Como parte de una serie de conversatorios, las Hermanas mapuches de Mascardi participaron de un encuentro realizado en ATE, organizado por la Gremial de Abogados y Abogadas.
Por Vivian Palmbaum | Foto: Colectivo Manifiesto
El pasado viernes 28 de junio, en el auditorio de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) de la Ciudad de Buenos Aires, la Gremial de Abogados y Abogadas presentó el trabajo que vienen haciendo en la Patagonia en defensa de las comunidad mapuche y de los y las criminalizadas por la protesta.
Con un panel compuesto por las hermanas mapuches María Nahuel, tía de Rafael Nahuel, asesinado por la Prefectura, la machi Betiana Cohuan, autoridad espiritual del pueblo mapuche, junto a Carolina Alac de la Multisectorial contra la represión de Bariloche, Javier Milani de ATE El Bolsón, Laura Taffetani y Eduardo “Negro” Soares de la Gremial de Abogados y Abogadas.
“Los pueblos originarios y los pueblos de los barrios pobres tienen el mismo enemigo”, arrancó el “Negro” Soares, reconocido abogado de La Gremial, la presentación del trabajo que vienen realizando desde hace dos años en la Patagonia, a partir de un hecho que se produjo en Bariloche en donde las fuerzas de seguridad gasearon y detuvieron a unos jóvenes.
Soares y Taffetani, letrados de La Gremial, explicaron que llevan adelante una práctica solidaria hacia quienes más lo necesitan, como testimonia la larga trayectoria de esta organización en causas desde hace muchos años. En la Patagonia asumieron la intervención en 14 causas en Neuquén, 12 en Río Negro y de más de 100 procesados, en el lapso de dos años.
Imagen: La Gremial
“¿Cuánto tiempo nos callaron?”
Tal como testimonian desde las comunidades mapuches, el conflicto empieza hace ciento cincuenta años. “La historia cambia y estamos empezando a cambiarla a través de una forma de vida ancestral y política”.
Laura Taffetani, una de las abogadas que tomó la defensa, por lo que se traslada regularmente desde Buenos Aires, explicó que la causa principal por la que se criminaliza a las y los mapuches es la usurpación. “O hablamos de recuperación territorial o hablamos de usurpación, esa es la batalla central entre el derecho winca (NdR: extranjeros o no mapuche) y el derecho ancestral”. La causa por usurpación se sigue profundizando, no se tiene en cuenta nada del derecho indígena. Lo más grave es que la usurpación por la que se los acusa no es sobre un terreno privado sino sobre un territorio de Parques Nacionales, “que es de todos nosotros”.
Además reveló que la estrategia “es criminalizar a las y los mapuches. En cada marcha que se hace por Rafita fueron filmadas las personas. Cuando uno toma la prueba de los expedientes están todos y todas filmadas y entonces de a poco van seleccionando a quién imputar”. Una situación que también se repite en El Bolsón contra quienes se movilizan pidiendo justicia por Santiago Maldonado.
Hermanas mapuche
“El mayor aprendizaje es compartir con las hermanas la decisión de lucha que tienen. Un desafío que va mucho más allá de la recuperación territorial y que es la refundación del pueblo mapuche”, enfatizó Taffetani. “Una pericia antropológica explicaría por qué están ellas y ellos ahí, pero no es aceptada por la justicia, porque dicen que esto es una simple usurpación”.
“Mari mari compuche”, comenzó María Nahuel con el tradicional saludo en mapudungun. Junto a ella estaba Betiana, machi de la comunidad del lago Mascaridi. María, tía de Rafael Nahuel, contó que habían venido “a hacer saber cómo estamos allá nosotros y cómo va el juicio de mi sobrino Rafael Nahuel”. En relación al prefecto detenido por el asesinato dijo que “sabemos que Pinto está preso, pero sabemos que debe estar tomando mate porque aún no tiene sentencia”. Así fue contando que “nosotros no somos violentos, no tenemos armas, no somos terroristas y pedimos que nos acompañen a pedir justicia por Rafael Nahuel. La causa hace tiempo que está durmiendo en Roca”. Respecto de la disputa que mantienen por la tierra dijo que el primer responsable es Parques Nacionales que hizo la denuncia por usurpación.
