Por Claudia Korol. Enmarcado en las actividades por el 8 de marzo y con el objetivo de analizar desde la perspectiva de las mujeres las reformas propuestas para el Nuevo Código Civil y Comercial se realiza este 11 de marzo un seminario en el Congreso.
Enmarcada en el 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, el seminario “Puntos débiles en la reforma del Código Civil. La perspectiva de las mujeres”, tiene el objetivo de aportar al debate sobre el actual proyecto de reforma del Código Civil aprobado por el Senado de la Nación a fines de noviembre del año pasado, y que pretende ser aprobado en Diputados. Esta actividad, pensada para incidir en la actual coyuntura de debate legislativo del Código Civil, está organizada por la Asociación Católicas por el Derecho a Decidir –CDD- y por el Comité de América Latina y el Caribe para la Defensa de los Derechos de la Mujer -CLADEM – en Argentina.
Del seminario participarán las diputadas Mara Brawer y Araceli Ferreira (Frente para la Victoria); la abogada Nelly Minsyersky; la legisladora de mandato cumplido (Partido Socialista) e integrante de la Comisión Redactora del Código Penal, María Elena Barbagelata; Paola García Rey, abogada de Amnistía Internacional Argentina y Aida Kemmelmajer de Carlucci, ex Ministra de la Suprema Corte de Justicia de Mendoza. Los puntos que se tratarán serán aquellos que afectan de manera directa los derechos de las mujeres: el artículo 19, que habla del inicio de la persona humana y el artículo 146, sobre el status jurídico de la Iglesia Católica.
Voces feministas contra la reforma
Entre los reclamos más importantes que se realizan a la propuesta de modificación al Código Civil aprobada por el Senado, está el que se refiere al artículo 19, que considera al embrión como persona, es decir, que se es persona desde la concepción. En declaraciones al programa de radio Espejos todavía que se emite por FM La Tribu, Marta Alanis integrante de Católicas por el derecho a decidir sostiene que “definir a la persona humana desde el momento de la concepción (…) es una aberración”, aclarando que “esto no es derecho canónico, es el debate del Código Civil de la República Argentina, un país que pretende ser libre, soberano y laico”.
“Se trata –dice Marta Alanis- de un debate filosófico, científico, médico, teológico, sobre el cual no hay un acuerdo. No puede un Estado, una Cámara de Senadores y una Cámara de Diputados, decidir que el embrión es persona desde el momento de la concepción. No se pueden imponer creencias religiosas en un Estado laico”. Es por eso que insta a la participación ciudadana en el debate: “El Código Civil regula muchas acciones cotidianas, y nosotras, las mujeres, las feministas, los sectores democráticos, tenemos que participar en su escritura, porque en un estado moderno, no podemos estar regidos por normas medievales”.
Por la igualdad y en búsqueda de un estado laico
En declaraciones al programa de radio Sonidos agitadóricos de Radio Nacional, Susana Chiarotti, abogada del Instituto de Género, Derecho y Desarrollo –INSGENAR- e integrante del Consejo Consultivo de CLADEM realiza una crítica feminista a las modificaciones propuestas que harían al status jurídico publico de la Iglesia Católica: “Estas modificaciones están diseñadas por la jerarquía conservadora de la Iglesia Católica y traba el acceso a la interrupción voluntaria del embarazo”. Agrega: “Me parece aberrante que la Iglesia Católica tenga el privilegio de ser considerada persona jurídica pública, al mismo nivel que un estado provincial. Eso muestra que en nuestro país, si bien hay libertad religiosa, no hay igualdad religiosa. Es algo que estamos reclamando: queremos un estado laico. Ninguna iglesia debería tener ese carácter de persona pública, que es reservado al Estado, a los Estados provinciales”.
Sobre el mismo punto, Marta Alanis sostiene“el Estado laico es imprescindible para garantizar la pluralidad y la diversidad que somos como pueblo, como país. No todos ni todas las habitantes de este país nos identificamos con la Iglesia Católica. Incluso dentro de la propia Iglesia Católica, hay una diversidad de posiciones. Nosotras, como mujeres católicas y como feministas, decimos que no puede ser la Iglesia Católica una persona jurídica de carácter público; tiene que ser un culto totalmente separado. Con la globalización, los pueblos somos más diversos, más plurales y las decisiones personales hay que tomarlas en base a la propia conciencia; por eso el Estado debe ser laico” y concluye, “dar carácter de persona jurídica publica a la Iglesia Católica es jerarquizar a una religión por encima de las otras”.
“No hay peor batalla que la que no peleás” dice Chiarotti. “Estamos en un país democrático, nos tienen que escuchar y entender que el movimiento de mujeres es una voz que se ha acreditado con un discurso importante de reclamos de igualdad en contra de todas las discriminaciones. “Para nosotras, el Estado laico va a ser prueba de una verdadera democracia, porque darle ese enorme poder a las iglesias, sobre todo a las religiones monoteístas, que siempre han tenido como eje principal el control de la sexualidad, es ir en contra de la ciudadanía de las mujeres. Para que una democracia sea real, tiene que tener un Estado Laico. Es laico o no es democracia. Este planteo del movimiento de mujeres y del movimiento de derechos humanos, tiene que ser escuchado”.
El seminario “Puntos débiles en la reforma del Código Civil. La perspectiva de las mujeres” se realizará hoy, martes 11 de marzo, de 15 a 19 hs. en el Salón 2 del Anexo Diputados, Rivadavia y Riobamba, Congreso de la Nación, Ciudad Autónoma de Buenos Aires.