En un nuevo capítulo de la disputa con el gobierno nacional, el titular de la CGT dijo que la presidenta “no escucha los reclamos de los trabajadores” y reconoció que la relacion está estancada.
Como un símbolo de los tiempos que corren, el lugar elegido por Moyano para dar respuesta a los últimos dichos de Cristina Fernández fue un programa de televisión. Anoche, el lider sindical se despachó con algunos de los principales reclamos que mantiene, aseguró que su último contacto con la presidenta fue en septiembre de 2011 y confirmó que hoy la relación está suspendida.
Alguno de los puntos centrales en la entrevista televisiva a Moyano fueron las paritarias, la concepción de sintonía fina del gobierno y su situación al frente de la CGT. A pocos días de comenzar el debate sobre el aumento salarial en Camioneros, así como en los gremios de mayor peso, Moyano dijo que no cree en las paritarias libres. “¿Cómo se va a hablar de paritarias libres cuando UATRE sacó el 35 por ciento de aumento y no se lo homologaron? ¿De qué paritarias libres hablan?”, preguntó. El lider sindical, quien el año pasado en los hechos ayudó a fijar un techo salarial busca ahora subir el 20 por ciento fijado en voz baja por el gobierno nacional.
Moyano dio detalles del distanciamiento con la primer mandataria. Tras una reunión en septiembre del año pasado, cuando Moyano le presentó varios reclamos sindicales, la presidenta viajó a Estados Unidos y no volvieron a reunirse. Nunca más. “En ese momento la relación era normal y a partir de ahí nunca más. A lo mejor la insistencia de los reclamos le molesta”, afirmó el líder de la CGT.
En ese marco Moyano dijo que el concepto de sintonia fina no lo entendía y afirmó que “las palabras difíciles” le hacían recordar al gobierno de Menem. “Cuando se empiezan a usar palabras especiales me hace acordar al gobierno de Menem cuando empezó con la flexibilidad laboral, son palabras poco entendibles”, amplió.
Moyano desestimó por el momento convocar a un paro general, aunque tampoco lo descartó. Además, informó que el último miércoles le envió una carta a la Jefa de Estado con una serie de reclamos y ahora aguarda la respuesta.
Por otro lado Moyano hizo referencia a la situación interna dentro de la Confederación General del Trabajo y dijo: “Voy a seguir hasta junio en la CGT sino hay un golpe de Estado”. Recordemos que desde el sector de los “Gordos” sugirieron que Moyano adelante las elecciones de la Central que hoy conduce y el propio Omar Viviani, del gremio de taxistas y, hasta ayer parte del nucleo chico de Moyano, se refirió a las diferencias y matices dentro de la CGT.
Hoy, el problema de Moyano no son sólo los Gordos sino que, dentro de su propio entorno hay dirigentes sindicales que no ven con buenos ojos sus críticas explicitas hacia el gobierno nacional. Para el día de hoy Moyano convocó a un asado informal. El numero de participantes permitirá saber qué relación de fuerzas y de lealtades mantiene dentro de la Central sindical.
Finalmente, el lider de la CGT ratificó la práctica gremial de la central que encabeza: “la Asamblea soy yo, el Congreso soy yo, yo se cuanto tiene que ser el salario del trabajador,el que conduce soy yo”, afirmó.
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