Por Vivian Palmbaum
El domingo pasado, a pocas horas de iniciados los comicios para elegir a la Junta Vecinal en la Villa 21-24, la justicia a cargo interrumpió el acto eleccionario bajo la denuncia de irregularidades en el padrón. Unas elecciones que llegan con demora y que fueron postergadas para el domingo 11 de noviembre. Entrevista con Flavia Romero, del FPDS, candidata por la lista Azul, Roja y Negra.
Este domingo 28 de octubre era la fecha fijada por la justicia electoral para las elecciones de la Junta Vecinal del Barrio 21-24, la villa más grande de esta ciudad, luego de dos años de demora y de postergar la fecha, que inicialmente sería el 7 de octubre.
Desde Marcha entrevistamos a Flavia Romero, candidata a presidir la Junta Vecinal por la lista Azul, Roja y Negra.
¿Cuánto hace que vienen trabajando para estas elecciones?
Venimos trabajando hace mucho tiempo. Hace dos años que la Junta actual tendría que haber llamado a elecciones y no lo hizo. Después de mucha lucha que hicimos las vecinas, los vecinos, y las organizaciones, para que las elecciones se hagan, pudimos lograr y se decidió una fecha que fue este domingo 28 y la verdad que nos llevamos una gran sorpresa con lo que estaba sucediendo ahí. Los vecinos iban y no se encontraban en los padrones, los datos de los padrones estaban mal hechos, le decían a los vecinos que no era una obligación de votar, o los mandaban a otra escuela (a votar) y no estaban ahí.
¿Cómo interpretan lo que sucedió?
La verdad que nosotros creemos que esto es un fraude, nosotros venimos laburando con el juzgado, para que estas elecciones hayan salido lo antes posible, para elegir la Junta Vecinal que nos represente acá en el barrio. No es que esto se hizo de un día para el otro.
¿Por qué son necesarias estas elecciones?
Esta Junta Vecinal actual está con el macrismo, no queremos al macrismo en el barrio. Queremos que se elija una Junta Vecinal, queremos que la gente decida su voto, a quien votar, queremos unas elecciones limpias, transparentes, que sepan que los vecinos pueden elegir libremente quien los represente en el barrio. Nos presentamos como la lista Azul, Roja y Negra, para poder ganar la Junta Vecinal y lograr trabajar más con el barrio, porque lo necesitamos. Queremos luchar para mejorar y vivir en mejores condiciones y tener un barrio digno.
¿Cómo está conformada la lista en la que estás?
Nosotros estamos conformando la lista Azul, Roja y Negra que está integrada por muchas organizaciones sociales del barrio, que venimos laburando en el barrio desde hace mucho tiempo. Pudimos lograr algo histórico que es juntar a 11 listas en un lema que se llama Tierra, Techo y Trabajo, para poder sacar al macrismo del barrio. Para nosotros es algo histórico poder juntar muchas listas para luchar por una misma causa que es el tema del barrio.
Ayer hicieron una conferencia de prensa
Ayer fuimos a la legislatura a denunciar, para que se viralice todo lo que está pasando en la 21, porque para nosotros y nosotras es grave esto de que nos pongan trabas. Sentimos un fraude, no quieren que haya elecciones en el barrio, pero vamos a continuar con esto porque las elecciones se tienen que hacer limpias y transparentes y que los vecinos y vecinas decidan a quien quieren votar.
Organización de las necesidades
La resolución de la interrupción del comicio, dictada por el Poder Judicial de la CABA, del fuero Contencioso Administrativo, entre otras cosas reconoce una serie de deficiencias que el propio juzgado no ha podido organizar y anticipar, con la seriedad que merece un acto electoral que involucra a miles de habitantes de esta ciudad, interesados en participar y gestionar condiciones de vida más dignas. Una decisión que va en desmedro de la población, de la villa más grande de la Ciudad, cuyos derechos son vulnerados sistemáticamente por un estado que debiera garantizarlos.
En la Villa 21 hace dos años que se venció el mandato del actual presidente de la Junta Vecinal, que es Cristian Heredia. Los vecinos y las vecinas vienen trabajando para que se regularice esta situación y se hagan las elecciones previstas. La Junta Vecinal actual que responde al oficialismo de la CABA no da respuestas a las necesidades del barrio.
