Por Pedro Perucca. Ahora que, iconografía kirchnerista de por medio, a todo el mundo parece gustarle la historieta, Télam lanzó oficialmente el blog del Club de la Historieta Nacional, una iniciativa oficial que busca dar a conocer a las glorias nacionales vinculadas con el noveno arte.
El fanático de las historietas, aquel que, con más o menos pudor, está siempre dispuesto a romper una lanza en defensa de la calidad literaria de los globitos de Oesterheld o de Robin Wood o del nivel artístico de cualquier garabato de Pratt o Breccia, suele ser un tipo más bien introvertido, más habituado al silencio y la soledad de las catacumbas comiqueras que a ruidosas presentaciones oficiales con funcionarios discurseando mientras circulan el vino de marca y los sandwichitos de bondiola. Pero bienvenidos sean los discursos (ni hablar de los sandwichitos) si van a servir para difundir la obra de algunos maestros de la historieta argentina, empezando por el nunca suficientemente alabado Héctor German Oesterheld.
Así es que este pasado viernes 27 de enero, al caer el día, pudo verse salir de sus reductos secretos a algunos de esos pálidos defensores de las artes marginales para acercarse a la Casa de la Defensa (Defensa 372) en el barrio de San Telmo, donde una iniciativa de la agencia oficial de noticias Télam citaba para el acto oficial de lanzamiento del blog del Club de la Historieta Nacional (http://clubdelahistorieta.telam.com.ar). Allí, parpadeando frente a las luces cegadoras (cualquier foco de luz de más de 25W es cegador para estos especímenes cuasi abisales) y chocándose desconcertados contra el busto de Néstor Kirchner del patio de la casona, pudieron cruzarse, aunque tal vez sin saberlo (el lector de comics pocas veces conoce la cara del guionista o dibujante), con próceres de la talla de Cacho Mandrafina, Maicas o Quique Alcatena (consagrados en esas páginas habitualmente mal impresas de Scorpio, Humor, D´Artagnan o El Tony) y también con algunos de sus modernos herederos, como Esteban Podetti o Diego Parés (actuales colaboradores de Barcelona).
A poco de que los primeros choripanes comenzaran a ejercer su efecto apaciguador sobre los gurbos, tomó la palabra el presidente de Télam, Martín García, para destacar y agradecer la presencia de Elsa Sánchez de Oesterheld (viuda de HGO) y de la madre de Cacho El Kadri (“nuestro Che Guevara”) y comentar que en “este día histórico” se iba a proceder a presentar “a las estrellas del blog, es decir aquellas historietas que nos conmovieron, para que las nuevas generaciones experimenten cómo eran aquellas historias que en los 50 y 60 marcaban a nuestras generaciones”.
Inmediatamente se apagaron las luces y comenzó a proyectarse una animación de la historieta de Oesterheld y Pratt “Sargento Kirk: El odio de corazón Sutton”, una breve e intensa aventura de nuestro hierático sargento desertor (esa transpolación del Martín Fierro a las pampas gringas, según se sabe). La animación, intencionalmente “artesanal” y “limitada”, a cargo de Roberto de Biase y su productora (Bujos), busca reproducir el efecto “lectura de historieta” en el espectador. De ahí que puedan verse la sucesión de cuadritos y que tanto la voz de todos los personajes como las onomatopeyas de rigor estén a cargo de una sola persona, en una reversión del juego infantil de interpretar a todos los protagonistas del cuento.
Luego del corto tomó la palabra Jorge Morhain, reconocido escritor de historietas y autor de más de 4000 guiones desde los años 60, quien, luego de afirmar que “me gustaban más los tiempos en que era menos prócer pero laburaba más”, festejó la iniciativa del blog y llamó a colaborar con el proyecto del Club de la Historieta Nacional (“un club en el que no se cobra entrada ni cuota social”). Luego contó que se hizo historietista para poder vivir muchas vidas diferentes y confesó “todavía me duelen aquellas cabalgatas, así como me duelen las ganas de seguir haciendo Cabo Savino o Pehuén Curá”. Los otros tres responsables del blog (Felipe Ricardo Avila, Gustavo Adrián Ferrari, Laura Vázquez Hutnik) a su vez destacaron que “en los últimos años la historieta volvió a ganar visibilidad” y marcaron la “necesidad desesperada de rescatar lo que se va perdiendo”. En ese sentido, se señaló que si bien son positivas las iniciativas de digitalización de materiales en riesgo de desaparición (que el blog espera ir poniendo a disposición del público amante del género en formato PDF) también sería bueno contar con más “historietas en papel”.
Finalmente, luego de un emocionado recuerdo para Carlos Trillo y antes del cierre con otro corto de animación (“Joe Zonda: copiloto”, con texto de HGO y dibujos del recientemente fallecido Francisco Solano López), pasó al micrófono Elsa Sánchez de Oesterheld , acompañada por “el nieto y bisnieto que mis hijas dejaron”. Luego de agradecer las múltiples iniciativas oficiales que buscan revalorizar la obra de su desaparecido compañero, Elsa señaló que “se está viviendo una época maravillosa” y agradeció a Néstor y Cristina Kirchner por proponer “el país que siempre soñamos”. Emocionada, afirmó: “Las vueltas que ha dado mi vida han sido difíciles, pero hoy tengo una gran esperanza. Héctor jamás sospechó que iba a quedar impreso y tan fuerte en este siglo. Ojalá los jóvenes sigan disfrutando de su trabajo y su pasión”.
Para terminar, recordó que cuando el autor de la mítica “El Eternauta” le contó que se iba a dedicar exclusivamente a la historieta “casi me divorcio” pero que luego tuvo que reconocer el acierto de esta decisión de Oesterheld, quien sostenía que ese soporte, tan vilipendiado y menospreciado por los canales culturales habituales, “podía ser la gran posibilidad para los chicos que nunca leen”. Pensando así es que Oesterheld se propuso que sus historias fueran mucho más que las aventuras habitualmente livianas y olvidables que solían poblar las páginas de las revistas pulp de la época y, al hacerlo, revolucionó la historia del comic nacional.
Con el lanzamiento del blog del Club de la Historieta todos aquellos y aquellas que “nunca leen”, así como todos los abnegados y pálidos defensores del noveno arte, hoy cuentan (contamos) con una vía más para acceder a los múltiples universos propuestos por HGO y por otros grandes autores del comic nacional.