Marcha
    Facebook Twitter Instagram YouTube
    Facebook Twitter Instagram
    MarchaMarcha
    • Quienes somos
    • Sin Fronteras
      • Democracia
      • Derechos Humanos
      • Economia
      • Extractivismo
      • Migraciones
      • Política
      • Opinión
    • Feminismos
      • Derecho a Decidir
      • Violencias
      • Entrevistas
      • Librelocalab
      • Nuestra América
      • Trata y explotación sexual
      • Opinión
    • Especiales
      • ¿Quién defiende a lxs defensorxs?
      • #SomosMultitud
      • Defensoras. La vida en el centro
      • ¡Nosotres Sim!
    • Niñez
      • Crianzas
      • Derechos
      • Educación
      • Nuestramérica
    • Deportes
      • Opinión Deportes
      • Crónica
      • Pinceladas
      • Otras Yerbas
    • Culturas
      • Películas y series
      • Libros
      • Entrevistas
      • General
      • Especiales
      • Música
      • Teatro
      • Yo estuve ahí
    • Marcha 10 años
      • Ciencia y Tecnología
      • Economía
      • El País
      • Especiales
      • Opinión Nacionales
      • Policiales
    • Archivo Fotográfico
    Marcha
    Home»Sin categoría»Crisis policial y cambio de roles
    Sin categoría

    Crisis policial y cambio de roles

    16 diciembre, 20135 Mins Read
    Compartir
    Facebook Twitter LinkedIn Pinterest Email

    Crisis policial y cambio de roles

    Por Mauricio Díaz. No solo es una problemática que se sufre en países como Colombia, México o Brasil. Los cordobeses leyeron en los diarios, vieron en la televisión y escucharon por la radio, como funciona una red de narcotráfico ligada directamente al poder político y policial.


    Hace unas semanas se cumplieron 20 años de la muerte de Pablo Escobar Gaviria, quizás el mayor narco de la historia. Personaje que creó un estereotipo de narcotraficante, ayudando primero a su familia y sus amigos, económicamente; después llevándole dinero a los municipios más pobres de Colombia, se ganó el respeto y admiración de la gente más humilde. Quizás lo hacía a modo de lavar culpas. Algo más cercano a la realidad, podemos decir que viniendo de una familia muy humilde, nunca se olvidó de lo que es el hambre, de lo que es la necesidad, de lo que es la marginalidad, tanto es así que él trabajaba con esa marginalidad, aún a costas de esta.

    Varios siguieron sus pasos, pero el que más lejos llegó fue el boliviano Roberto Suárez Gómez, conocido en EE. UU. y en Europa como el “Rey de la Cocaína”, por ser reconocido su producto como el más puro de la década del ´80. Suárez Gómez, tenía contactos con la CIA, la Unión Soviética y con la Revolución cubana, ya sea como informante o como él se presentaba, empresario. El “Rey de la Cocaína”, fue muy querido entre las clases bajas bolivianas, tanto así que lo quisieron candidatear a presidente, pero este tenía otros planes, y financió el golpe de Estado en 1980, accediendo así al libre tránsito aéreo.

    El doble discurso era moneda corriente entre los narcos de tiempos pasados. Hoy la matriz del narcotráfico ha cambiado, y el delincuente en sí también. A diferencia de sus viejos referentes, hoy se crean milicias, constituidas por jóvenes de zonas marginales, y basan su clientela en la clase media y muy particularmente en clases altas (hace unos días cayó una banda, en medio del porteño barrio de Belgrano, sospechada de vender a personajes VIP). Los que dicen pelear contra el narcotráfico, les resulta mucho más sencillo, buscar, perseguir, detener y condenar, al “dealer” o al pequeño consumidor, que a aquellos que venden y compran en grandes cantidades. Está más que claro que es más fácil desbaratar una banda narco, en barrios como Villa del Libertador, en Córdoba, o en la Villa 1 – 11 – 14, en Buenos Aires; que ir a buscar a los “peces gordos” en el Cerro o Carlos Paz, en Córdoba; o San Isidro o Nordelta, en Buenos Aires.
    El narco se ha especializado en escabullirse y en no tener contacto con la mercancía. Para ello, han creado milicias en los barrios más marginados de cada país que sufre este flagelo; pero a su vez, y en el país ha quedado más que claro, nunca dejan de codearse con políticos, jueces, y jefes policiales. Es decir, para que el negocio se expanda necesitan de jóvenes cooptados, proveerlos de armas y organizarlos para distribuir, comercializar y defender. Y por otro lado, para que puedan actuar con libertad, necesitan de los contactos en la política, en la justicia y las relaciones de poder que se dan en la calle.

    Apenas horas después de conocerse el acuerdo entre el Gobierno cordobés y los policías acuartelados, la directora de la Biblioteca Popular de Bella Vista, Susana Fiorito, publicó un comunicado titulado “¿Fueron los negros de mierda?”. Fiorito conoce muy bien la dinámica social de su comunidad; además trabaja activamente por la derogación del Código de Faltas, y es una de las que mejor conoce sus consecuencias: cómo la policía se relaciona con los pibes de barrio carenciados. Fiorito explicó, al programa radial “Queres Ficción?” que “la policía primero detiene y arresta al pibe, lo llevan a la Unidad de Contención de Aprendidos (UCA), donde después de maltratos verbales y palizas, le dicen que tiene que ir a hacer trabajos non sanctus, ilegales; los pibes entran así en una red delictiva de la cual se les complica mucho salir”, comentó Susana al radial cordobés ¿Querés ficción? Susana plantea que la organización de los saqueos, y su accionar fueron llevados a cabo, no solo por delincuentes aislados, ni oportunistas, sino que en su gran mayoría por organizaciones narcos que utilizan a estos pibes para su negocio particular.
    Además Fiorito visibiliza a quienes realmente armaron el caos, para que no se repita la fórmula fácil “los negros de mierda”. Hizo todo lo contrario a lo que expuso el Gobierno provincial en estos días que intentó invisibilizar a los saqueadores, caracterizándolos de “mil delincuentes”, de manera aleatoria y azarosa.

    El miércoles 11 de diciembre, en el Tribunal Oral Federal II, el fiscal Maximiliano Hairabedian, pidió una condena efectiva de tres años de prisión y la inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos, al piloto Martín Sarmiento, de la Policía Provincial, y el Gobierno de Córdoba. El juicio que se lleva adelante contra el piloto Sarmiento, es por supuestamente filtrar información de pesquisas a narcos, a cambio de dinero.

    Los estereotipos cambiaron. El narco ya no es un componente aislado de la sociedad. En Córdoba por lo que se pudo conocer en los últimos meses, y por lo que se vivió en las últimas semanas, es el poder que manda sobre el narcotráfico.

    También te puede interesar

    8M en Argentina: un pacto feminista contra un gobierno asesino

    7 marzo, 20243 Mins Read

    Balotaje 2023: todes con Massa contra Milei y la casta del PRO

    9 noviembre, 20235 Mins Read

    Argentina: Esta no es una elección más

    19 octubre, 20233 Mins Read
    Podcast

    Marcha Noticias

    Domicilio legal: Llerena 2579, Código postal 1427
    Dirección de correo electrónico: marchanoticias.org@gmail.com

    Registro de Propiedad intelectual RL-2021-78108500-APN-DNDA#MJ

    Ciudad Autónoma de Buenos Aires
    ARCHIVO
    MARCHA_ARCHIVO
    Descargar
    Manual
    Facebook Twitter Instagram YouTube

    Enter para buscar. Esc para cancelar.