Con la organización de las y los vecinos del barrio se logra dar respuestas colectivas frente a las problemáticas cotidianas, de las cuales el estado de la ciudad está ausente, como falta de urbanización, pasillos inundados, recolección de residuos, falta de cloacas y las crecientes dificultades por la falta de suministro eléctrico, entre otras problemáticas como la salud, la educación y la falta de vivienda , entre las más importantes. La organización colectiva también es un resguardo frente a la creciente militarización y criminalización de la pobreza que ha tenido y tiene como escenario los pasillos de la villa y que cada vez con mayor frecuencia produce hechos de violencia de parte del estado contra las y los habitantes de esos barrios, a los que debiera proteger.
Democracia participativa
El padrón electoral, para estas elecciones, está integrado por casi 20.000 habitantes del barrio. Las listas que están oficializadas y registradas en la Justicia, son la Multicolor y la Verde, que responden a Macri, y otras diez listas que resisten las políticas de gobierno, que confluyen bajo el lema Tierra, Techo y Trabajo. Por fuera de ambos lemas además está la lista Amarilla. Una de estas listas, la Azul, Roja y Negra aglutina a 13 organizaciones, movimientos sociales y vecinos encabezada por Flavia Romero del FPDS, Lucas Bogado del Movimiento Evita y Dagna Aiva de la CTA Autonoma. Además está integrada por delegados y delegadas de Barrios de Pie, la CCC, el FOL, el Frente Popular Venceremos, la Poderosa, la Corriente Popular Juana Azurduy, La Emergente y vecinos y vecinas representativos de su sector.
Entre las otras diez listas están organizaciones como el MP La Dignidad, La Campora , el Partido Obrero, Barrios Peronistas, entre muchas listas vecinales, que ponen su esfuerzo para terminar con el macrismo en el barrio.
La posibilidad de elegir a las juntas vecinales en las villas es fruto de una conquista de las organizaciones territoriales de villas y asentamientos, con la sanción de la Ley 148/1998, en el año 1996, cuando se consigue que el Jefe de Gobierno pueda ser elegido por el voto directo de las y los habitantes de la CABA. La Ley 148/1998, de la CABA, de “Atención Prioritaria a la Problemática Social y Habitacional en Villas y Nucleos Habitacionales Transitorios” establece en uno de sus apartados “garantizar a través de la representación vecinal el adecuado ajuste entre las necesidades de los pobladores y las respuestas conducentes para la satisfacción de las mismas y un adecuado mecanismo de gestión y promoción social”.
Territorios con historia
La Villa 21-24 se encuentra al sur de la Ciudad de Buenos Aires, sus límites perimetrales son la calle Luna, el Riachuelo, calle Iguazú, calle sin nombre y ferrocarril Belgrano, limitando con los barrios de Pompeya y Parque Patricios. Las llamadas “villa miseria” fueron creciendo en número y cantidad. El último relevamiento que impulsó el gobierno, revela que en la ciudad hay 55 de villas y asentamientos populares. En Barracas, en terrenos con basurales y bañados hoy viven alrededor de 100.000 mil personas, con sus historias, con familias que crecen y se reproducen en el lugar.
Tal como puede rastrearse el origen de esta villa se ubica entre 1950 y 1960 con unas pocas viviendas precarias que surgen de la necesidad de vivienda de las personas que llegaban a la ciudad en búsqueda de trabajo. En los inicios, había muy pocas casas, que fueron construidas por los habitantes del barrio quienes comenzaron a urbanizar la zona. Desde el inicio se las denominó “villas miseria”, como sinónimo de las condiciones de precariedad de las mismas y como modo despectivo de referirse. El crecimiento de las migraciones, los insuficientes alojamientos y la falta de recursos hace que estos asentamientos urbanos hayan crecido de manera exponencial, sin infraestructura, sin servicios y con condiciones paupérrimas de habitabilidad. El crecimiento de estos núcleos de asentamiento urbano fue combatido por sucesivos gobiernos militares que intentaron erradicarlos, con distintas metodologías.
El proximo 11 de noviembre se estableció como nueva fecha para la realización de las elecciones de la Junta Vecinal que se organizan para mejorar las condiciones de vida de las personas que habitan en la villa más grande y numerosa de esta ciudad. La organización y la gestion colectiva de las necesidades el mejor antídoto contra la desidia y el desaliento.
Referencia: El barrio obrero conocido como Villa 21-24 Zabaleta