresaria, todo lo que recuperamos los trabajadores, es para recuperar algo de lo que nos roban los que viven a costa de la mayoría laburante.
-¿Qué consecuencias reales podría tener el implemento de esta ley?
-Primeramente habría que ver si se aprueba, exactamente cómo termina su articulado, cómo es su implementación, y sobre todo la disposición y determinación política. En Argentina existe una ley de abastecimiento, por ejemplo, y frente a toda la especulación con los precios y más allá del abuso de un puñado del monopolio de formadores de precios, no se ha hecho nada para implementar esa ley. Entonces las leyes pueden existir, y supongamos que esta lograra algún aspecto más progresivo que el simple reflote de una ley que ya existe que es el blanqueo de capitales –se utilizaba para blanquear trabajadores y estar libres de cargas impositivas y sociales- más allá de eso, el resultado va a ser muy escaso porque la inmensa mayoría de las grandes empresas tienen mecanismos sobrados para evadir todo tipo de contribuciones. Ya de por sí hay una infinidad de números concretos en relación a los aportes y contribuciones a la seguridad social, que Cavallo los eliminó, y por lo tanto esto ha desfinanciado al ANSES muchísimo. Entonces, una cosa es la ley y otra cosa es la relación de fuerza que hay en la sociedad para que se resuelvan los problemas para las clases populares.
Y para que el problema de la precarización deje de ser el drama de casi la mitad o más si contamos también a los que aparecen en los registros como desocupados; depende mucho de la capacidad que tiene la propia clase trabajadora para conmover a los de arriba, y para forzar soluciones de fondo y no parches de ocasión. Mientras se pulverizó el salario, mientras se aplica un ajuste lo más ortodoxo desde que este está gobierno al frente de las riendas del Estado, hay que ir a fondo con la obligación empresaria, y más que darle beneficios, ponerles severos castigos económicos. Se habla de la modificación del código penal, ¿no será factible que vaya preso un empresario que no tiene figurando a un trabajador y lo explota durante diez años? Bueno todo eso es impensable con gobiernos que están pensando en contentar intereses empresarios como única vía para ver si pueden resolverse algún paliativo para los trabajadores.
Por último quiero agregar, que de ninguna manera la bandera de la lucha contra la precarización arrancó ahora, y si se ha instalado en la sociedad tampoco es por mero oportunismo del gobierno, sino porque hubo decenas de miles de los precarizados en los distintos sectores, que han tomado en sus manos a la lucha por revertir esta situación y convertirse en trabajadores en pleno derecho, donde más de una vez han conmovido al poder político y a las empresas, obligándolos al pase a un trabajo en planta y permanente.