Por Nadia Fink
Clara de Marco y Solange Cecatto tienen 12 años y juegan al básquet desde siempre. Hoy no las dejaron jugar en Junín con el equipo mixto del que son parte. La Federación provincial no acepta que jueguen en un equipo de varones. Se inició la campaña para que puedan seguir avanzando en el campeonato regional.
Clarita de Marco y Solange “La China” Cecatto tienen 12 años. Las dos son de Bragado, provincia de Buenos Aires. Las dos son amigas, y compañeras. Juegan al básquet en Los Millonarios, el club de su ciudad, desde el primer partido. Clarita es la capitana y referente.
El domingo pasado, su equipo ganó la clasificación de la Liga de Chivilcoy, en la categoría U13. Como en esa Liga no hay básquet femenino, ellas sólo pueden jugar junto con varones. Hoy tenían que jugar el regional en la ciudad de Junín, para clasificar al provincial de clubes U13, pero la Federación de Buenos Aires les cerró las puertas. Según el reglamento, una niña puede permanecer en la Asociación hasta los 12 años, pero no tiene lugar en la Federación provincial. Sin embargo esto no se lo habían comunicado cuando comenzaron la eliminatoria. Ahora que clasificaron a la etapa regional, donde ganaron la zona, y después de todo el esfuerzo, no las dejan continuar con el resto de sus compañeros.
Por eso, sus familias intentan contarlo por todas partes. Como dice Gastón de Marco, papá de Clarita, “No puedo entender cómo en 2018 se le prohíbe a dos niñas jugar al básquet junto a sus compañeros varones, si desde el principio este equipo fue el que clasificó, ellas también dieron todo para sumar, me da mucha bronca que no las dejen continuar solamente por su condición de mujer”. “Esto es de otro siglo. No se puede jugar con los sueños de los chicos”, afirmó desilusionado Gastón.
La historia recuerda la de Juana, la futbolista que cuando tenía 11 años no pudo competir en torneos con su equipo infantil del Club Mercedes por ser mujer. Cuando quisieron ficharla, la Liga Mercedina de Fútbol informó que no la podían aceptar porque el Consejo Federal de la AFA les dijo que el reglamento no permite un equipo mixto. A pesar de la campaña que tuvo mucha difusión en redes sociales, Juana terminó en un equipo de fútbol femenino en River Plate. Viaja desde Mercedes para seguir su carrera allí. En ese entonces, la fundamentación era el respeto al interés superior de la niña, previsto en la Convención Internacional de Derechos del Niño, y su derecho a no ser discriminada y a poder disfrutar del deporte como una actividad lúcida y recreativa.
Pero volviendo a Clarita y Solange y sus ganas de jugar al básquet, Ayelén Cortez quien fuera entrenadora de Los Millonarios, nos cuenta: “Fue muy difícil, fui la primera mujer en dirigir en esa liga. Ahora vivo en la Ciudad de Buenos Aires, pero el domingo viajé a Bragado a ver el partido que jugaron para clasificar. Todos conocen a Clarita: vive a la vuelta del club y está siempre ahí desde que camina. Entra cuando abren las puertas y se va cuando la echan o la madre la va a buscar para q vuelva a su casa”.
Cortez se está moviendo para que se conozca la situación porque “es muy doloroso que no la dejen jugar en estas instancias”. Y agrega, con firmeza: “Espero que la Asociación de Básquet de Chivilcoy apoye a su jugadora y que haga lo que tenga que hacer para que pueda jugar, o que sea un precedente y que las nenas tengan el respaldo que se merecen. La Asociación de Básquet de Chivilcoy no tiene liga femenina pero tampoco hace nada para que las nenas después de los 12 años puedan continuar jugando”.
Clarita y la China no quieren quedarse afuera de un lugar al que llegaron en equipo y poniendo esfuerzo y corazón. Lo piden ellas, sus compañeros, y lo afirma Gastón de Marco: “No creo que dos nenas de 13 años puedan alterar un campeonato de básquet infantil. Por favor, ¡déjenlas seguir hasta el final!”.