“Nosotros no vamos a usurpar sino que vamos a recuperar los territorios que nos robaron. El dolor más grande es la pérdida de mi sobrino, pero también vine a solidarizarme con las Madres, con las que perdieron a sus hijos, a los que han matado. Todas sufrimos lo mismo. Si estuviésemos todos juntos sería más intensa la lucha porque el Estado no podría vencernos. Les debemos a nuestros ancestros, a ellos que terminaron en los museos. Como mapuches en la wincul (NdR: cerro), nosotros no vamos a abandonar el lugar, porque la tierra no se negocia, la tierra no se abandona, porque nosotros no somos dueños de la tierra, nosotros somos parte de la tierra. Allá tienen tienen tierras Benetton, Tinelli, que compran los ríos, los lagos”.
Como autoridad espiritual, la machi Betiana le recordó a la comunidad que hay que seguir peleando por el agua, el aire y la tierra “como lo hicieron nuestros antepasados. Venimos de una descendencia de guerreros, como Calfucurá, guerrero de la Puel Mapu. Todavía queda mucha tierra por defender, muchos espacios naturales”. Agradeció a las personas no mapuches por haber acompañado en esta lucha. Y agregó: “nosotros ya no vamos a poder vivir de otra forma, sino ser parte de la tierra y la naturaleza con esta lucha que hoy es la Puel Mapu y es Rafael Nahuel. Ayer fueron nuestros antepasados. Nuestros toki y sus restos aun siguen en los museos, con mucha tristeza. Esta comunidad va a seguir recuperando tierras. Hoy es el lago Mascardi, para defender lo que es nuestra Puel Mapu, estamos dispuestos a dar la vida en esta lucha. Mañana estarán nuestros hijos en esta lucha”.
Winka
Los y las mapuches no están solas en la lucha por la recuperación de su cultura y sus territorios. La comunidad construye confianza con los no mapuches: los winka, que también son procesados por su participación. La criminalización y persecución que vive la comunidad mapuche es proporcional a los poderosos intereses que afectan con su presencia y sus reclamos territoriales. También es común a la situación de persecución y criminalización de las y los más vulnerables, que son la otra cara de la moneda de la postal suizo-argentina emblema del turismo en la Patagonia.
Javier Milani, el Secretario General de ATE El Bolsón, procesado por la participación en las movilizaciones en defensa del pueblo mapuche, explicó que el Estado no quiere que suceda la recuperación territorial de los pueblos originarios “porque donde haya una comunidad viviendo con su cosmovisión no va a entrar una petrolera, no va a entrar una minera, no van a entrar los terratenientes, no van a entrar las corporaciones”.
Carolina Alak, también procesada por diversas movilizaciones, pertenece a la Multisectorial contra la represión en Bariloche, que se formó en el 2010 a partir de una represión en los barrios de El Alto, donde la policía provincial asesinó por la espalda a Diego Bonefoi, un pibe de 15 años. Entre la violencia constante que se vive en los barrios vulnerables, Carolina destaca los saqueos del 2012, que fueron la excusa para remover al intendente y para instalar a las fuerzas federales en la zona “pero empezamos a descubrir que había intereses de terratenientes nacionales y de corporaciones internacionales que se estaban profundizando en la zona. A partir del 2017, la recuperación del Cushamen termina trágicamente con la muerte de Santiago Maldonado. A partir de ahí el ojo del Estado viene con toda su fuerza porque necesitan la construcción del enemigo interno. Lewis, Benetton, estaban necesitando afianzar sus negocios y este gobierno es muy amigo y socio de los negocios. Le garantizaron que hubiera tranquilidad en la zona”. En ese momento, destaca Alac, que comienzan megaoperativos que nunca habían visto en la zona. “Estamos hablando de 300 a 400 efectivos, con helicópteros, drones y elementos sofisticados contra comunidades que son pequeñas. También empiezan a haber operaciones de inteligencia y empezamos a ser perseguidos las y los militantes”.
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